Me muevo de un lado para otro en lo que despierto, no sé qué hora es ni cuanto hemos dormido pero lo que si se es que mi novia no está a mi lado.
- Dani – la llamo, pero no tengo respuesta
Me siento, el cansancio viene conmigo me estiro soltando un bostezó, mi vista da un giro sin encontrar a mi novia, y cuando iba a levantarme ella aparece con una toalla envuelta alrededor de su cuerpo.
- Buenas noches – ¿noches? – porque pones esa carita – llega a donde estoy y me da un beso.
- Pensé que eran ¡días! – agarro de la cintura para caernos a la cama ella encima del mío.
- Amor…… – me mira con esos ojitos marones claros muy hermosos que me tienen hechizada – tengo mucha hambre.
- También yo – respondo besando sus labios - ¿Qué hora es?
Hace el esfuerzo de mirar al reloj de la mesita sin soltarse de mi agarre.
- 8 y media – vuelve a querer separarse, pero la detengo – ¡Andy!... mi vida, quisiera seguir, pero mi cuerpo no da para más, además que, creo que debemos comprar una cama nueva.
- Una más pequeña estaría bien – recibo un golpe en los hombros – está bien una más grande entonces – se levanta, pero antes me da un beso que gustosamente recibo.
- Báñate en lo que voy pidiendo la comida – entra para el armario – ¿quieres algo en especial?
- A ti – respondo rápido
- ¡No te estoy bromeando! – grita desde a dentro
- Lo que prefieras está bien amor.
Me levanto y voy directo al baño, enciendo el agua caliente y cuando está en temperatura correcta ingreso, me enjabono todo el cuerpo para seguir con mi cabello, cuando estoy masajeando mi pecho siento un dolor – auch – veo que tengo una mordida – cosas que suelen pasar cuando realizas ejercicios – me rio, no es la primera vez que Daniela me deja marcas, hasta parece que le encanta dejarme. !esta marcando territorio!, eso me encanta.
Termino y salgo para vestirme con una ropa cómoda, al salir del armario mi mandíbula cae al ver el desastre que esta nuesta habitación, nuestras ropas tiradas y algunos de los juguetes que usamos – diablos a veces debo controlar mis ganas sexuales – me acerco a recoger una por una y guardarlas para luego mandar a limpiarlas, hago lo mismo con la ropa tirada para meterlo al canasto.
Voy casi ordenando hasta llegar a la cama, esta que rechina cuando gateo para sacar la sabana – ni Edward Cullen se atrevió a tanto – me rio de la estupidez que acabo de decir.
- Carla – hablo cuando este fue contestado – necesito que te encargues de la remodelación en mi departamento.
- Si Sra. Lombardi, algo en particular
- Mi habitación, quiero una nueva cama un poco más grande de la que tengo y de una vez aprovecha para ver lo de la oficina de mi novia y de la terraza – voy explicando lo que necesito.Cuando Daniela se mudo estaba pensando remodelar pero entre los trabajos no pude y lo dejé pausado, hasta ahora que quiero retomarlo.
- De acuerdo Sr. Lombardi – la oigo suspirar un poco, sé que me quiere consultar, pero no se atreve.
- ¿Qué?
- Lo de la oficina, su novia cancelo – escucho su nerviosismo – ella mismo me llamo y dijo que hablaría con usted.Ese era el pequeño detalle, no le había dicho a Daniela.
- Ok, el resto lo necesito para mañana a mas tardar – debo hablar con Dani, en si no le había comentado creí que le gustaría – eso es todo – cuelgo.
Bajo directo para ver que hace mi novia, la encuentro echada en el sofá y con el móvil en la mano.
- ¿Cansada? – llego a donde esta y le doy un beso en la frente
- No tanto – se levanta y se acomoda con un cojín – te has visto al espejo
- ¿Tengo algo malo? – camino al espejo de la sala, sin duda tengo más chupetones un poco no visibles – debería hacerme un tatuaje de tus labios, se ven muy lindos
- Pensé que no te gusta los tatuajes – camino hasta llegar y sentarme a su lado.
