ANASTASIA STEELE MI AMIGA, MI AMOR , MI TODO

Parte 2 - Capitulo 22

POV ANASTASIA

- ¡Estarías dispuesta a tener a Phoebe en Seattle Nena! – Me dice sonriente.

- Pues te confieso que siempre que pensé en el parto me lo imagine aquí en New York, pero sé que necesitas viajar- Coloco mis manos sobre su torso- ahora lo importante es que estemos juntos.

- Ahh mi nena. Eres realmente increíble – Se acerca a mí y me besa tiernamente, siento inmediatamente que toda la tensión de su cuerpo se libera.

Se separa un poco y me contempla con adoración, pasa sus manos por mi rostro, recorriendo mis mejillas, delinea mis labios y por ultimo rodea la mandíbula.

- De haber sabido esto te habría contado hace días.

- ¡Ves! si hubieras confiado en mí, te hubieras ahorrado tantas preocupaciones. ¿Ahora lo entiendes? - Tomo su mano y la entrelazo con la mía, ambos la observamos- Somos una pareja amor en las buenas y en las malas.

- Ana...- Cierra los ojos como si quisiera interiorizar mis palabras, coloca nuestras manos unidas sobre su torso apretándolas contra su cuerpo - Nena hace falta algo...- Susurra

- ¡Sí! Que falta Sr. Grey.- Lo animo para que no esté tan melancólico.

De repente abre los ojos y descubro que están inundados de lágrimas, pero estas se mantienen dentro de sus ojos.

- Dos anillos, uno en tu mano y otro en el mío.

Yo me quedo muda ¡Me está pidiendo que me case con el de nuevo! Yo trato de hablar pero las palabras se quedan en mi garganta atrapadas

- Sé que la Jodi cuando tuve mi oportunidad, Anastasia tu eres todo para mí- Una lagrima al fin se libera de sus ojos y recorre solitaria su mejilla- eres mi amiga, tu sabes todos mis secretos conoces lo mejor y lo peor de mí, contigo puedo ser yo mismo.

- Christian – Logro pronunciar débilmente.

- ¡Por favor! No digas nada ahora solo quiero que me escuches- Asiento con la cabeza tímidamente, pero mis piernas tiemblan y mi corazón late muy rápido- Tu eres mi amor, quiero que todos los días de mi vida comiencen y terminen contigo, y ahora eres la madre de mi hija, la redención que la vida me ofrece me la das tú al convertirme en papa. Nena quiero que te cases conmigo y me hagas el honor de llamarte mi esposa.- Con su mano libre acaricia mi rostro- Ya una vez me dijiste que sí y espero contar con la misma suerte esta vez, aunque ahora no tengo anillo - Me da una sonrisa tímida mientras alza sus hombros.

Este hombre sabe llevarme al cielo con sus palabras, me tiene completamente hechizada lo amo no lo puedo disimular, y creo en la sinceridad de sus palabras, como podría ser diferente si soy suya en cuerpo y alma.

- Mi Amor, que hago que a ti nunca podre decirte que no, aunque no tengas anillo. – Le sonrío.

- ¡eso es un Si! Te vas a casar conmigo- Su cara está llena de sorpresa, porque se sorprende si sabe que estoy loca por él.

- ¡SI! Me tiro a sus brazos y el me recibe acomodándome a su cuerpo de tal manera que mi barriga no queda presionada.

Nuestras bocas se buscan y se unen como un imán, nuestras lenguas se exploran de la manera más tierna y entregada, me pierdo en él, en su forma de amarme.

- Mía

Repite una y otra vez entre nuestros besos.

- Amor ...- Trato de hablar pero el continua besándome.