ANASTASIA STEELE MI AMIGA, MI AMOR , MI TODO

Capitulo 54

No puedo creer mi vida ha dado un giro de 360 grados en muy poco tiempo; hace unos meses estaba completamente sola, triste y ahora enamorada, comprometida y EMBARAZADA.

Estoy en shock, salgo del consultorio, Gail ha sido muy respetuosa y no me ha preguntado nada, ya vamos en el auto y no hablamos, no quiero que Sawyer se entere de nada.

¡Voy a ser mama!, un bebe está creciendo dentro de mi... ese hecho me abruma, aunque siempre había pensado en tener hijos, el hacerse realidad me llena de miedos, siento que soy muy joven y no estoy preparada para tal responsabilidad. No dejo de pensar una y otra vez en cómo decírselo a Christian, como lo tomara...

- Ya llegamos Ana, ¿subimos?...- Me dice Gail mientras sostiene la puerta del auto.

- Gail gracias. No me había dado cuenta que ya hemos llegado...

Llego al Escala y al salir del ascensor me fijo en un cuadro que está colgado en todo el centro de la pared es una copia de la obra madre e hijo de Gustav Klim, aunque ya lo había visto antes, el día de hoy resalta para mí por su significado.

Es un retrato hermoso de una mujer pelirroja abrazando a su pequeño niño, ambos con los ojos cerrados, en un profundo sueño, el recostado sobre ella tranquilo, el solo necesita de su amor, de su cuidado, ella se ve serena protegiéndolo con sus manos...

Todos estos sentimientos me abruman mi pequeño bebe necesita de mí, necesita que lo proteja.... que le de ese amor incondicional... no puedo evitar evocar a mi madre, en estos momentos me gustaría que estuviera a mi lado.

- Ana ¿está bien?...

- Gail- vuelvo a verla y rompo en llanto.

- ¿Qué pasa?- Se acerca a mí y me abraza.

- Voy a ser mama...

Y no puedo parar de llorar, pero esta vez mis lágrimas son de alegría, ¡si estoy joven y tengo muchos miedos! pero ahora puedo decir que nunca más en la vida estaré sola, ahora tengo alguien que depende de mí y aunque solo sea un pequeño frijol lo amo más que a nada en el mundo. Los brazos de Gail me sostienen.

- Ana... shhhh... que lindo, la felicito... es una bendición.

- Lo sé. . estoy feliz es solo que...

- Está asustada. -termina mi frase, mis sollozos no me dejan hablar- tranquila... eso es normal, es una gran noticia... uno nunca esta preparada para recibirla...

Gail me sienta en la cocina, mientras prepara un té, poco a poco me voy calmando, hablamos de niños, sobre los cambios durante el embarazo.

- Lo que realmente me preocupa es como la va a tomar Christian. y si no lo quiere...

- Ana, el Sr. Grey ha cambiado mucho desde que usted está en su vida, él la ama profundamente, y estoy segura que se va a poner loco pero de la felicidad.

- ¿De verdad lo crees?- Después de lo de Leila, no estaría tan segura. Su perdida fue muy difícil para él.

- Ana, un hijo siempre será un bendición, ya lo pasado hay que superarlo y solo queda enfrentar ese lindo futuro que viene para ambos, bueno para los tres- Me sonríe sinceramente y creo en sus palabras, si el me ama como yo, este hijo lo que hará es unirnos mucho más.

Ya más tranquila me recuesto en el sillón para ver un poco de televisión, pero no puedo sacarme de la cabeza como le voy a dar la noticia. Tengo que contarle hoy mismo, no creo que pueda aguantarme esta noticia para mi sola por mucho tiempo, pero quiero que sea algo muy especial.