Capítulo 12 (1/2)

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❤️
Xenia

(DENTRO DE LA PESADILLA)

Todo estaba oscuro a mi alrededor, llamaba a mis padres pero mi voz no sonaba, como si estuviese muda, tampoco veía nada ni con las gafas, solo había una luz al final del túnel que iluminaba una salida a lo lejos, pero aunque corriese no podía alcanzarla. Cada vez estaba más cansada me sangraban los pies y empecé a escuchar voces dentro de mi cabeza. Unas voces que aún reconocía y que ya empezaba a odiar.

X - Eres una inútil, no vales nada, nunca vas a conseguir nada de tus objetivos de la vida, tus padres no te quieren solo a tu hermana, tu chico esta con otra porque no eres lo suficiente para él, nunca serás feliz todo el mundo lo sabe, no conseguirás nada con ese cuerpo tan delgado, feo y con cicatrices, ningún amigo te quiere realmente todos te utilizan y te manipulan a su antojo. Eres una marioneta. Este será siempre tu infierno princesa. Para que vas a vivir. ¿No lo ves? Desaparece ahora mismo Xenia. Para siempre. No cuesta tanto.

Desperté de un salto llorando y gritando de un susto, era tan real, que sin querer desperté a Dereck pero instantáneamente me abrazó sin pensarlo dos veces dándome caricias en la espalda suaves.

- Estoy aquí cariño, no estás sola. - dijo medio dormido - Cuando estés preparada me lo puedes contar, estaré a tu lado pase lo que pase.
- Perdona por despertarte, he tenido una pesadilla. - dije llorando - Se que no es real, pero duele tanto. No puedo más, mi mente ...
- Ven, abrazame te protegeré de todo siempre, seré tu protector. No estás sola mi vida, me tienes a mi. Ahora duerme.

Luego de eso dormimos plácidamente sin ningún problema, como unos bebes. Sin ninguna pesadilla más. Hasta que alguien empezó a llamarme por teléfono, que pesada era la gente de buena mañana, no dejan descansar a uno tranquilo. Eso es un delito.

(LLAMADA ENTRANTE)

- Xeeeeeeeeniiiiiaaaa, levanta YA. Me tienes que contar muchas cosas. - dijo gritando - ¡ Siempre me tengo que enterar por los demás o que!
- ¿Quien eres? - dije aún dormida y sin mirar quien me había llamado. - Oye te has equivocado eh. Relaja.
- Cariño quien llama a estas horas, pueden esperar un rato más. - dijo Dereck con voz ronca. - Quiero dormir un rato más.

En ese momento miré el teléfono y estaba alucinando, no era ni Dafne ni Sergio que por cierto los echaba de menos desde que se fueron de vacaciones a Noruega, era mi primo Alex que hacía desde la muerte de nuestra abuela que no hablábamos pero supongo que había visto muchas publicaciones por las redes sociales, quería saber el "chisme" y seguro que mi madre ya se había chivado de que estaba en casa con un chico. Así de intenso es él, que le voy hacer le quiero tal y como es, es mi primo de sangre no puedo hacer nada ya. Le dije que viniese a pasar la semana aquí, no lo dudó ni un instante ya que necesitaba desconectar, lo habían echado del trabajo, su chica bueno ese tema es un poco delicado y como siempre se apoyaba en mi, así aceptó rápido.

Al final comimos seis personas en mi casa por que mi primo bajó lo más rápido que pudo, mi madre era la que más contenta estaba, por primera vez después de tanto tiempo eramos más de cuatro comiendo en casa, era un momento para recordar, pero yo estaba un poco distraída, aún recordaba la pesadilla, esas palabras que estaban poco a poco a comerme la cabeza y empezando otra vez a sonar incluso las de Eric. No podía olvidarlas. ¿ Tenían razón ?

No comí mucho, mi estómago estaba bastante revuelto, lo único que quería era volver a la cama, taparme hasta arriba, allí me sentía un poco más segura, como cuando eres pequeño y te dicen que hay un monstruo debajo de tu cama y la manta es tu escudo. Pero no podría dormir ya que empezaba a tener miedo de volver a tener otra pesadilla de esas y que Dereck no estuviese a mi lado para calmarme.

Pero por desgracia y sin ganas, luego de comer lo tuve que llevar a la estación de tren para que se fuese a su ciudad ya que tenía que estudiar para un examen importante que tenía el día siguiente para poder entrar a una academia, no podía dejar que faltase aunque quisiese que se quedara, fue una despedida un poco dura pero a la vez me sentí extraña. Realmente no me entendía, ni a mi mente con esas pesadillas, con esas palabras, ini a mi corazón con el amor con Dereck.

Después de eso estuve unos días sin verlo, eran mensajes secos y poco informativos, así que entre una cosa y otra le pedí a mi primo si podía ir con él una semana a su pueblo que estaba a tres horas hacía el norte, para desconectar, para adentrarme en mi mente y mis pensamientos y poder saber que quiero realmente, si seguir en ese trabajo, si quiero una relación estable con Dereck y si realmente esa pesadilla era una advertencia sobre algo. Mi cabeza estaba a punto de estallar, se lo conté así rápido a mi primo lo que estaba pasando y me ayudó hacer una pequeña mochila para poder "sobrevivir" una semana allí. Me sugirió subir y acepté.

Así que Alex y yo agarramos su coche y pusimos rumbo a Llavorsí, un pueblecito de pura montaña. Con unas casitas preciosas y pura naturaleza. Tranquilidad. En invierno me encanta por que siempre esta nevado y sabía que estábamos apunto de ello ya que empezaba hacer mucho frío, por eso me hizo agarrar alguna ropa de invierno, se que hice mal pero solo le dejé un mensaje de texto a Dereck, era incapaz de decírselo en persona ni en llamada. Fuí una cobarde. Siempre digo que las cosas más importantes se dicen en persona pero por que a él no... No entiendía.

( MENSAJE DE TEXTO)

Dereck, supongo y espero que leerás este mensaje cuando yo esté a punto de llegar a mi nuevo destino, que creo que es mejor ya que no tienes carnet conducir, no he podido evitarlo, supongo que aún soy débil con mis sentimientos y emociones, pero más a delante te explicaré el por que estoy haciendo esto y me comporto así, te lo prometo. No me llames, no me escribas. No lo hagas. Necesito tiempo para aclarar mi cabeza. Y si escucho tu voz o veo un mensaje tuyo querré verte, volver y no puedo. Aún recuerdo muchas palabras dolorosas de las pesadillas y de cierta gente, no puedo evitar que me hagan daño porque ya esta echo y no quiero hacertelo a ti. En una semana vuelvo, te lo prometo. Lo siento. De verdad, perdoname. Perdona mis actitudes de cobarde.

ALL-IN, CORAZÓNDonde viven las historias. Descúbrelo ahora