- No, pero podría considerarlo – frunció las cejas, obvio que no lo haría – hay algo que debemos hablar.
Quise seguir, pero mi móvil empezó a sonar, camino hasta llegar al otro lado donde está, es Carla quien me llama.
- ¿Qué paso? – pregunto mirando a mi novia que frunció las cejas.
- Srta Lombardi, ya programé la remodelación para mañana a las 9am, también confirme con los encargos del edificio, solo me preguntan si estará usted presente o alguien mas quien los reciba – no lo había pensado, Dani estará ocupada y yo tengo una reunión.
- Será mi madre … espera – me acerco hacia mi novia – amor, ¿mañana tienes libre en la mañana?
- Si, hasta las 12 aprox ¿por? – se sienta para verme mejor
- Van a venir para remodelar la habitación y hacer unos cambios – suelta una risa por que sabe a lo que me refiero
- Está bien, los atiendo – le doy un beso en los labios
- Carla, Daniela estará aquí – le respondo – solo tienen antes de las 12 para terminar.
- Entendido – cuelgo la llamada.
Iba a tirarme con ella en el sofá, pero el timbre suena.
- Debe ser la cena – mi novia me dice.
Me paro para ir abrir y efectivamente es nuestra cena, agarro y voy a la cocina para servir para ambas, llevo a la sala donde esta Daniela.
- ¿Agua? – pregunto entregándole el plato de comida
- Un refresco de naranja – asiento y regreso a la cocina por ese refresco.
Agarro el refresco de naranja y una botella de agua para mi, cojo dos vasos y adicional los cubiertos salgo para ir a la sala.
Abro la mesa del sofá para acomodar la comida, una vez lista nos ponemos a comer viendo la serie de dragones.
- ¿Se que quieres decirme algo? – le pregunto por que hace un momento esta que mira y voltea.
- No te veo cansada ¿Por qué? – le sonrió mientras como mi pasta.
- Si lo estoy pero no tanto – tomo un poco de agua – me ayuda mucho el gimnasio.
- Desde que estamos, no te e visto ir al gimnasio
- Por que lo practico contigo – recibo un golpe despacio en mi hombro.
Seguimos comiendo, en serio que nuestro estómago nos agradeció mucho, después de terminar lleve los platos al lavadero, mañana se encargará Rosita de limpiarlo, regreso y veo a mi novia tirada en el sofá cama y con una manta.
- Te veo muy acomodada – camino echarme a su lado
- Solo faltabas tu – me enamoro más de ella ‐ ¿por qué te gusta? – señala la tv.
- Los libros son buenos, tenia que verlo también sobre todo por Raenyra, ella es muy linda y ni que decir de Daemon – rodo los ojos
- Si claro – ironizó – tu me ibas a preguntar algo
Trato de recordar pero parece que se me olvido, le dije que luego le diría o hasta recordarme, seguimos viendo la serie, ella enredo nuestras piernas, nos tapamos con la pequeña manta, mientras veía yo le hacía cariñitos.
- Ya recordé – hable de repente haciendo que mi novia salte – lo siento, el miércoles nos vamos a Boston después de tus clases.
- Si recuerdas que también trabajo
- Pero la jefa te dice que te tomes un descanso – no pierdo la concentración en la tv, la escena esta interesante.
- Ya todos quisiéramos tener una jefa como tu – se levanta un poco para mirarme.
- ¿Quieres besarme? – rodo los ojos – puedes hacerlo, no me niego a que me beses.
- ¿Así? – asiento, besa mis labios – ¿volveremos ese mismo día?
- Tu eres la jefa, tu decides amor.
Nos fundimos en un beso apasionado pero sin llegar a poseer nos en el deseo sexual, después de separarnos seguimos viendo la serie – no entiendo como que al principio todos odiamos a Daemon para ahora amarlo – el personaje ha avanzado para bueno, puse pausa viendo que mi novia se quedó dormida.
Cargue a Daniela con sumo cuidado, no pesa demasiado a decir verdad, se agarra de mi cuello.
- Puedo caminar – habla en susurro.
