Novios por Contrato || Sungsun

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Estos dos últimos días habían pasado tan rápidos, así que cuando fue lunes Sunoo se vistió más sexy que otros días, habia leído en un artículo que era bueno incentivar con su imagen a la otra persona para que tenga deseos de él. Su ropa causó el efecto que quería porque cuando Sunghoon fue a recogerlo casi se lo come por completo, pero ambos lograron controlarse y fueron a estudiar.   

El día martes, Sunoo fue a ver la práctica de Sunghoon y luego terminaron dándose besos en el vestidor.

El miércoles Sunghoon tenía una examen y se demoró en salir de las clases, cuando salió se fueron a tomar unos helados y después caminaron hasta llegar a un parque en donde ambos se sentaron a respirar el aire limpio.

Y hoy jueves, Sunoo sube al auto de Sunghoon para que vayan a su casa, al llegar Sunoo se queda mirando a Sunghoon.

—Yo estaba pensando en que... no es necesario que—Sunghoon recibe una llamada.

—Sí... ya voy... estoy con Sunoo... ya mamá, ya voy al aeropuerto... en quince minutos llego—Sunghoon corta la llamada y voltea a ver a Sunoo—Otro día me lo dices, tengo que ir a despedirlos porque si no lo hago mi mamá va a decir que me deshereda.

Sunoo ve como el auto se aleja a rapidez constante, se siente desanimado, esta era su oportunidad para decirle a Sunghoon que ya no quería que siga ese contrato, que ya no le de ningún dinero porque eso lo hacía sentir mal, que podía hacerlo gratis porque se llevaban bien, pero no pudo hacerlo porque llamaron a Sunghoon.

—¿Qué hago?... no se lo dije... ¡lo sé!—Sunoo corre a su habitación y toma hojas de colores, plumones, lápices, colores y decoraciones.—Voy a escribir aquí algo bonito, le voy a pedir que sea mi novio, y también voy a escribirle una carta para que sepa todo lo que siento por él y decirle que no quiero más este trato—Sunoo comienza tomando las medidas necesarias y hace cortes, se estaba esmerando en que quede muy hermoso porque Sunghoon merecía lo mejor.

Al finalizar todo su trabajo hecho con amor Sunoo levanta la vista y nota que ya se hizo de noche. Va a tomar un ducha y cuando termina revisa su teléfono haber si alguien le hablaba, pero nadie lo hacía ya que con los únicos que siempre hablaban eran sus amigos y ahora todos ellos estaban enojados con él y no le decían ni una sola palabra, la última conversación que tuvo con ellos fue el día en que casi golpea a Sunghoon por haberse robado su foto. Justo cuando estaba pensando en sus amigos le entra una llamada, se trataba de Sunghoon.

—¡Sunghoon!—dice con emoción Sunoo sentándose sobre sus propias rodillas, estaba tan emocionado que sus pómulos estaban tan elevados y sus ojos eran dos hermosas mariposas oscuras en reposo.

—Ya sabes lo que va a pasar mañana—le dice de forma directa sabiendo que Sunoo se estaba sonrojando por completo en estos momentos, una sonrisa se dibuja en el rostro a Sunghoon porque Sunoo era tan predecible.

—Lo recuerdo—se pone tímido, muerde sus labios y baja su mirada como si Sunghoon estuviese frente a él.

—Trae otra ropa para que te cambies, trae también tus artículos de aseo para que mañana pasemos todo el día juntos en mi casa.

—Sunghoon yo...—Sunoo sentía que no podía hablar por estar tan tímido.

—¿Necesitas algo?

—Yo te tengo un regalo, te lo entregaré después de ser tuyo.

—Ok, ¿qué haces?

—Estoy en mi cama, voy a dormir, yo voy a soñar contigo.

—Eso es bueno.

—Yo... ¡te quiero!—dice Sunoo y cuelga la llamada con su corazón latiendo a mil, le había dicho a Sunghoon lo que sentía.

Sunoo se gira en su cama y cuando se detiene se cubre todo el cuerpo, quería que amanezca, quería que sea viernes para que pueda entregarse a Sunghoon en ese acto y éste sepa lo mucho que le gusta.