ANASTASIA STEELE MI AMIGA, MI AMOR , MI TODO

Parte 2 - Capitulo 10

POV CHRISTIAN

Octubre 31 11:10 p.m.

¡Se la llevaron!

Y mis peores miedos se hicieron realidad, y lo más irónico en el momento que menos lo esperaba, justo cuando estoy junto a ellas, rodeados de seguridad y en mis malditas narices.

- ¡Christian!- Ana mira la cuna y me mira a mí, y le expresión de su rostro es de absoluto terror, el rubor de sus mejillas ha desaparecido y parece un fantasma - ¿Dónde está mi bebe?

Siento un vacío en el estómago y en medio del pecho que me paralizan. Nunca había sentido tanto miedo en toda mi vida, ¡MI PRINCESA! Miro a Ana intentando reaccionar, nadie de la familia pudo tomarla, estábamos todos en la sala, el personal de la casa ya fue despachado. Voy hacia la ventana de la habitación comprobando que está abierta, desde allí se baja con facilidad a una pequeña terraza y allí hay una escalera para acceder al garaje de la casa. Desesperado paso las manos por mi cabello, intentando pensar... ciento la mirada de mi esposa sobre mí, ella espera mi reacción.

Saco el celular de mi bolsillo y mis dedos temblorosos me impiden marcar con agilidad.

- ¿Sr.? – es Stuart.

- CIERRA LA PUERTA DE LA CASA NADIE PUEDE ENTRAR Y SALIR.- Exclamo airado. Estoy descontrolado, y odio perder el control de las cosas.

- ¿Señor pasa algo?

- MI HIJA... - Miro a Ana- ¡SE LA LLEVARON! Activa el código. – Ana emite un gemido de dolor. Avísale a Prescott yo llamo a Welch.

Cuelgo y no dejo de verla, ella está destrozada con mis palabras.

- ¿DONDE ESTA MI HIJA?- Grita y estalla en llanto, me rompe el corazón verla sufrir, me acerco a ella tomándola en mis brazos. Ella se deja caer, la sostengo y la siento en la cama. La abrazo muy fuerte, siento sus grandes sollozos. Me separo y acaricio su mejilla- Nena – Sus ojos están llenos de lágrimas y me mira perdida. ¿Qué podría decirle para tranquilizarla? cuando yo mismo estoy hecho polvo, mi bebe, mi pequeña e inocente bebe, ¡no está!, se la han llevado para hacerme daño. Tomo el rostro de mi esposa en mis manos – Lo siento. – Pronuncio en un susurro y bajo la mirada, no puedo mirarla a los ojos cuando sé que le he fallado de nuevo.

- ¿Quién se la llevo? ¿Por qué?- ella es tan chiquita.- Esas palabras despiertan una furia en mi interior que no conocía. No soporto que las mujeres de mi vida sufran y al que se atrevió a hacernos esto se va a arrepentir.

- Nena te prometo que voy a recuperarla. – Beso su frente. – Voy por mis padres por favor quédate con ellos, y por nada salgas hasta que yo o alguien de seguridad te lo indique.

- Pero... yo quiero- Me toma del brazo y se pone en pie tratando de seguirme.

- ¡NO Nena! necesito que estés segura, por favor ayúdame quedándote aquí, necesito todos mis sentidos en esto, y no quiero estar preocupado por ti también.- Trato de mediar.

- Es mi HIJA- necesito saber lo que pasa con ella.- Yo la conozco y no va ceder es mi igual.

- Y lo sabrás, pero espera aquí, hasta que este asegurado el lugar. Has esto por mi Nena.

Ella asiente temblorosa. No puedo seguir aquí, tengo que defender a mi familia, no puedo derrumbarme, necesito tomar el control de la situación y recuperar a mí bebe. –Doy media vuelta para salir de la habitación.

- ¡Christian! – La volteo a ver – Tráeme a mi bebe.

- Te lo prometo- Y es una promesa que estoy dispuesto a cumplir pase lo que pase.