- A mi me gusta cargarte – soltó su risa – no mates el momento del romance amor – le di un beso en la frente para seguir mi camino a la habitación.
°°°
Aterrizamos al fin, en el hangar privado nos espera el chófer quien nos llevará a nuestro penthouse, mi novia no quería dejar el trabajo tirado así que le pedimos intercambiar el descanso con Lucas, acepto pero con la condición de que le llegue un autógrafo en alguna polera de Tatum, por otro lado esperamos a mi novia que salga de la universidad para poder viajar alistarnos para el partido de hoy.
- ¿Cuánto tiempo tenemos? – pregunta Maya medio soñolienta.
- Almorzamos y luego vamos, el partido es a las 7 – miro la hora y estamos a tiempo – no te vayas a dormir – avisó.
- Y perderme al papi churro de Tatum – sus ojos brillaron al mencionarlo.
- No se nada de basquetbol – habla mi novia y Tina se ofende – ¿contra quien juegan?
- Raptors – respondo entrelazando nuestras manos.
Bajamos y cada uno se fue a su departamento, Tina también tenía al igual que Maya el mismo penthouse, las 3 en un edificio.
- ¡Que bien te queda el verde! – rodeo por la cintura a mi novia cuando se ve al espejo.
- Yo también quiero el autógrafo de Jayson Tatum – hace puchero.
- De todo el equipo de Boston si deseas – dejo un beso en su cuello.
Lo que veo solo me demuestra lo sexy que está mi novia, ella esta con una playera verde con el logo de los “Celtics”, al igual que un shorts blanco, y unos tenis blancos, por mi parte opte por una playera de color blanco y un shorts negro un poco más largo que la de Dani, mis tenis blancos y una gorra, todo patrocinado por los “Celtics”.
Después de almorzar salimos todos para el estadio, todos vestidos de los colores para apoyar a nuestro equipo, mis padres nos iban alcanzar en el estadio, pero antes de ingresar Maya y mi novia decidieron darse una pintada con los colores del equipo en el rostro – según Maya hay que mostrarles que somos la mejor hinchada – dos rayitas de verde con blanco y mi novia adicional se compro una vincha para completar su look.
El estadio está lleno, rápido ubicamos nuestros asientos, mi madre jalo a Daniela y a Julieta para estar juntar – el trio de cirujanos – me recuerda no sé por qué a trío de Greys Anatomy diría que sería Cristina, Meredith y Miranda obviamente comprenderán a quien es mi madre en este trío.
- ¡De que te ríes! – me empuja Maya.
- Los 4 me hacen recordar a la serie de Grey Anatomy – levantó los hombros señalando a los involucrados.
- ¿Quiénes serían? – Tina pregunta y volteamos a verlos – obviamente mamá sería Miranda – lo mismo pensé.
- Conociendo a Julieta técnicamente diría que es Arizona por su carrera pero mas lo veo como Amelia – Tina y yo soltamos risas, estaba en lo cierto, Julieta sin duda tenía la personalidad de Amelia.
- ¿Tu novia? – ahí si estábamos en duda, Dani no es Cristina – no se, puede que sea ¿Arizona? – negué.
- Tiene buen corazón, es estudiosa o bueno antes pero tu – me señala Maya – la has corrumpido, así
- Lo iremos analizando – estoy de acuerdo.
No mencionamos a Max por que sabíamos a quien se parecía – de por si ya lo llamábamos señor plástico – dejamos muestra conversación para prestar atención al juego que ya iba a empezar.
Al salir los Boston todos aplaudimos y gritamos para apoyarlos, Dani cambia de asiento para estar a mi lado, me agarra por la cintura, el toque hizo erizar mi piel, y la electricidad que ella solo puede realizar a mi cuerpo.
- ¿Como van los puntos? – me susurra al oído.
- 1 punto por tiros libres – explicó – 2 puntos si están dentro de la línea – señaló a las líneas de campo – y 3 si el jugador los tira fuera de las líneas.
- ¡oh! – aprieta su agarre y apoya su cabeza en mi hombro – son bien altos.
