Capitulo 19

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Deslizándose sigilosamente entre los helechos, sus ojos brillando con determinación. La brisa fresca atrajo a sus fosas nasales un fuerte aroma a campañol y mientras está acariciaba su pelaje empezó a acercarse al pequeño roedor que correteaba por el claro.

Un pequeño crujido que indicaba como un tallo se rompió alerto las orejas del campañol, asi que de forma torpe pero rápida Patchpaw se lanzó hacia adelante, sus garras estaban afiladas listas para atrapar a su presa. El campañol empezó a correr. El aprendiz podría apostar su comida de aquel dia que podía escuchar como el corazón de su presa latía como loco por el miedo.

Apesar de su descuido fue demasiado tarde para el campañol. Patchpaw lo atrapó con un rápido movimiento de sus patas y lo sujetó con firmeza contra el suelo.

El joven aprendiz empezó a jadear, pero no despegó por ni un momento la mirada de su presa. Le parecía algo irreal que fuera capaz de atrapar al campañol con un descuido tan obvio.

Sacudió su cabeza para poder olvidar su actitud pesimista y se apresuró a acabar con la vida del roedor de un rápido mordisco en el cuello. Su horrible chillido hizo que le dolieran las orejas. Luego con cuidado, llevó al campañol de regreso a una formación de sauces, donde su mentor lo esperaba con orgullo.

—¡Bien hecho, Patchpaw!—exclamó su Rainfall—eres un gran cazador en tierra.

Aun con el campañol en la boca Patchpaw sonrió tímidamente.

Hace apenas unos dias que se estaba recuperando, pero su mentor no quiso perder el tiempo con él, ya estaban muy atrasados. Hace poco habían repasado cada uno de los puntos importantes en el territorio, luego se le enseñó lo basico de cacería en tierra —logro saltarse la cacería en agua por los pelos— y por último, ese día, había aprendido a cazar.

No le fue facil recordar todo lo aprendido, por eso su descuido digno de un cachorro recién nombrado, pero al menos había logrado atrapar su primera presa.

Todos los aprendices de su edad sabían cazar, así que había demostrado que no se quedaría rezagado por mucho mas tiempo

—Vamos, regresamos al campamento—indicó el mayor, volviéndose atraves de los sauces.

Rápidamente el aprendiz empezó a seguirlo mientras sus ojos miraban hacía todos lados en busca de nuevas presas. La Estación sin Hojas avazaba, era un milagro haber logrado encontrar ese campañol fuera de su madriguera.

Podía sentir sus patas hundirse debajo de la nieve helada que le hacía arder las almohadillas pero por mucho que se quejase no iba a calentarse, asi que prefirió seguir en silencio.

—Que energía—murmuró Rainfall de repente, mirando de reojo en dirección al río.

Patchpaw se congeló al reconocer las figuras de Petalpaw y Tansypaw nadando y hundiendo sus cuerpos en el agua. No podía entender como lo hacían ¡Ese agua debia estar helada! Inclusó se veía escarcha y hielo en los bordes.

No paso mucho tiempo para que ambas gatas salieran del agua con dos pescados en sus fauces, para luego reunirse con sus mentores quienes ronronearon orgullosos.

El joven obligó a sus patas a seguir adelante. Ojala supiera el secreto de su hermana para superar su miedo al agua, asi él podría aprender a cazar deliciosos salmones para el clan y aprendería a nadar para por fin decorar su nido con sus propias declaraciones en el fondo del río.

Cuando regresaron al campamento dejó su presa en el montón de carne fresca. Algo bueno del Clan del Río es que, hasta que no hiciera el suficiente frio para que el rio se congelara, ellos seguirían siendo favorecidos con los peces en el río, grandes o pequeños no importaba, comida era comida.

Patchstalker's Heartbreak // Los Gatos Guerrero AUDonde viven las historias. Descúbrelo ahora