Cartas sin destinatario y otros poemas

Ascenso en incertidumbre

Conseguir tu amor es un camino difícil.

Un camino difícil, qué pienso recorrer.

Cada paso es en falso, sin tener certeza de si el siguiente me hará caer.

Pero he decidido hacerlo porque no hay nada que puedas hacer para que decida bajar esta montaña escarpada, así soy de obstinada.

Pensé que llevaba ventaja, pero en tres meses volvimos al inicio.

Y no es que me quiera rendir, pero creo que si supieras cómo se siente darías dos pasos y pegarías la vuelta de inmediato.

Se siente como ser un bailarín lesionado, la única cosa que te mantiene vivo es la misma cosa que te hace daño.

Es tener un esguince de rodilla y subir escaleras.

Con cada paso, ya sea débil o con fuerza, eres consciente del más mínimo dolor que te provoca.

Recorre cada molécula, cada nervio, pero no hay que parar porque la meta es subir esa escalera.

Y vaya sorpresa, cuando se cree cumplido hay pasillos que siguen haciendo daño, poco a poco, lenta e internamente.

Tienes la posibilidad de irte, de dejar ese camino para cuando estés recuperada, pero no hay razón para hacerlo.

Todo el sufrimiento es necesario para cumplir al propósito de estar a tu lado, incluso si cuando llegue tú ya estás acompañado.