- Si, el requisito para este deporte es medir más de 1.90 – su cara de asombro me da ternura – juegan 4 set, los minutos van entre los 15 o 12 algunas veces.
Empieza el partido y el estadio se lleva de silenció todos atentos a las jugadas, el primer puntos es para los Boston comandado por J.Brown, se me hizo raro que Tatum no juegue talvez ingrese más tarde.
Es emocionante cada punto, sin duda los Boston llevan la delantera prácticamente tienen el partido ganado, en los tiempos compramos cervezas – obio yo pedí agua al igual que mi novia – adicional Dani pidió nachos, en cada juego le iba susurrando a Dani quienes eran los jugadores, rápido comprendió como se juega el basquetbol.
- ¿Supongo que tu juegas? – me susurra al oído, su aliento me golpea y calienta mi cuerpo.
- Solía jugarlo – bebo mi agua – ahora no mucho, el trabajo.
- Deberíamos un día jugar
- ¿Segura? – asiente – si gano quiero mi premio.
- No seas tramposa – se queja – terminaras ganándome por que tu ya sabes.
- ¿A ti que deporte te gusta? – no le había preguntado o ya olvide, espero que no me haya dicho.
- Ummmm – sospechoso que no hace deportes esta señorita – no soy fans de los deportes – y como hace para mantener ese cuerpo en forma – en últimas creo que me gusta el básquet.
- Buena elección – la beso en la mejilla.
Seguimos atentos, ya en el último tiempo mi novia empezó a beber un poco de cerveza a exigencia de Maya quien como el resto estaban casi ebrios, al final debo decir que no jugo Tatum, pero a pesar de su ausencia se ganó 97 a 93 no está nada mal.
- ¡Fin del juego! – Maya hablo levantando su brazo – deberíamos ir a saludar al equipo, somos las mejores fans – puso su cerveza en el asiento y camino para al filo de las gradas.
- ¡Esta algo ebria! – le digo a Tina – deberíamos rescatarla o dejamos que haga un bochorno – frunció las cejas.
- ¡Ve! – me grita cuando los jugadores empiezan a salir del campo.
Camino tan de prisa para llegar a Maya, cuando llego al filo vemos pasar a Derrick quien al vernos nos saluda y pasa de lago, tras de el vienen los otros del equipo, todos nos saludan y cuando era turno de pasar de los dos mejores se paran.
- Hola chicas bellas – saluda Jayson con su gran altura, parecemos como dos hormigas a su lado – adivino, quieren autógrafos – mira a Maya y después su vista se para en mí.
- Por mí no hay problema – habla Jaylen – lo que sea para nuestras mejores Fans – su mirada se posa en mí, al menos él es menos alto.
- Ya que insisten – esta vez hablo haciendo que ellos suelten sus risas – en la espalda y con cariño – me volteo dándoles la espalda y de paso el plumón que tenía Maya.
- Deberíamos algún día salir por unas copas – hablo Jayson firmando mi polera
- Avísennos y ahí estaremos – asegura Maya – al menos yo quiero ir a la gran final, después que hayan ganado.
- Mente positiva ¡eh! – termina de firmar Jayson para pasar ahora por darle a Brown para que me firme.
Ambos terminan conmigo para después seguir con Maya.
- ¿Estarán para el siguiente juego? – pregunta el más moreno
- Podríamos, pero en su mayoría si te aseguro que estaremos, sobre todo en las finales – Maya en si está más coqueta con ellos. ¡muchos tragos de más!
- Buenos chicos, gracias por los autógrafos – hablo antes de que Maya se salte en unos de ellos – el tiempo pasa rápido cuando no queremos, descansen y buena suerte para el próximo partido.
- Espero verlas en los próximos partidos – habla el más alto – cuídense – se despide con su mano al igual que el moreno.
Agarro a Maya para volver al grupo, al llegar nos invaden en preguntas y les muestro lo que firmo ambos jugadores, pero a quien no le gustó mucho la idea fue a mi novia.
- Parece en vez que hayas ido a pedirles autógrafos, fueron a coquearlos – su voz sale como reclamo.
