En ese momento cerré los ojos, pensaba que caería al suelo, que encima soy muy patosa como dice mi madre y yo siempre le respondo que viene de familia, te lo juro ya lo estaba imaginando, tendría que vivir con la vergüenza y no podría volver en un cierto tiempo a esa discoteca. Cuando es la única que me gusta de esa ciudad. Un poco dramática yo, pero ya me estaba poniendo roja y sin mirarle a la cara al chico, que tenía esa intuición por la forma de agarrarme por las manos tan grandes y por la fuerza que utilizó al sujetarme de la cintura.
Así que sin esperar mucho, porque parecía que había pasado una eternidad, me aparté de él y abrí los ojos, ahí me di cuenta que adiviné, era un chico vestido de negro con una camisa blanca y una chaqueta de cuero, es lo primero que me fijé, tengo una obsesión con la ropa. Tampoco me dió tiempo a nada más ya que lo tenía de espaldas, fué rápido el chico, pero la verdad su estilo me gustó mucho. Pero se bajó de la tarima y adivinad que, era amigo del grupito que me robó el globo de antes, que decepción. Así que pasé totalmente del tema, pero me había llamado mucho la atención pero mi ego y orgullo estaban primero, yo iba primera.
De repente justo cuando bajé de la tarima apareció Sergio, que casualidad parecía que estaba todo calculado, aún más borracho desde el último momento que lo había visto, ya que llevaba unas mejillas tan rojas como un tomate a punto de ser ketchup. Pero esa no era la cuestión sino que por detrás de él apareció su ex pareja, sonriendo con un poco de malicia, la que hace dos días no quería saber nada de él con la excusa de que era mucho mayor para ella y aún no estaba preparada para el futuro. Típico. Excusas baratas.
Así que como buena amiga que soy y con el carácter que tengo hablé con ella cara a cara, sin vergüenza alguna, ya que parecía que no estaba tan borracha, diciéndole que primero de todo tuviese las cosas claras en su corazón, que no jugase con él ni con sus sentimientos y sobretodo que lo cuidase ya que tenía el presentimiento que se irían juntos a casa de ella porque justo vive delante y ya estaban cogiditos de la mano y había recordado que Sergio pidió venir con dos coches. Ahora lo pillo. Evidentemente todo eso se lo dije con una cara de asco no la soporté nunca, como si la pareja hubiese sido yo, es lo que hay soy demasiado expresiva cuando me interese que se noté aún más. Y allí aprovechó la situación un poco incomoda que había entre nosotras y se lo llevó. Me quedé un poco pensativa, preocupada y sola.
Menos mal que quedaba nada para cerrar la discoteca, era bastante tarde, ya que quedaba poca gente dentro y seguro algún que otro en la sala de fumadores, así que decidí ir primero al baño y lavarme un poco la cara para poder ir para casa sin que se me notase tanto que había bebido y antes de entrar cruce miradas con el grupo de amigos que estaban por irse, uno de ellos me penetraba solo con la mirada, pero el chico que me salvó no estaba con ellos. Ni pregunté. En verdad no tenía derecho a preguntar si no los conocía de nada.
Cuando salí del baño reconocí esa chaqueta de cuero, ese estilo de vestir, estaba parado justo delante de la puerta del baño, como si esperase a alguien. De repente agarró el teléfono y llamó. A veces tengo que reconocer que soy muy cotilla así que me enteré de toda la conversación acercándome poco a poco a él, sus amigos ni le avisaron de que se fueron para casa, de verdad vaya amigos que tiene pobrecito. Tengo que admitir que aproveché la situación para poder hablar con él y tener nuestro primer encuentro. Como si fuera de película. O igual a la de mis padres.
ESTÁS LEYENDO
ALL-IN, CORAZÓN
De Todo¿Y si os explicase la historia de dos personas que pensaban que no estarían nunca destinadas a conocerse por sus diferencias, sus emociones, sus defectos, sus familias, sus personas ideales y sobretodo sus edades? Xenia una chica un poco bajita, con...