8 de Agosto de 2015. Back to reality.
Después de estar en un momento de mí vida, en el cual yo tuve ideas [hedonistas], pase a una realidad, y a un entendimiento, un poco breve, pero es algo importante para mí.
No creó que en algún momento, haya mencionado el "amor", en un diferente punto de vista, pues tengo muchas definiciones para este, y vamos a entrar un poquito en este, porque es el que algunas veces padezco, y me encantaría tratarlo un poco.
Yo soy una amante de leer acerca de este, no de verlo, de leerlo, pues si veo el amor como algo bonito que se crea de la noche a la mañana, y termina siempre feliz, no habrá ningún sentido en leer esto, más sin embargo, si están en una misma sintonía conmigo, verán este punto de vista, tal vez irrelevante para muchos, pero importante para algunos otros.
Tuve un amor, un amor grandioso y espléndido, con el cual pasaba momentos inmemorables, llenos de alegría y dulzura, aptos para una chica tan ingenua e ignorante como yo; ese amor no creció cuando lo vi, nunca, ese amor creció la primera vez que no lo vi, y que no fue algo momentáneo, que pudiera yo resolver, sino fue un momento de espera total, por alguien, fueron días que para mí eran algo similar al infierno, no lo tenía, en mí, no estaba su presencia en mi vida, fueron días de desesperación total, y de amargas noches llenas de ansiedad y frustración, fue algo terrible, en mi vida, un momento en el que por las noches susurraba su nombre, un momento en el cual, hasta un cigarro sabia a él, [ahí me di cuenta que él era un cigarro para mí], momentos en los cuales perdía el tiempo escribiendo cosas monótonas, cartas interminables, que al fin y al cabo, sabia que nunca le iba a dar, palabras, que al fin y al cabo jamás le iba a pronunciar, jamás lo hice, y jamás lo haré.
Hasta ese momento supe que era morir de maldito amor, y me refiero a este como tal, porque en mí había un sentimiento muy fuerte de melancolía, y desesperación, una sensación de muerte.
Cada que pronunciaba una palabra, lo sentía a él por mis labios, cada que pensaba en cómo resolver algo, evocaba su recuerdo en mi mente, estaba peor que ahorita, ese momento fui una completa desconocida para el mundo, pues fui muy reservada, y no hablaba mucho más allá de lo que le decía a todos, "lo extraño", porque no era eso, nunca fue eso, ese "lo extraño" fue un disfraz a un, "lo necesito aquí, necesito que me acompañe, quiero que nos escapemos juntos, quiero que seamos uno mismo, lo necesito", palabras desgarradoras para mí en cuando una lagrima salía de mí, me sentía enferma, y la enfermedad: él.
Fue un momento crítico de mi vida, y en el último instante, cuando estaba eufórica, porque sabia que el día siguiente lo iba a volver a ver, fue cuando por segunda vez, me di cuenta que lo amaba, que hasta ese instante, yo nunca había amado a nadie, ni a mi ex amor, que tanto quiero tener aún, pero que ya no es para mí algo fundamental, si vuelve que bien, y si no, también, pero con él, aun sigue significando ese "lo extraño", esa serie de palabras desgarradoras, eran tanto así, que era como pasar un vidrio por encima de mis labios, era así.
Y aún es así, no diré que ya no sufro de esa manera, pero sí, aún es así, aún anhelo verlo, aún deseo verlo, aún lo necesito.
El punto número dos de este "breve" punto de vista:Fue un paraíso bastante diferente, una vuelta de 180º, a lo que fue el vivir sin él, una temporada.
Esta vez fue muy distinto, esta vez, si lo tenía, esta vez, él me acompañaba, esta vez, hablará conmigo o no, era como beberme una botella completa de wisky, ósea era delicioso.
Una sonrisa de él me provocaba una euforia total, una mirada de él me provocaba un vorágine total, un abrazo de él me provocaba una muerte instantánea.
Él era la medicina de mi dolor, era la euforia de las mañanas, era todo para mí, ahí me equivoco, pues no es "era", más bien usaré la palabra "es", porque así es ahorita, aunque ya no lo tenga, aunque ya no sea mío, nunca más.
Pero esperare, hasta que sea necesario.
Siempre tuya, y amante tuya.