- ¿Por qué lo dices? – pregunta Maya, voleándome – al parecer te recuerdan lo de la última vez – miro a mi novia que esta con la cara roja.
- ¡Maya por qué dices esas cosas! – le doy un golpe suave, se queja un poco.
- Buenos vayámonos – habla mi madre apareciendo detrás de Dani - ¿ustedes van algún lado o se regresan?
- Nos regresamos a New York – en seco responde Dani, pasa por mi lado y empieza a salir.
- Problemas en el paraíso – me muestra una sonrisa al cual ignoro sin escuchar que mas va decir el señor plástico.
Rápido salgo detrás de mi novia, paso por la multitud viendo como otras personas que quejan, ignoro a cada uno de ellos y logro agarrar su mano de mi novia, trata de soltarse sin embargo yo más la agarro, la jalo para ir por un lado y salir a la calle, ahora soy yo quien la jala guiándola el camino para nuestra camioneta.
- Ya suéltame – se queja – Andy, te estoy pidiendo que me sueltes – la escucho molesta.
- ¿Puedo saber por qué ahora te comportas así? – la suelto, pero dejo un espacio entre las dos – Dani si no me dices que es lo que sientes no poder saber qué te pasa.
- ¡Nada!, tu sigue coqueteando con todos los que se te cruza – me mira a los ojos, ¿Qué?, bufo ante su acusación – ni siquiera disimulas.
- ¿Esta celosa?, ummm – me agarro la barbilla – yo no he coqueteado con nadie, tampoco tengo la necesidad de hacerlo
- Yo lo vi – fruncí las cejas – los gigantes te comían con la mirada, ¿ya te conocían?
- Me conozco a todo el equipo la verdad – ahora parece más molesta – Dani, me gusta el básquet, soy fans de un equipo en cuanto tuve la oportunidad de conocerlos acepte, no es que haya salido con algunos de ellos – empiezo a explicar pero al parecer no me ayuda, porque mi novia esta echando humo – el echo amor es que solo los veo como alguien a quien conozco, nada más.
- Vamos a casa, de verdad estoy algo cansada - y un poco ebria diría yo.
Antes de que se aleje la tomo de la cintura para juntar nuestros labios, aunque un poco se resistió termino correspondiendo el beso, agarre sus mejillas para profundizar, nos separamos por falta de aire.
- Tus celos me encantan – dejo un picó – me excita.
- A mi me molesta – me agarra de los cachetes – tu solo me debes de ver a mi
- Solo te veo a ti – junto nuestros la labios pero fuimos interrumpidos por los demás.
Nos dividimos en dos, los 4 cirujanos se fueron en la otra y nosotros los mortales nos fuimos en la otra, no estaba de acuerdo pero ni caso me hicieron.
- Solo serán unos minutos hasta que lleguemos al restaurante – habla mi padre sin perder de vista el camino.
- Estaba muy celosa hoy – se queja Maya – es la primera vez creo que te ha visto salir ¿así?.
- A decir verdad me salió un poco celosa ¿y no se por que? – me defendí.
- Maya es una mala compañía
- ¡oye Tina! – grito
- Tu eres la que estaba coqueteando con ellos – confirmo es cierto.
- Entonces dices que Daniela esta celosa de mi – sonríe pero se le acaba cuando Tina dice.
- No, ambos no dejaban de vista a Andy – no puede ser – y tus intentos de seducción con ellos no funciona.
- Ay que advertirle a Dani cuando vas al gimnasio – rodé los ojos.
- Ella sabe que solo la veo a ella - me defiendo
- Lo sabemos, el enamoramiento te pego tan fuerte que no ves lo que pasa a tu alrededor – ¿Qué?, que no veo – hija no solo fue el echo de los chicos sino fue también de los chicos que estaban a nuestro alrededor.
- Las novias estaban que te matan con la mirada – y recién me entero.
- No será que a Dani la veían – ella también se vea muy sexy con ese look.
- Digamos que tienes un buen cuerpo – bufe, se que van a exagerar – hasta yo tengo muchos celos, creo que si fuéramos oficial – muestro mi cara de horror – solo digo, pero sería tóxica novia.
