Maldita Princesa - Una historia de Maldita Pelorroja

1. Max

Una semana después de los eventos de la primera parte.

Despierto con la sensación familiar de presión en mi pecho, mi corazón latiendo con tanta fuerza que siento que sanldrá de mi pecho,  los gritos de Theo haciendome saltar de la cama.

Corro hasta él, una vez que descubrimos el anexo en la parte superior de la casa segura, fue más sencillo encontrar la forma de hacer sentir a Theo (y a mi misma) algo más tranquilo. El primero piso de la casa es un departamento de una planta con dos habitaciones, una pequeña sala con ventanas tinturadas. Theo y yo nos habíamos quedado en la casa segura mientras que Tony había salido, solo un par de días después en busca de mis padres, de respuestas.

Theo había llorado en un principio,  no queriendo dejar ir a su padre luego de que finalmente Anthony hubiera decidido confesarle sobre la muerte de sus padres. El niño ha estado teniendo pesadillas desde entonces. Lo que evidentemente es mala señal dadas las circunstancias. Corro hasta la habitación como lo he estado haciendo todas las noches. Sus gritos me rompen el alma, y me hacen recordar todas las noches que lloré por mi madre intentando encontrar consuelo solo para encontrar palabras fías. 

¿Como Tiffany nunca tuvo la bondad de cuidar de mi? Theo intenta fingir ser fuerte como su padre, pero en cuanto le ofresco un par de palabras dulces el niño se aferra a mi y llora, confesandome su miedo a quedarse solor y esta noche no es diferente.

- Theo, Theo - Llamo con cuidado intentando despertarlo mientras se sacude en sueños mientras grita 

- No...mami - Llora, antes de finalemente despertarse, se icnorpora asustado y me mira con verguenza.

- Hey, ya pasó...estás bien, estás aquí conmigo - Le  recuerdo con voz suave mientras acaricio su cabello, apartando el sudor de su rostro. The deja escapar un suspiro tembloroso antes de mirarme con tristeza, une petición silenciosa en su rostro - ¿Quieres que duerma contigo? - Pregunto, él asiente.

- Sé que soy grande, pero..- Comienza, intentado encontrar una excusa para su miedo, pero sacudo la cabeza antes de sentarme a su lado.

- Hey, yo también duermo con mis padres cuadno tengo pesadillas - Le aseguro - No hay que tener verguenza ¿Está bien? Especialmente no ahora

El asiente y se aparta un poco para darme espacio junto a él, abrazandome de la misma forma que he visto tantas veces hacer a Matt con mamá. Siempre me había parecido curioso como un niño tan grande podría considerarse aún un niño de mamá. Especialmente cuando en ocasiones había atrapado a Marcus acurrucado en el costado de mamá mientras ella lee una revista.

No importa que tan grande sean. Siempre serían nuestros bebés.

Theo me abraza con cuidado, permitiendome acariciar su cabello

- ¿Max? - Pregunta luego de un rato, su voz sonaba rota y triste

- ¿Sí?

- ¿Cuando va a volver papá? 

Tomo una respiració profunda, intentando encontrar la forma de responder sin dejarle ver mis propios miedos.

- No lo sé - Admito.

- ¿Y si no vuelve? - Pregunta incorporandose, sus ojos llenos de lágrimas - Si papá no vuelve yo...no quiero estar solo.

- No vas a estar solo - Le aseguro - Me tienes a mi, siempre me tendrás a mi.

El me mira por un largo rato, de la misma forma profunda y pensativa que suele hacerlo Tony mientras piensa su respuesta.

- Gracias - Dice finalmente antes de volver a abrazarme con fuerza - Gracias pro quedarte conmigo.