El departamento que la madre de Max es tal como lo recuerdo de cuando Anna vivía aquí con los niños. Marcus había pagado por las remodelaciones para que sus hijos tuvieran privacidad por lo que ahora habían tres habitaciones.
Theo está más que feliz de tener su propia habitación, mamá había parecido escéptica ante este nuevo cambio, pero incluso ella tuvo que admitir que el cambio era más que agradable. Yo mismo debo admitir que ver mis cuatro camisas colgando en el enorme armario incrustado es extraño. El departamento es el doble de grande que el lugar donde viviamos con papá y la mayoría de los muebles están incluidos. Claro mamá tomó la antigua habitación de Aaron, la cual está vacía por el traslado así que ella insisitió en que se quedaría con Theo hasta tener dinero suficiente para comprar una cama.
Pero finalmente con Theo habiamos accedido en dejarle a ella la que solía ser la habitación de Aurora. Y él y yo compartiríamos la habitación principal.
— Tony ¿Por que papá es malo conmigo? — Pregunta Theo esa tarde, estoy recostado en mi nueva cama, sintiéndome como un completo extraño, y Theo parece también estar sintiendose algo intimidado por el cambio, se recuesta junto a mi
Su pregunta sin embargo consigue tomarme por sorpresa.
— Papá no...— Comienzo, pero realmente no tengo una respuesta.
O tal vez sí. Pienso en lo que papá había dicho sobre Theo, sobre como no era su hijo.
Aún tengo que discutir con mamá sobre eso. Pero por ahora, debo tranquilizarlo.
— No lo sé, hermanito — Admito, acariciando su cabello castaño — Pero no voy a dejar que vuelva a hacerlo.
— ¿Que crees que esté haciendo? — Pregunta sonando triste
— No lo sé — Admito, sintiendome terrible por no tener las respuesta que necesita de mi — Iré a checar en él mañana, lo prometo
— ¿Puedes llevarle despensa? No quiero que tenga hambre — Pide con seriedad.
— Lo haré, lo prometo — Aseguro sonriendo lígeramente, porque incluso ahora con el ojo amoratado se preocupa por nuestro padre.
Consigo distraerlo un rato, poniendo un partido de futbol para ver con él, porque el mocoso adora ver incluso las repeticiones de la tele mientras que me explica que jugador está en que equipo.
Intento no ignorarlo demasiado mientras reviso mi teléfono, que se ha convertido en un completo album de fotografía de Max en la ultima semana, no solo porque la chica adora enviarme fotografías incluso se su comida, pero porque realmente no consigo creer que estoy con una chica tan jodidamente hermosa como ella.
— Goooooool — Grita Theo sobresaltandome con su festejo, pongo los ojos en blanco antes de incorporarme. Son casi las seis así que debo comenzar a alistarme.
Había hecho una muy buena propina en el bar, uno de estos ricachones había cometido un error al suministrar la propina y cuando se lo hice notar se habia limitado a decir que lo conservara. Y vaya que habia sido una buena propina.
Le habia comprado sus lanas a mamá tal como prometí, y una pelota nueva para Theo.
¿Para mi? Realmente habia dudao antes de gastar en una buena camisa y pantalón. Pero quería estar presentable para invitar a Max a cenar, sería nuuestra primera cita oficial y quiero que las cosas sean tan perfectas como es posible.
Así que dedico un rato a arreglarme, sintiendome algo extraño pero dispuesto a verme bien para ella. Al verme en el espejo realmente comienzo a considerar sacar el tiempo para ir nuevamente al gimnasio, mi abdomen no es lo mismo que era cuando tenía veinticinco y mis brazos podrian ser más firmes. Mi barba es corta e intento mantenerla así, por lo que me limito a retocarla en un par de lugares.
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Maldita Princesa - Una historia de Maldita Pelorroja
RomanceMaddison Francesca Zdorogzarkovitchdorv-Hyde. La hija preciada de uno de los hombres más ricos del mundo, la joya de la corona, según los medios, la consentida de los Zdorogzarkovitchdorv. La princesa mimada que siempre obtenía lo que quería. Era...