Capitulo 26

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Patchpaw sintió sus garras aferrarse como raíces al suelo rocoso, su pecho se contrajo por el miedo de ver a aquel gato que parecía querer arruinarles la vida en esos momentos.

El gato con el que se habían encontrado era nada mas y nada menos que Ravenwing. Sus omóplatos temblaban desde la hierba donde trataba de ocultar su delgada figura negra.

—¿Que haces tu aqui?—gruñó Larchpaw, pero estaba tan desconcertado como su hermano.

De todos los gatos que podían encontrarse debia ser Ravenwing. Preferían mil veces ver a la impulsiva lugarteniente Heatherstep que a ese gato loco.

—¡No tengo por que contestarles! ¡Son solo unos aprendices!—exclamó con el pelaje erizado del miedo. Su alocada mirada azul pasaba de un hermano a otro.

El joven gato carey y blanco estaba aterrado pero lo bastante consciente como para saber que no era una buena opción pelear con el curandero del Clan del Trueno. Ravenwing parecía tener algo en contra de ellos y Petalpaw, no podían darse el lujo de enfrentarlo ahora al estar en clara desventaja. No tenían a sus mentores, no podían decir que estaban allí para viajar a la Piedra Lunar porque ellos dijeron que estaban listos, Ravenwing era curandero podía viajar si quería en busca de consejos del Clan Estelar. No tenían excusa.

Se acerco lentamente a su hermano intentando hacerle ver al gato negro que no eran una amenaza y froto sus omóplatos para calmarlo. Los músculos de Larchpaw se relajaron ante su toque y miro a su hermano menor.

Ambos estaban preocupados por lo que debían hacer.

—¡Diganme ustedes porque estaban aquí!—exigió nuevamente el curandero.

—No tenemos que contestarte—siseó el aprendiz mayor sacudiendo su cola de un lado a otro.

—¡Tengo derecho a saber, ya que soy un curandero y soy mayor que ustedes dos!

Las reacciones del gato mostraban su ansiedad ante el silencio que los dos hermanos compartían. Les tenía miedo, y Patchpaw debia averiguar porque, pero no lo haria hoy, no al lado de Ravenwing, con quien él y su hermano corrían peligro de hasta ser atacados, por la locura que estaba pasando.

—Nos iremos de aqui, disfruta el resto de tu viaje Ravenwing.—maulló Patchpaw dandole una señal a su hermano para que bajaran la pendiente rocosa.

Larchpaw irguio las orejas impresionado y hasta casi ofendido por la rapida rendición de su hermano menor pero luego suspiró asintiendo con la cabeza, decepcionado de no poder clavar sus garras en aquel curandero entrometido. Ambos estaban apuntó de voltear e inclinarse en la montaña para poder ver si era seguro bajar por alli y su había un sendero que los ayudara, pero el curandero inesperadamente saltó delante de ellos obstruyendoles el paso.

Los dos aprendices retrocedieron atónitos.

—¡No se atrevan! ¡Iran por su hermana y volverán para hacerme frente!—gritó paniqueado.

—¡Mis hermanos solo matan presas! ¡Me atrevo a decir que les dio pena hacerlo la primera vez!—repuso furioso el gato de color marrón.

El pequeño gatito de pelaje vario color sintió su pelaje calentarse de verguenza ante el comentario de su hermano. "¡Hermano traicionero!" Pensó avergonzado, recordando la primera vez que Rainfall trató de llevarlo al río y le dijo que le daba miedo matar a un pez porque a su lado había uno mas pequeño, dijo que era su padre y no queria dejar a un pequeño pececito huerfano. Ese fue su momento mas vergonzoso, se lo había contado a sus hermanos y Petalpaw estuvo de acuerdo -aunque muy en el fondo estaba entre avergonzado y divertida- mientras Larchpaw no pudo evitar reírse a carcajadas.

Patchstalker's Heartbreak // Los Gatos Guerrero AUDonde viven las historias. Descúbrelo ahora