Capítulo 26 parte II

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Hay momentos en la vida que te marcan para siempre, momentos en los que puedes decir qué hay un antes y después de ese acontecimiento

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Hay momentos en la vida que te marcan para siempre, momentos en los que puedes decir qué hay un antes y después de ese acontecimiento.

Para la familia Hoffmann ese momento dio lugar el 20 de octubre del 2028 a las 8:05 pm, un momento en el que el mundo de todos tembló, un momento que los dejó sin aliento, donde supieron con una gran certeza que su vida no sería la misma después de conocerla.

Narel Hoffmann Russell un ser que se ganó el corazón de cada uno de los presentes quienes se siguen cuestionando ¿Es real? ¿Realmente pasó? La respuesta es que sí, pasó y la tienen en este momento frente a ellos.

—Estás temblando. —le dice Bárbara a Alexa quien sigue mirando a la pequeña, viendo cómo está abraza a su padre quien está irreconocible.

«¿Cómo puede estarse riendo así? ¿Cómo se reencontraron? ¿Alexander supo que Alena estaba embarazada cuando se fue?» Son miles de preguntas las que la avasallan «¡Por Dios!» Piensa cuando Narel se voltea por un segundo sonriéndole, es increíble, no hay palabras para describir lo que sucede en este momento en su ser, al ser melliza de Alexander y teniendo esa conexión con él puede sentir, casi tocar, el sentimiento de Alexander en este momento.

—No sé qué me pasa, Barbie siento que mi corazón está a punto de estallar, no lo puedo describir... No tengo las palabras. —responde Alexa quien se aferra al cuerpo de Juanito.

—Es que es el efecto de mi ángel, azul, así me siento yo cuando la veo. —le dice Juanito quien en vez de sentir envidia o coraje hacia Narel por estar llamando toda la atención sabe que así debe de ser, que su ángel es digna de toda admiración y que él nació para seguirla y hacerla feliz.

Su enorme corazón, su ternura tienen la capacidad de entender que él es valioso para todos pero que este momento, es de Narel.

—Es preciosa y tengo miedo la verdad ¿Qué crees que quiera decirme? Siento que está furiosa conmigo. —le dice Bárbara con honestidad, una corriente eléctrica la avasallo cuando escuchó la petición de la princesa.

—Yo hablo con ella mami, no te preocupes. —le dice Juanito tranquilizándola.

—Gracias cariño.

—Bienvenidos. —habla el chef, inclinándose 90 grados saludando a la princesa.

Los camareros extienden las sillas para que los invitados se sienten.

—Mi cielo es el lugar...—Alena trata de detener a Narel quien se acerca a la cabecera pero está la mira ceñuda.

—¿No puedo? —le pregunta y Alena asiente, pensando que tal vez a Jared no le incomode.

—Ella puede sentarse donde guste, está bien. —dice Jared llegando con Melissa, ambos buscan la mirada de Narel quienes le sonríen.

—Vengan, siéntense aquí. —les ordena, y Melissa y Jared asienten colocándose a su lado algo que no le gusta para nada a Alexander quien toma su puesto en el lado opuesto de la cabeza, a lado de él Alena y Alexandra, en medio de Alena y Jared queda Juanito y en medio de Melissa y Alexa, Bárbara.

AnheloDonde viven las historias. Descúbrelo ahora