── ❝ 𝑰𝒏𝒕𝒐 𝑻𝒉𝒆 𝑮𝒓𝒆𝒚 ❞ ──

𝑪𝒂𝒑𝒊𝒕𝒖𝒍𝒐 𝒗𝒆𝒊𝒏𝒕𝒊𝒏𝒖𝒆𝒗𝒆.

"...I'm dying again
I'm going under (going under)
Drowning in you (drowning in you)
I'm falling forever (falling forever)
I've got to break through..."

-Going Under, Evanescence.

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-¿Me puedes explicar qué fue lo que pasó ayer?

Sasaki miraba seriamente la espalda desnuda de su pareja, esperaba paciente una respuesta a las actitudes cuestionables del alfa durante su práctica de kendo el día anterior.

El silencio a pesar de ser algo común, en ese momento no significaba un buen augurio.

-Poseidón, te estoy hablando. Quiero saber qué ocurrió en la práctica.

El rubio no volteaba a verlo, tampoco contestaba. Su día apenas estaba comenzando y lo último de lo que quería hablar era del altercado ocurrido el día anterior.

-¿Vas a contestarme acaso? Poseidón, me acaban de notificar que estoy fuera de la selección de kendo y por ende del club también -Quería mantenerse serio, sin embargo, el motivo por el que había despertado había sido por el mensaje del profesor Seigen.

Estaba fuera del club de kendo gracias al incidente y su orgullo como aprendiz en el arte de la espada fue pisoteado por una poderosa razón.

"Debe existir una buena razón para que Poseidón actuará de aquel modo durante la práctica..."

O eso quería creer él.

El alfa soltó un gruñido de advertencia cuando Sasaki le tocó el hombro.

"¿Por qué tanta insistencia? ¿Quieres irte con el bastardo y dejarme? ¿Acaso quieres ser la prostituta de todos los del equipo? Maldita zorra"

-¿Tanta es la necesidad de ser follado por otro que me exiges una contestación? -Poseidón seguía sin voltear, trataba de permanecer inexpresivo, no obstante, su lenguaje no verbal expresaba su clara molestia.

"Es sólo una jodida clase extracurricular. Hay cientas de ellas en esta maldita universidad"

-¿De qué estás hablando? Sólo iba a entrenar y continuar con el legado de mi padre y su familia...

-Claro, porque estar arriba de un alfa es sinónimo de entrenar, ¿no? -El aroma desprendido por el alfa delataba lo furioso que se sentía, casi igualando el sentimiento de pesar que cargaba su omega.

-No tengo por qué escuchar eso otra vez. Me voy -Kōjiro soltó un suspiro, debía levantarse para asistir a clases y rogar el perdón del profesor Seigen si deseaba volver a entrenar kendo.

No podía regresar a Japón con esa deshonra a sus ancestros espadachines.

-TÚ NO TE VAS DE AQUÍ.

Sasaki se quedó quieto. Era la primera vez que oía la voz de mando del rubio, así como esa sensación de querer salir corriendo porque algo malo podía ocurrir invadiendo su ser.

-Dije que me voy de aquí -Apenas y puso un pie fuera de la cama, sintió un fuerte tirón que le hizo volver, su instinto gritaba que huyera mientras que su lado racional deseaba pelear por aquello que amaba aún si era contra su pareja.