Me enamore de un criminal (SIRIUS X RON)

23

La noche avanzaba silenciosa en la casa de Harry, y Ron se sumió en un sueño profundo, pero no pasó mucho tiempo antes de que una oscura sombra comenzara a infiltrarse en sus pensamientos. En su sueño, se encontraba de nuevo en la Cámara de los Secretos, rodeado por las mismas paredes frías y húmedas que había visto meses atrás.

El sol brillaba en el cielo mientras el grupo se adentraba en el bosque. El aire fresco estaba lleno de el aroma de la tierra húmeda y los árboles altos, proporcionando un refugio perfecto para una aventura. Ron caminaba entre Harry y Sirius, disfrutando de la calidez de su compañía, mientras Remus lideraba el camino, señalando algunos de los lugares interesantes que conocía.

Este bosque tiene muchos secretos, algunos de ellos pueden ser un poco peligrosos, así que mantengan los ojos abiertos. —comentó Remus, mirando hacia atrás con una sonrisa

¿Como qué? —preguntó Ron, sintiendo un cosquilleo de emoción y un poco de nerviosismo.

Oh, hay criaturas mágicas por todas partes Algunas son amistosas, otras no tanto. Pero estoy seguro de que con nosotros a tu lado, no hay nada de qué preocuparse. - dijo Sirius, guiñándole un ojo a Ron

Sí, solo recuerda lo que nos enseñaron en clase de criaturas mágicas. Si ves algo que se ve raro, solo aléjate, ¿verdad?- Harry se rió

Mientras caminaban, comenzaron a contar historias sobre sus propias experiencias en el bosque. Ron se sintió animado al escuchar sobre las aventuras de James y Sirius, especialmente cuando compartieron anécdotas de sus días en Hogwarts. Había algo reconfortante en saber que todos habían tenido sus propias luchas y triunfos.

De repente, un ruido proveniente de los arbustos llamó su atención.

¿Escucharon eso?- Remus se detuvo y alzó la mano.

Todos se quedaron en silencio, prestando atención al sonido. Después de unos momentos, un pequeño ciervo saltó de entre los arbustos, mirando al grupo con curiosidad.

¡Mira! Es tan lindo.- exclamó Harry, señalando al ciervo

Sirius se agachó, intentando acercarse al ciervo. —No te preocupes, amigo, no te haremos daño- dijo suavemente

El ciervo se acercó un poco más, olfateando el aire antes de girar y desaparecer entre los árboles.

Eso fue increíble —dijo Ron, sintiéndose fascinado por la belleza de la naturaleza mágica que los rodeaba.

¿Cómo te estás sintiendo últimamente? Me alegra que estés aquí con nosotros.- Mientras continuaban su paseo, James se volvió hacia Ron.

Gracias, James. Ha sido un gran alivio estar con todos ustedes.- Ron sonrió.

Siempre serás bienvenido en nuestra familia, Nunca olvides eso.- dijo Remus, asintiendo con seriedad

Ron sintió una oleada de calidez al escuchar esas palabras. Se dio cuenta de que, a pesar de sus miedos y recuerdos, había encontrado un lugar al que pertenecía, rodeado de amigos que se preocupaban por él. Mientras seguían su camino, el bosque parecía vibrar con vida, y Ron sabía que este era solo el comienzo de muchas más aventuras juntos.

Sirius estaba decidido a aprovechar al máximo el tiempo que le quedaba con Ron antes de que las vacaciones llegaran a su fin. Sabía que el joven pelirrojo necesitaba un poco de apoyo adicional, especialmente después de todo lo que había pasado en el año anterior. Así que un día, después del almuerzo, decidió invitar a Ron a dar un paseo por el jardín de la casa.

Vamos, Ron Te apuesto a que hay algunos lugares en el jardín que no has explorado aún.- dijo Sirius, sonriendo mientras lo miraba desde el umbral de la puerta

Ron se sintió emocionado por la idea. A pesar de la familiaridad que había desarrollado con la casa, siempre había algo nuevo que descubrir. Salieron juntos, disfrutando de la calidez del sol y el canto de los pájaros.

¿Sabes? Cuando era joven, pasaba mucho tiempo en el jardín de mi casa. Tenía un árbol favorito en el que solía trepar. Era mi escondite.- comenzó Sirius, rompiendo el silencio mientras caminaban

¿En serio?, ¿Cuál era tu árbol?- preguntó Ron, intrigado

Era un gran roble Un día, decidí que era un buen lugar para hacer un club de secretos con mis amigos. Nos reuníamos allí y compartíamos todo tipo de cosas.- respondió Sirius con nostalgia

Suena genial. ¿Y qué secretos tenías?- Ron sonrió, imaginándose a Sirius de niño, riendo y compartiendo secretos.

Oh, secretos de la adolescencia. Como quién me gustaba o qué travesuras estábamos planeando. Pero, en serio, eran buenos momentos.- dijo Sirius, con un guiño

Deberíamos hacer un club de secretos aquí, . Aunque me imagino que tú y los demás ya tienen sus propios secretos.- sugirió Ron, sintiéndose inspirado por la idea

Siempre hay secretos, pero a veces es bueno compartir. Y tú puedes contarme cualquier cosa que necesites. Sabes que estoy aquí para apoyarte, ¿verdad?- Sirius se rió.

Lo sé, Sirius. Aprecio que estés aquí. Me siento... diferente desde que llegué.- Ron asintió, sintiendo que su corazón se llenaba de gratitud.

Eso es normal. Pasar por todo lo que has pasado no es fácil. A veces, hablar sobre ello ayuda, recuerda, no estás solo. Nunca lo estarás.- dijo Sirius, deteniéndose para mirar a Ron a los ojos

Con esas palabras, Ron sintió una conexión más profunda con Sirius. Era como si el peso de sus preocupaciones se aliviara un poco. Mientras continuaban su paseo, se detuvieron junto a una fuente adornada con flores coloridas.

Mira eso, estas son las que se parecen a las que crecen en el Bosque Prohibido. Son hermosas, ¿verdad?- dijo Sirius, señalando las flores

Sí, son impresionantes. Me gustaría poder ver más cosas así en el futuro.- respondió Ron, inclinándose un poco para olerlas

Tendrás la oportunidad de hacerlo. Hay un mundo lleno de maravillas esperándote. Y yo estaré aquí para guiarte.- dijo Sirius con entusiasmo

Después de un rato, decidieron regresar a la casa, donde la risa de Harry y los demás resonaba desde la sala. Ron se sintió agradecido por ese día y por la amistad que estaba construyendo con Sirius. A medida que las vacaciones llegaban a su fin, Ron se dio cuenta de que había encontrado no solo un nuevo hogar, sino también una familia.

Continuara...