Por ti... [KookV]

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Viernes por fin, el utlimo día de examenes, que tenían a todos los alumnos estresados y completamente ansiosos porque llegaran a su fin.

Por suerte, tanto Taehyung como Jungkook estaban haciendo un gran trabajo. Taehyung estudiaba y se esforzaba como nadie, tenía sus matrículas bien merecidas. Mientras que Jeon era inteligente, no le hacía falta casi estudiar, y aun asi sacaba notas bastante elevadas. Por lo que sus resultados iban a ser buenos.

Aunque cierto pelinegro tenía la cabeza mas ocupada por un castaño de piel acanelada que por los examenes...

Desde que se enrollaron en los baños del instituto, y Taehyung le pidio perdon. Jungkook no ha dejado de repetir esa escena y sus palabras una y otra vez en su cabeza.

Las palabras de Namjoon tambien aparecían cada dos por tres, martirizandole, y provocando que un poco de panico se instalase en su pecho.

El no podía estar pillado por Taehyung... ¿Verdad?

No... eso era imposible....

...

Su parte racional le recordaba una y otra vez que esas sensaciones que Taehyung le despertaba, y que nadie mas provocaba en él, no podían ser casualidad.

Pero Jungkook se negaba. Se negaba a dejarse llevar, a admitir que en realidad, quiza Namjoon tenía razon.

Se negaba a abrir su corazon y que Taehyung se hiciera con el poder de romperlo cuando quisiera...

No es que no confíe en Taehyung... extrañamente, el castaño había conseguido que Jeon lo viese como un igual, que confiase en el y se ganase su respeto. Pero aun asi.... abrirse a alguien... No... Jeon se llenaba de miedo y molestia solo de pensarlo.

Incluso aunque Taehyung le hubiese estado evitando estas ultimas semanas, ahora eso ya estaba solucionado. Y ademas, la explicacion de Kim era bastante aceptable.

Era normal que todo aquello le estuviese impactando y le diese un poco de miedo. Despues de todo, era cierto, las cosas entre ellos eran muy intensas... desde su primer contacto visual, ambos supieron que la chispa y el brillo de los ojos contrarios no era igual al de los demas.

Sus ojos brillaban, gritaban los que sus bocas no decían al mirarse.

Incluso al discutir, ambos encontraban la forma de que sus palabras llevasen esa batalla a su terreno, convirtiendola en un competicion por ver quien hacía caer al otro. Batallando tan bien contra el otro, que al final acababan cayendo los dos ante el contrario.

Sus cuerpos se complementaban, encajando a la perfeccion, entendiendose sin necesidad de palabras.

Sus pieles se fusionaban convirtiendose en una sola, transformando aquel contacto en la mas exquisita de las tentaciones.

Sus labios se deleitaban fundiendose con los del contrario, derritiendose con el sabor que tan locos les volvía.

Todo era intenso y unico, era practicamente imposible conseguir aquello con nadie mas.

Casi como si el destino les hubiese puesto en el camino del otro, con la intencion de que se encontrasen y disfrutasen de esa conexion y de lo bien que se complementaban.

Eran perfectos el uno para el otro, como si fueran almas gemelas.

Completamente diferentes, pero al mismo tiempo, completamente iguales...

Tanto que daba miedo.

Asi que Jungkook lo entendía, entendía porque el castaño estaba aterrado y tambien entendía porque necesitaba tiempo.