Still wishing for romance.

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27.12.23


Me he enfrentado al mejor arquero del mundo e incluso después de años de duelo sigo con vida.

Me he parado en frente suyo, esperando ser atravesada o incluso raspada por alguna de sus flechas, pero de alguna manera sigo ilesa.

Parece que el hombre alado me evitara con descaro, me saluda al cruzarnos, pero aunque interfiera en su camino me sigue ignorando.

Malditos Eros que se niega a flecharme con su arma más antigua, la que vuelve loca a la gente.

Por la que incluso por ella se queman ciudades de repente.

Solo quiero ese amor del que todos presumen y se quejan.

Afortunados aquellos que, sin querer, quedaron flechados por las manos de Cupido.

Que le agradezcan al cielo que no los ha olvidado.

Cartas sin destinatario y otros poemasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora