Capitulo 44

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El grupo volvía trotando hacia el campamento, sus cuerpos estaban empapados y sus pelajes oscilando bajo el peso del agua, dejando un rastro de gotas sobre la hierba húmeda. A cada paso, el agua fría goteaba y formaba pequeños charcos tras ellos, reflejando el último brillo del cielo nublado. Patchstalker lanzaba miradas furtivas a su hermano, asimilando con cada instante el compromiso que Larchface estaba dispuesto a exigir con el entrenamiento.

Larchface, con la cola en alto y su postura rígida, continuaba dando órdenes con la voz firme y decidida. Había hablado de realizar el nuevo entrenamiento todos los días, sin descanso. No aceptaría distracciones ni días libres; su tono dejaba claro que no estaba dispuesto a ver el esfuerzo de cada uno desperdiciado. Patchstalker sintió una mezcla de admiración y cansancio en sus músculos solo de pensar en la constancia que aquello requeriría.

—Será difícil ir contra corriente, pero lo soportaremos. ¿No estamos aquí para fortalecernos?—dijo Larchface, lanzando una mirada desafiante al grupo.

Cada gato asintió sin cuestionamientos. Patchstalker observó a sus compañeros, notando que todos parecían listos para enfrentar el desafío; sin embargo, su pecho se apretó al pensar en Tanglepaw, su aprendiz de apenas dos lunas de entrenamiento. ¿Estaría preparado para algo tan exigente?

—¿Todos entrenarán con nosotros?—preguntó Patchstalker, intentando que su voz no delatara la duda que lo embargaba.

Larchface se giró hacia él, con una expresión de impaciencia e intensidad.

—Sí. ¿Hay algún problema?—inquirió su hermano, sus ojos ambar centellearon con determinación.

Patchstalker negó rápidamente, esforzándose por ocultar sus preocupaciones. Imaginó el rostro emocionado de Tanglepaw ante la idea de seguir entrenando junto a Larchface. Su hermano había conseguido inspirar esa misma devoción en todos los aprendices…pero las batallas simuladas y la cascada y las corrientes eran otra cosa. Es joven, pensó Patchstalker. Pero necesita ser fuerte, como dice Larchface…

—No es eso… estoy seguro de que estarán emocionados. A los aprendices les encantaría, pero…—dudó un momento, mirando de reojo a Timberstripe y Hailstep—¿Estarán sus mentores de acuerdo con esto?

Timberstripe troteó hasta colocarse al lado de Larchface, ladeando la cabeza con una sonrisa de suficiencia.

—Nosotros no tenemos ningún problema con que entrenen contigo, Larchface—dijo, lanzando una mirada de apoyo hacia su amigo.

Patchstalker exhaló un suspiro al escuchar a Timberstripe. Sabía que tanto ella como Hailstep apoyarían la idea de que sus aprendices entrenaran bajo la guía de Larchface. Pero al pensar en Troutpaw y Tanglepaw tan cerca de la cascada, la preocupación volvió a asomarse.

Larchface parecía tan seguro, tan enfocado en los resultados, que Patchstalker se sintió avergonzado de sus dudas. Se repitió a sí mismo que Tanglepaw podría beneficiarse de esta experiencia; que quizá este entrenamiento era justo lo que necesitaba para ser el guerrero fuerte que el Clan necesitaba.

—Yo…me refería más bien a Spiketail, Embertooth y Volepelt—les hizo saber, bajando lentamente las orejas.

El silencio envolvió al grupo, y Patchstalker pudo notar cómo las orejas de Timberstripe y Hailstep caían ligeramente, su confianza inicial reemplazada por una sombra de duda.

—Si bueno…—Tansytail intentó aportar a la conversación, pegó su hombro con el de Larchface para llamar su atención—, ellos son anticuados.

Larchface observó a cada uno de ellos, y con un movimiento imperceptible de su cola, capturó de nuevo su atención.

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⏰ Última actualización: Nov 17 ⏰

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Patchstalker's Heartbreak // Los Gatos Guerrero AUDonde viven las historias. Descúbrelo ahora