- Eres – dijimos a la vez con Tina.
- ¡Malas! – gruñe.
En el camino fuimos hablando y molestando a Maya, era cierto que al menos Daniela no me había visto salir así en las calles, siempre ando con ropa casual y en lo privado solo cuando estoy con ella, bueno yo al principio un poco que me fastidie como ella iba vestida pero no le preste atención por que al final de todo la única que podía tocar es cuerpo bien tallado ella yo.
Llegamos y cenamos algo ligero, al menos mi novia ya estaba más tranquila, no se que habrán hablado entre ellos pero algo me decía que tocaron el tema de su internado, los 3 incluidos Julieta querían que Daniela ague su internado en Boston, también debatimos el gran juego de hoy, se vienen más esta vez tenemos que ganar un anillo más tenemos un buen equipo.
Cansadas subimos al penthouse, teníamos que madrugar al menos Dani y yo para ir hacia New York, no quiere perderse sus clases y no era quien para impedirlo, puse la alarma y con mucho pesar nos levantamos.
- Srta. Lombardi – habla el capitán – todos esta listo, partimos cuando nos indique.
- Ya podemos – conteste.
Ni bien me senté me quede dormida tenia mucho sueño.
- Amor, llegamos – me levanto con un poco de dificultad – ¿estas bien? – asiento.
- Solo estoy un poco cansada – camino a la salida.
Dani entrelaza nuestras manos y me guía hasta llegar a Jean quien nos venia recoger, solo viajamos las dos, Tina, Maya al igual que mis padres decidieron quedarse unos días más, yo no podía por que no quería dejar a Daniela aunque ella me dijo que no había problemas pero me negué.
°°°
Me pongo al día en los avances del proyecto, no pensé estar atrasada en tantos por más que quiera pasar tiempo con mi novia, nuestros trabajos nos impedían.
- Carla – llame a mi asistente – puedes venir a mi oficina.
- Dígame Srta. Lombardi – la veo entrar en cuanto colgué el teléfono.
- Prepara los documentos del condominio, quiero para antes de las 4, también termina de confirmar para remodelación de las oficinas del Sr. Jackson…
- El Sr Jackson, llamó para decirme que quiere reunirse personalmente con usted, le programe la reunión para mañana a las 10 – otra vez, me esta cancelando cuando lo mando al equipo.
- ¿Era para hoy a las 4? – quería hablar pero la interrumpí – llámale y dile que si no viene hoy me tendrá que esperar hasta fin de año.
- Esta bien – iba a irse pero regresa – llamo la Srta. Daniela, quería saber si pasara por ella.
- Yo la llamo, prepara todo lo demás. – asiente y se va.
Reviso unos documentos legales y los firmo.
- Hola amor – su dulce voz llega a mi oído.
- ¡No me mates! – aviso – mando a Jean para que te recoja.
- Mmm, no mi vida – la escuchó suspirar – tomaré taxi para el trabajo, nos vemos en casa.
- Lo siento, había olvidado unos pendientes, pero prometo recompensarte.
- No es necesario, nos vemos cuídate – corta la llamada.
Casi termino de revisar todas estas carpetas, cuando dan las 4 y entra mi asistente.
- Srta Lombardi – habla con nerviosismo – el Sr Jackson no pudo venir pero mandó a su hijo
- Hazlo pasar – veo salir y luego entrar con un chico.
Es alto, cabello rubio piel blanca sus ojos negros, es guapo, recuerdo alguna vez haberlo visto, espero que no sea unos de los que me cogí aunque no me recuerdo los nombres o como eran hay algunos que se me recuerdan, solo en esos casos fingió que los conozco, como en este caso que parece que el me recuerda, sonríe hasta dejarme sus dientes blancos.
- Tyler Jackson – estira su mano – Andrea Lombardi.
- Sr Jackson – correspondo a su saludo – puede sentarse – el asiente y se sienta en frente mío – Carla me avisas cuando llega Tina, sale de mi oficina.
- Tyler – habla – llamame Tyler, ya que una vez cogimos no quiero que nos hablemos con formalidades – ¡carajo!.
