𝗜 𝗸𝗻𝗼𝘄 𝗜'𝗺 𝗻𝗼𝘁 𝘁𝗵𝗲 𝗼𝗻𝗹𝘆 𝗼𝗻𝗲 || 𝗠𝗶𝗴𝘂𝗲𝗹 𝗗𝗶𝗮𝘇

•22•

𝗢𝗹𝗶𝘃𝗶𝗮 𝗞𝗲𝗲𝗻𝗲

Ya hacían quince días desde lo ocurrido en el instituto.

Me encontraba muy mal desde entonces, me preocupaba dónde podría estar mi hermano y, a la vez, lo que ocurriría con Miguel.

Mi padre también lo estaba pasando mal, se pasaba el día borracho y apenas apareciendo por casa.

Ese día volvía a clase y no estaba lista, sinceramente. Encima habían cambiado a Aisha de instituto por lo que sólo tenía a Sam.

En la entrada del instituto me encontré a Sam, esperándome.

-Hola-me saludó-. No sabía si querías que te esperara, pero he pensado que te serviría de apoyo.

Asentí.

》¿Aún no sabes nada de Robby?

-No-respondí-. ¿Vamos dentro?

No em apetecía hablar de nada de eso. Solo quería hacer las clases e irme a mi casa.

Ella asintió y ambas entramos al instituto encontrándonos con un control de seguridad.

Nos revisaron la mochila a Sam y a mí.

El guardia me devolvió la mochila, dándome luz verde para pasar.

-Gracias-le dije.

Solo tuve que dar unos pasos dentro para darme cuenta de que muchas personas, especialmente chicas, murmuraban sobre mí. Y no era por ser egocéntrica, me estaban mirando sin disimulo alguno.

-No les hagas caso-me dijo Sam al darse cuenta.

Continuamos caminando hacia las escaleras. Esas escaleras donde ocurrió lo peor de esa pelea.

No pude evitar recordar a Miguel cayendo desde arriba, a Robby con esa cara de preocupación, a Tory golpeándome...

-Olivia-dijo Sam tomando mi brazo.

Me aparté de su agarre.

》¿Todo bien?

La miré con una mueca.

-Tengo que salir de aquí-dije para luego caminar rápidamente hacia la salida.

[...]

La puerta de mi casa se abrió dejando ver a mi padre.

-¿Qué te ha pasado?-cuestioné al ver su cara toda golpeada.

-Nada, no te preocupes-respondió.

-¿Dónde estabas?

-En un bar, en la cárcel y luego en el hospital-contestó.

Lo miré sorprendida.

-Joder.

-¿Tú no deberías estar en clase?-cuestionó.

-Sí, pero... no puedo-respondí.

Me miró con una mueca triste.

-En algún momento tendrás que enfrentarte a ello-mencionó-. Cuánto antes mejor. Enséñale al miedo quien manda.

Le sonreí.

-Gracias, papá-le dije-. Ahora deberías ducharte, hueles fatal.

-Ya me lo han dicho-mencionó.

Rodé los ojos, medio divertida.

[...]

De nuevo estaba ahí, en el control de la puerta del instituto. Me dejaron pasar pues, literalmente, llevaba lo mismo que el otro día en la mochila.

Al dar unos pasos dentro pude volver a notar los murmullos a mi alrededor.

Por un momento estuve apunto de achantarme, pero respiré hondo antes de acercarme a las chicas.

-¿Queréis decirme algo?-les cuestioné en un tono duro-. Decídmelo a la cara.

Las chicas me miraron en silencio.

》Era lo que me imaginaba.

Me giré y me fui de allí con una sonrisa en la cara.

25•03•2024

Capítulo corto.

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