Mi Primo y yo

🔥🔥🔥Capítulo 55 🔥🔥🔥"Noche de bodas" y "Viaje de bodas"

Relata Bright

Subimos al ascensor, abrace a mi ahora esposo... -Te dije que te ves precioso... -Y yo te lo dije... -No... -Oye como que no... intenta darme un golpe en el pecho, pero le alcanzo a tomar la mano, se abre la puerta del ascensor acá es, lo tomo en brazos y antes de abrir la puerta, me dice... -De verdad lo harás... -Es la tradición, lo bajo una vez dentro... -Guauuuu es preciosa... lo abrazo por atrás... -No tanto como tu bebé.

El abrazo en un principio era sin malas intenciones, pero sentir su olor me enciende, le doy un beso en la nuca, hecha su cuello para el lado, le doy un pequeño beso, se gira y camino sin dejar de besarlo hasta llegar a la pared, me separo unos centímetros de él... -Te amo Winnie... -También te amo.

Comencé a desvestir, mientras nos besábamos desesperadamente, en un movimiento se invierte la situación y yo quedo contra la pared y ahora él me desviste, desabotona mi camisa, luego baja hasta mi pantalón, roza sus manos en mi hombría mientras me baja el cierre, de un momento a otro me deja de besar, respirando agitadamente sobre mis labios me dice... no te muevas.

Al segundo después de haberme hablado, siento su lengua y sus labios deslizándose en mi erección, mierda es tan malditamente bueno, comienzo a maldecir, me suelta, se levanta, lo beso tomándolo de las nalgas, mientras enreda sus largas y esbeltas piernas en mis caderas.

Lo llevo a la cama, está completamente desnudo para mí... -No me mires así Bai... se le tiñen las mejillas de rosa... -Cómo no te voy a mirar, eres lo más hermoso que he visto en mi vida... sonríe y con sus piernas me acerca a él, me da un beso tan apasionado, que en ese instante me hundo en su mar, llevamos un ritmo como las olas en una tormenta, gime cada vez que me siente tan profundo como me es posible.

Nos miramos a los ojos, me pierdo en ese mar de sensaciones, hundo mi rostro en su cuello, besándolo devotamente, siento sus manos en mi espalda, me aprietan como si fuera su tabla de salvación en este océano de placer, Dios es tan malditamente bueno, entro y salgo a mi voluntad, de esta tormenta, esa sucia melodía de nuestros gemidos y gruñidos, de nuestras piles chocando se deja escuchar, como una gran sinfonía.

Nuestros cuerpos bañados en sudor, con esa sensación que solo se sientes cuando se está con la persona correcta, dice mi nombre al momento en que está a punto de terminar la tormenta, nos dejamos caer al fondo del océano, para subir juntos a flotar en él, me desplomo en su pecho diciéndole con casi mi último aliento... -Te amo tanto bonito.

Caemos abrazados a un sueño reparador, para luego despertar y volver a tomarlo... -Winnie eres como una droga, jamás podré dejarte... -Entonces no me dejes, porque te necesito, te necesito tanto dentro de mí... esta vez él ha tomado el control, me cabalga sin piedad mis manos en su cintura hacen su trabajo... -Quiero todo de ti Bai... -Tienes todo de mi bebé.

Sigue su carrera descontrolada, sus movimientos sensuales me hacen alucinar, lo presiono contra mí, él disfruta de cada una de las sensaciones que le ofrezco, yo disfruto sus exquisitos movimientos, sube y baja sobre mí, hace querer más y más lo tomo fuertemente de las caderas levantándolo y dejándolo caer.

Cada vez que toco ese punto sensible, sus ojos se encienden para mí, siento su fuego me quiero quemar, fundirme con él, somos uno solo en este momento y quisiera quedarme así hasta el fin de mis días... -Bonito si sigues así será imposible que aguante más... -¿Quién te dijo que debías aguantar más?... me dice con la voz entrecortada

-Vámonos al cielo, volemos juntos Bai... la explosión nos lleva más allá de este planeta, Dios como amo a este hombre, luego de este viaje, nos quedamos abrazados intentando recuperar el aliento, esperando que nuestros corazones se calmen, así abrazados, nos quedamos dormidos.