La Venganza de Samantha ✅🔞

26: El árbol más hermoso

Al despertar me doy una ducha y me visto para ir al Banco. Es un lindo día soleado, las personas caminan por las calles con grandes sonrisas en su rostro. Hay veces que quisiera despertar y haber perdido la memoria, sería un milagro, podría olvidar todo y comenzar de nuevo, tener una nueva vida en donde el odio y el rencor no estén presentes. 

Al llegar al Banco, estaciono mi auto y entro. La misma chica que me atendió la primera vez me dice que me dirija a la oficina, sí, a la oficina donde se encuentra Zad.

-¡Buenos días! -Digo, al entrar a la oficina.

-¡Buenos días! -Responde Zad sonriendo- ¿Cómo ha estado?

-Muy bien, -me siento y coloco el sobre que contiene los papeles en el escritorio- ¿y tú? ¡Oh, lo siento! ¿Y usted?

-No te preocupes, me puedes tutear, si eso deseas. -Me guiña un ojo- Y estoy muy bien, gracias.

-Aquí están todos los papeles que se requieren para la petición del crédito. 

Zad toma el sobre, saca los papeles y los comienza a revisar. Luego de 15 minutos, aproximadamente, Zad hace una observación:

-Bueno... -coloca los papeles dentro del sobre- está todo perfectamente bien. Ahora solo falta que el Banco apruebe el crédito y listo.

-¡Excelente! -Sonrío- ¿Puedes salir mañana a tomar un café conmigo? -Zad me mira un poco desconcertado por la oferta que acabo de hacer- Lo siento... es solo que no tengo muchos amigos en este lugar y bueno pensé que tal vez...

-Claro que puedo. -Inquiere.

-Perdón, ¿qué dijiste? 

-Que sí. Mañana puedo tomarme un café contigo. -Me brinda una sonrisa.

-¿A qué hora puedes?

-Tengo tiempo libre desde las 12:00 hasta las 14:00 horas. ¿Te parece bien?

-¡Me parece perfecto! Nos vemos a las 12:20 en la cafetería que está a dos cuadras de aquí. -Me pongo de pié- Bueno, ya debo irme. -Le extiendo mi mano.

-Fue un placer atender a una señorita tan hermosa como usted. -Estrecha mi mano y ambos sonreímos.

Salgo del Banco y conduzco en dirección al hospital. Al llegar saludo a la madre de Sisly y me dirijo a la habitación.

-¡Hola señorita Wanda! -Exclama sonriendo, Sisly.

-¿Cómo estás? -Le pregunto acercándome a la camilla.

-Mejor. -Contesta- Gracias por venir.

-Me alegro de que ya estés mejor. -Hago una pequeña pausa- ¿Dónde está tu bebé?

-Mi hija se está quedando con una vecina, no quiero que me vea en este estado.

-Sí, eso es mejor. -Digo, afirmando con mi cabeza- Ya haces falta en la casa. -Sisly sonríe.

-En dos días me dan de alta y de inmediato me iré a trabajar.

-No, tú te tomarás los días de reposo que te mande el médico, que mínimo serán dos semanas.

-¡Pero señorita!

-Pero nada, Sisly. Te tomarás tres semanas de reposo, acéptalas como tus vacaciones. ¿Estamos?

-Está bien. -Contesta encogiéndose de hombros.

-Debo irme, pero vendré mañana a visitarte. -Mi voz es suave.

-Gracias señorita. -Me brinda una cálida sonrisa.

Me despido de Sisly, salgo del hospital y conduzco hasta mi casa. 

Me acuesto en mi cama y duermo hasta que son las 16:00 horas, me doy una ducha y me acomodo para esperar que Bod pase por mí y me preparo algo de comer debido a que no he almorzado nada. Justo a las 18:00 escucho el pito de un carro, me asomo por una de las ventanas y veo que es el carro de Bod. Tomo mi cartera, salgo de la casa. Bod se baja del auto y como todo un caballero abre la puerta del lado del copiloto.

-Estás más hermosa hoy. -Dice, mientras subo al auto.

-Gracias. -Le brindo una leve sonrisa.

Bod comienza a conducir y no sé a dónde se dirige, así que aprovecho para hablar.

-¿A dónde vamos? 

-Es una sorpresa. -Responde, sin quitar la vista del frente.

-Ah..., pero, ¿me das una pista?

-Piensa en algo que desees con todo tu corazón. Vas a necesitarlo cuando lleguemos. -Me observa por un instante y sonríe.

-Está bien. -Aun no entiendo nada, pero haré lo que él me dijo.

Durante el trayecto he estado en silencio pensando en eso que deseo con todo mi corazón: regresar el tiempo sería una buena opción, pero no, no es lo que deseo con todo mi corazón, que mi madre esté viva, aunque eso quisiera no es algo que deseo completamente, sé que ella está conmigo en cada momento, entonces, pienso en algo que se me había ocurrido en la mañana, perder la memoria, esa sería la solución, es como volver a nacer... sin recuerdos, sin ninguna pesadilla que me atormente todas las noches, sin tener que asesinar a nadie. El auto se detiene y mis pensamientos desaparecen.

-Llegamos. -Dice con voz cálida.

-¿Qué es ésto? -Le pregunto frunciendo el ceño.

-Estamos justo frente del árbol más hermoso de toda la ciudad.

-¿Cómo sabes que es el más hermoso? -Observo el gran árbol que está frente de nosotros.

-No físicamente. Su historia lo hace el árbol más hermoso. -Abre la puerta y baja del carro. Luego se asoma y dice: -Ven, baja y te cuento la historia.

Bajo del carro y puedo notar que nos hemos alejado de la ciudad; aunque ya es de noche, un hermoso cielo estrellado y una luna llena mantienen todo iluminado, así que puedo ver el árbol con claridad. Bod busca algo dentro del carro y luego regresa con dos cajitas en sus manos, me entrega una de ellas y me pide que me siente al pié del árbol.

-¿Para qué son estas cajas?

-No preguntes y sólo escucha. -Su voz es suave- Abre la caja. -Obedezco y dentro de la caja observo una hojita y un lápiz. Lo miro un poco confundida- Escribe el deseo más grande que tengas, yo haré lo mismo en esta hojita. -Dice mostrándome la hojita que sacó de su caja.

Después de unos minutos termino de copiar mi deseo.

-Ya terminé. -Él ya ha terminado de copiar también.

-Ahora, coloca la hojita dentro de la caja y ciérrala. -Lo hago y él hace lo mismo que yo- Ven. -Se pone de pie y me extiende su mano para ayudarme. Yo la tomo y me levanto. 

Me lleva hacia un lado del pié del árbol y puedo observar dos agujeros en el suelo. 

-Introduce tu caja en el agujero de la derecha y yo introduciré la mía en la izquierda.

Después de colocar las cajas en los agujeros Bod toma una pala y los cubre con tierra. Yo aún sin saber nada, me quedo callada, solo observando.

-Ven. -Dice mientras camina hacia donde estábamos sentados hace un momento- Siéntate, ahora te contaré la historia del árbol y sabrás por qué enterramos esas cajas.

Disculpen si hay faltas ortográficas.
¡Gracias por leer!