Mi Primo y yo

Capítulo 8

Relata Win

Me siento nervioso no sé cómo va reaccionar Bright después de lo que le dije anoche, es que me carga que me controlen, me levanté tarde así que bajo almorzar, le pregunto a nana Godji por mi primo y me responde que va almorzar en su habitación, le pido lo mismo, seguro Bright está enojado conmigo.

Llega la tarde noche y llegan mis padres, bajo a saludarlos también abrazarlos, los echaba mucho de menos, detrás de mis padres llegan los padres de Bright y nos juntamos todos en el comedor. Cuando están sirviendo la comida entra Bright y se sienta frente a mí, lo miro de reojo, algunos golpes en su cara aún están visibles, le preguntan por ellos y lo único que le pido al universo, es que no les diga a mis padres que bebí alcohol.

Responde pausadamente lo sucedido sin dar ningún detalle, solo que lo hizo para defenderme, por fin puedo respirar, no les dirá nada, cuando termina la cena Bright se levanta despide de todos y se retira, detrás de él me retiro yo, corro para alcanzarlo en el pasillo, lo nombro... -Bright espérame... me responde... -Dime... -Te quería pedir disculpas por lo de ayer... -No te preocupe... él levanta su mano me acaricia suavemente la mejilla, por inercia cierro los ojos cuando... -Es que Bai tenía miedo que les dijeras a mis padres que ingerí alcohol... -Tranquilo Winnie, jamás te traicionaría... mis ojos se abren muy grandes y sonrojado le doy las gracias antes de entrar a mi habitación. Una vez estando dentro de mi dormitorio me afirmo en la puerta y me arrastro por ella hasta el piso, que te pasa Win, no puedes sonrojarte cada vez que tu primo te toca.

"¿Bright dónde estás?", pregunto, pero no responde, estamos en la universidad y hay pocas personas, un compañero de Bright me entrega un mensaje, en él decía, "te espero en el salón 9 del 5 piso" subo, cuando entro al salón está oscuro, pero siento unas manos que cubren los ojos, ¿Quién es?... esa voz la reconozco.

Me gira y con la tenue luz distingo su rostro... -Bai porque me mandaste ese mensaje... sin alejarse de mi responde... -Quería verte, en realidad moría por verte... abro mis ojos por el asombro, toma mi bolso y lo deja en el piso, caminamos a un costado del salón... -Winnie quiero decirte que, aunque seamos primos, no puedo dejar de pensar en ti... - ¿Qué?... le pregunto... comenzó a caminar hasta que choque con un escritorio, me afirmo en este, ubica cada una de sus manos en mi costado enjaulándome... -Dime que no sientes lo mismo e inmediatamente me detengo.... siento en el escritorio tratando de alejarme un poco... -Bai, yooo... estaba muy cerca de mi rostro, no podía hablar claramente, me toma de la cintura, me acerca quedándome una pierna en cada lado de él.

No puedo pensar con su exquisito aliento chocando en mi cara... - Dime que no te gusto, que no sientes nada por mi... me susurra cada vez más cerca de mis labios, Dios dame cordura... -Dime Winnie, dime... es lo último que escucho antes de que atrapara mis labios con los suyos en un beso suave muy tierno, sus labios son exquisitos, la cordura se fue cuando su lengua invade mi boca, diablos besa maravillosamente, le sigo el beso cuando me toma de las caderas y me acerca a su cuerpo, enrollo mis brazos en su cuello para profundizar el beso, siento su hombría crecer cada vez más entre mis piernas, el roce de su miembro con el mío, hace que gima en el beso, separándome.

No me di cuenta cuando me desabrocho la camisa, me besa el cuello, cuando comienza a bajar con sus besos, luego baja hasta atrapar uno de mis rosas y pequeños pezones con sus hermosos labios lo que me arranca un gemido más fuerte de lo que me hubiese gustado, intento detenerlo... -Bai nos pueden sorprender en el salón, esta posición es demás... me interrumpe besándome los labios hambrientamente, no me escucha... -Baii podemos seguir en otro lugar, nos vamos a meter en un problema si nos encuentran así... - Winnie, este piso está en mantención nadie viene entre semana... me dice sin despegarse de mis labios.

El rose me tenía más que excitado, era imposible pensar así, Bright iba bajando con sus besos por mi abdomen, mientras desabrochaba mis pantalones, no soy capaz de pararlo, quiero sentir sus labios sobre mi miembro, esto es el cielo, no hay duda, cuando iba atrapar mi hombría con sus labios, me despierto totalmente excitado, diciendo su nombre. No puede ser necesito ir a médico, me estoy volviendo loco, no puedo tener esos sueños con él, por Dios es mi primo.