𝗔𝘀 𝗕𝗲𝗮𝘂𝘁𝗶𝗳𝘂𝗹 𝗔𝘀 𝗔 𝗙𝗹𝗼𝘄𝗲𝗿 - [ᴊᴏᴏʏᴇᴏɴ x ᴊᴜɴʜᴀɴ]

47

―¡Bienvenidos a la excursión anual de jóvenes exploradores!

Los aplausos resonaron entre aquella parte descampada del bosque. Todos dejaron caer sus bolsos y se unieron a la acalorada bienvenida por parte de la mujer que parecía ser la líder. Era aproximadamente la una p.m. cuando arribaron al lugar donde pasarían el fin de semana, y la mayoría no podía evitar sentirse eufóricos.

SeungMin era uno de ellos. Tal era su emoción que le resultaba imposible ocultarla. Daba leve brincos en su lugar mientras aquella sonrisa de oreja a oreja se expandía en él. A pesar del peso de cargar los bolsos, no podía dejar de curiosear cada detalle que veía, siendo bastante inquieto.

Gunil, por su parte, solo escondía sus manos en los bolsillos de sus pantalones, dando una ligera ojeada al lugar que ya conocía. A diferencia del semi pelirrosa, él estaba más curioso por saber quiénes eran los que habían asistido a la actividad. Tal vez y, con algo de suerte, se topaba con una de sus pocas amistades.

La reserva natural en la que se encontraban era una propiedad privada bajo una agencia ambiental que abarcaba desde la ruta por la que habían llegado, hasta el inicio de las montañas. Ellos se encontraban en un punto medio, donde el clima era fresco durante las horas de sol, pero frío en la noche. El verde de los árboles estaba en ese punto en el cual comenzaban a florecer, atrayendo consigo a miles de insectos que no dudarían en picarlos. Detrás se alzaba un bosque tan frondoso que, cualquiera que se atreviera a una excursión solitaria, probablemente tendría que gritar por ayudar para regresar. Sin embargo, al frente, un enorme lago de agua cristalina provocaba que el resplandor sobre ella diera de lleno en su rostro. Ese era el espacio libre que usarían como campamento para no tener que estar inciertos en pleno bosque.

La simple idea de recorrer esos estrechos caminos era extasiante. SeungMin agradecía con su vida que su madre no le hubiese prestado atención y hubiera enviado todo lo que él creyó innecesario. Desde cosas tan como lo eran ligas para el cabello, hasta aquello que realmente lo salvarían si terminaba en problemas, como por ejemplo una caja de fósforos y una linterna.

En sus manos sostenía su celular, asegurándose de tomar fotografías de cada mínimo detalle que se presentara. Quería capturar todo lo que viviera, y no le importaba para nada la extraña mirada que Gunil le dedicaba luego de ver cómo tomaba fotos de las hojas secas en el suelo.

―Por ser el primer día, los dejaremos libre para que puedan armar sus carpas y acomodarse. Esta noche tendremos nuestra fogata de iniciación y mañana daremos el primer recorrido. ―Nuevamente los aplausos resonaron―. Algo más. Debido a que son un grupo demasiado grande, deberán formar equipos de a dos y compartir carpas, esto para no ocupar todo el espacio y que podamos tener un mejor control de que nadie vaya a perderse. ―Todos voltearon a sus alrededores, sonriendo hacia aquellos amigos que habían viajado con ellos. SeungMin mordió su labio inferior, queriendo ser un poco más discreto antes de mirar en la dirección donde se encontraba Gunil. Sin embargo, cuando lo hizo, este lo observaba fijamente, pensando lo mismo que él―. Tienen toda la orilla del lago para armar sus tiendas, eso queda a su propia elección. No duden en llamar a cualquiera de nosotros, estamos a su completa disposición.