- En el trabajo soy profesional – el sonríe – entonces dígame Sr Jackson - ¿por que sonríe?
- En pocas palabras y para no perder el tiempo, mi padre compró una casa para mi y mi futura esposa – empieza a contarme aunque no se por que me quiere contar su vida – como regalo de bodas y quiere algunos cambios, según me ha informado eres muy experta.
- Solo dígame que cambios quiere hacer – digo seria.
- Eso lo dejo a tu profesionalismo – se acerca más a mi escritorio, pone sus manos en mi escritorio – la verdad me importa poco lo que agües, se lo buena que eres – su doble sentido lo capté.
- Esta bien – me alejo cuando el se acerca más a mi espacio – le enviaré los cambios que voy a realizar y cualquier modificación me informa.
- Claro – saca su móvil – por fin tendré el número de la gran Andrea Lombardi.
Le extendió la tarjeta donde esta el número de mi empresa y personalmente esta el número de mi asistente.
- No me darás tu número personal - pregunta sorprendido digo.
- Trabajo es trabajo – coge la tarjeta – algo más.
- Si, ¿cuando quieres que follemos otra vez? – sin escrúpulos pregunta ¿Qué no se iba a casar?
- Nunca – me pare de mi silla – es mejor que se valle, y para su calentura es mejor ponerse hielo.
- No quieres repetir lo bueno que fue esa noche – se acerca a mi.
- Si lo hubiera sido ya lo habríamos repetido – noto su inconformidad – así que mi asistente te avisara cuando tengo el primer plan de cambio – le abri la puerta.
- Bien que lo disfrutaste, pero tu vales la pena esperar para una simple follada – camina a la salida – llámame cuando quieras.
- Ya quisieras – pensé.
Después de terminar salí de la oficina, me subo a la camioneta luego Jean empieza a conducir, me acomodo hoy a sido un día de full trabajo y terminar con el idiota de Tyler en mi oficina, no recuerdo como es que lo conocí pero se que puede que nuestro encuentro fue en Boston hace más de año y medio, el condenado se puso más en forma, esta musculoso pero ahora solo pienso en el cuerpo de una sola persona que esta esperándome.
- Andy – miro a Jean – me ausentare dos días, lamento informarte así.
- No te preocupes – algo me había comentado Daniela – resuelve todo lo que tengas y si necesitas ayuda avísame.
- ¡Gracias! – sigue conduciendo.
Miro la hora y es un cuarto para las 11, tengo mensajes de mi madre preguntando como estoy – respondo que estoy bien – Tina solo me envió los documentos para el nuevo proyecto, ella ahora esta revisando la administración de los hoteles en los ángeles, Maya por otra parte prepara la publicidad para nuestra nueva cadena de cafeterías.
Cuando iba a llamar a Daniela quien se me adelante es mi abuelo.
- ¿Qué paso? – que me llame a esta hora es muy raro.
- Requiero tu presencia en Boston – suena tranquilo – tenemos que hablar.
- ¿Cuándo?
- Mañana, te estaré esperando – cuelga la llamada.
- Jean, avisa que preparen el avión para mañana al medio día – asiente.
Llegamos, subo directo al departamento, entro todo esta en silencio, supongo que mi novia está durmiendo, voy directo a la cocina para tomar un poco de agua, una vez que terminó voy directo a la habitación – ella está ahí, dormida como un ángel – es tan hermosa, camino a su lado para darle un beso en la cabeza, solo se mueve y suelta un ronroneo – te quiero.
Voy directo a la ducha termino de secarme y me pongo la pijama, voy de mi lado y con mucho cuidado me subo sin hacer mucho moviendo para no despertarla, rodeo su cintura para luego quedarme dormida - ¡mañana otra vez de vuelta a Boston!.
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Amor con aroma de café
Teen FictionAndrea Lombardi, una chica que lo tiene todo a su corta edad, trabajo y sus mejores amigas. Un día decide comprarse un departamento y mudarse hasta que un día entró a una cafetería y vio a Daniela una mesera con unos hermosos ojos. Desde entonces A...