Capítulo 36

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El ambiente estaba tenso, tan tenso que se podía cortar con tijeras.

- ¿Qué está diciendo? - pregunté intercalando la mirada entre Dorian y George. No entendía nada.

- Por algún extraño motivo que yo desconozco, tu ex novio se enamoró de mi hija - comenzó George fumando su tercer cigarrillo - y como te hablaron mal sobre mi reputación como hombre de negocios, creíste que sería una buena idea venir a "rescatarlo" de la bruja hija de Ripley. Lo que no sabías es que ibas a conocer a Dorian, el asistente incrédulo de la familia, y que entablarías una relación de amistad con él. Pero, ¡Sorpresa! - dijo levantando la voz, haciendo que ambos nos sobresaltemos - Beth y Dorian están más vinculados de lo que creen.

Mi garganta se fue secando ante cada palabra, necesitaba una explicación de todo esto. Miré a Dorian, pero él tenía la mirada fija en el suelo, como si supiera lo que George estaba a punto de decir.

- La triste historia de los mellizos que fueron separados al nacer - dijo con tono "aburrido" - Si, más de lo mismo. Elizabeth y Jasper Butler. Convencieron a sus padres de que él niño había muerto por una complicación inesperada, por dios, ¿Que clase de padre se cree que su hijo sano muere sin explicación a los veinte minutos de nacer? ¿Nadie leyó libros de historia?

- ¿Qué carajo estás diciendo? - pregunté molesta - Jasper murió, ¿Qué-?

- Y todo se vuelve más divertido cuando aparece un segundo bebé al que abandonaron en el hospital y esa familia decide adoptarlo y darle la identidad de Jasper - se encogió de hombros mirando a Dorian - Te reemplazaron, en pocas palabras.

Miré a Dorian con los ojos muy abiertos, este tipo estaba insinuando que Dorian era Jasper como si fuera la cosa más normal del mundo.

- ¿Cómo sabes todo esto? - pregunté temblorosa. Ni siquiera sabía por qué estaba preguntando algo así.

- ¿Qué por qué lo sé? - preguntó con una mueca - Porque yo acompañé ese 16 de febrero a mi mejor amigo Ernest a buscar al hospital al bebé que habíamos comprado. A Jasper Butler.

No.

No podía ser real.

Me apoyé sin consuelo contra la pared, sentía que Dorian buscaba mi mirada, la exigía. Pero yo no tenía reacción.

No era estúpida, sabía que existió el tráfico de bebés y que muy probablemente sigue existiendo. Pero que vengan a decirme que mi hermano mellizo fue parte de eso es por lejos lo más crudo que experimenté en mi vida.

George rodó los ojos - Ahora ustedes pensarán que soy el villano, pero ¿Cómo puedo ser el villano de esta historia si inconscientemente reuní a los mellizos Butler 21 años después? - hizo una pausa burlona - Beth, te presento al verdadero Jasper. Dorian , o mejor dicho Jasper, ella es Beth, tu hermana.

- Cállate - habló por primera vez Dorian con los dientes apretados - Te ruego que te calles. Beth...

Yo seguía en shock, 21 años de mi vida pasaron frente a mis ojos casi sin quererlo.

- Beth... - repitió acercándose a mi y poniendo su mano sobre mi hombro.

- ¿Tu lo sabías? - pregunté blanca de la impresión.

- Lo supe hace unos días - dijo dudoso, esto cambiaba todo. Todo. - Lo siento...

- ¿Tú lo sientes? - pregunté incrédula - ¿Te ocultaron tu origen toda tu vida y te estás disculpando conmigo?

Suspiró negando - Porque antes de venir aquí tenías un Jasper en tu vida, y ese no era yo. Y... Simplemente lamento por arruinarlo, no lo sabía. - murmuró, su voz se quebró.

Sin soportar más todo lo que estaba sintiendo mi cuerpo en estos momentos, lo acerqué abrazándolo. Nuevamente la chispa que, ahora, tenía una explicación.

- Es conmovedor...

Habíamos olvidado a George. Nos separamos mirándolo, de pronto, tenía un arma entre sus manos, apuntandonos.

- Lastima que hay, y siempre hubo, lugar para solo un mellizo Butler en este mundo.

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