La Venganza de Samantha ✅🔞

51: No puedo dejar que muera

(Bod relatando)

Conduzco a toda velocidad, debo llegar antes de que algo terrible ocurra, al llegar a las afueras de la ciudad reviso nuevamente la dirección para estar seguro de que tomaré el camino correcto. Después de casi dos horas voy por una calle que parece no tener fin, casi no hay casas y a los alrededores hay muchos arboles. Me impresiono en gran manera al ver a lo lejos algo muy iluminado, parece fuego -¡Es fuego!- Conduzco a toda marcha y al acercarme observo una casa en llamas, el fuego está devorando la casa. Mis lágrimas salen de mis ojos al ver mi auto y el auto de Wanda estacionados en el frente. Bajo del auto y corro hacia la entrada, el fuego se incrementa cada vez más. Encuentro una ventana que el fuego no ha alcanzado completamente, la derribo con ayuda de un ladrillo que estaba cerca de una jardinera, entro tapándome la nariz con el cuello de mi camisa, pero sin embargo el humo invade mis pulmones haciéndome toser; no logro ver mucho, camino un poco y veo algo, es...es Wanda y Sisly tendidas en el suelo, corro esquivando algunos escombros y me arrodillo al lado de Wanda, un trozo de columna le está pisando parte del cuerpo y su cabeza está sangrando. 

Con mucha fuerza logro quitar el trozo de columna que está sobre el cuerpo de Wanda, la tomo entre mis brazos y la cargo, debo sacarla de aquí y regresar por Sisly. El fuego se acerca cada vez más y debo tomar otro camino para llegar a la ventana, aunque se me dificulta un poco, logro llegar a la ventana, mi mente está concentrada en sacarla de este lugar y no me importa lastimarme cuando salgo por la ventana. Llevo a Wanda un poco lejos de la casa y la coloco en el suelo; me volteo para dirigirme hacia la casa y en ese momento el primer piso de la casa se derrumba tapando gran parte de la planta baja en donde se encuentra Sisly. Caigo de rodillas y lloro al saber que no podré rescatar a Sisly.

Después de varios minutos me pongo de pie y me resigno a que ya no podré hacer algo por Sisly. Sólo tengo a Wanda, no puedo dejar que muera o que la atrape la policía. La cargo entre mis brazos y la llevo hasta mi auto, pero es necesario esconder el carro en el que llegué.

-¡No te mueras! -Digo en medio de lágrimas. -¡Resiste... Resiste un poco!

Cierro la puerta del auto y me dirijo hacia el de mi amigo, me subo a el y conduzco rápidamente en sentido contrario del que vine, a unas cuadras encuentro una casa, al parecer no está habitada así que llevo el carro hasta el patio de la casa, hay una especie de cochera, está cerrada. Bajo del auto y corro hacia la puerta, es grande, puedo esconder el carro allí fácilmente. Busco algo que me permita romper un candado que une los extremos de una cadena atada a la puerta; encuentro una pala no muy lejos, la tomo con mucha fuerza y comienzo a golpear el candado, el cual se rompe después de varios golpes. Abro la puerta y me devuelvo corriendo hacia el auto, me subo a el y lo estaciono dentro de la "cochera". Apago el auto, bajo de el y antes de salir de la cochera cierro la puerta y coloco la cadena con lo que quedó del candado, aunque no cierra sostiene los extremos de la cadena impidiendo que se abra la puerta. 

Comienzo a correr en dirección a la casa de Wanda que sigue en llamas. Noto que tengo mucha adrenalina en mi cuerpo, corro como nunca lo he hecho. Al llegar nuevamente a la casa en llamas entro en mi auto y lo enciendo, observo a Wanda acostada en el asiento trasero, me angustio al ver que su cabeza está sangrando mucho, tengo miedo... Mucho miedo de que muera. 

Conduzco en dirección a la ciudad, pero tomo un desvío que me lleva hacia el otro extremo de la ciudad, es probable que los bomberos estén en camino y no quiero cruzarme con ellos y mucho menos con la policía. 

-Resiste un poco más... No te quiero perder. -Susurro en medio del llanto. 

Tomo mi teléfono y llamo a un amigo que es médico le digo que necesito ayuda, que necesito que atienda a mi novia en la clínica donde trabaja. 

Al llegar a la clínica mi amigo me espera en la entrada de emergencias con unos enfermeros y una camilla, me estaciono y bajo del auto para abrir la puerta trasera. Los enfermeros montan el cuerpo de Wanda en la camilla y se la llevan por la entrada de emergencias de la clínica. Corro con mi amigo detrás de ellos, un pasillo largo y extenso nos lleva hacia una puerta donde mi amigo y dos enfermeras me detienen y me dicen que no puedo entrar.

-¡Debo ir con ella! -Exclamo.

-No harás nada allá adentro, te informaré de todo. Ten paciencia. -Dice mi amigo tomándome por el hombro. 

-¡No dejes que muera... Por favor! -Le digo con un nudo en la garganta.

Mi amigo hace una ligera afirmación con su cabeza y entra en la habitación. Una de las enfermeras dice que tome asiento pero me niego la angustia que tengo es tan grande que es imposible que tome asiento en un momento como éste. 

Camino de un lado a otro, ya ha pasado más de una hora y no sé nada de ella, estoy muy asustado. Mi teléfono suena, pero no tengo ganas de hablar con nadie, luego de un momento vuelve a sonar pero no quiero contestarlo; suena por tercera vez y lo saco de mi bolsillo para cortar la llamada y apagarlo, pero el número desconocido llama mi atención. 

-¿Quién habla? 

-¿Señor Bod? -Pregunta una voz gruesa, la voz de un hombre aparentemente anciano.

-Sí ¿quién habla?

-Soy el comisario Fuentes, debo informarle que presumimos que su hermano está muerto.

Aunque sé, que era lo más probable, debo fingir, debo proteger a Wanda a pesar de todo, a pesar de que quizás acabó con la vida de mi hermano. 

-¡Eso no puede ser! 

-Señor, se presume que murió en un incendio provocado por una asesina. 

-Usted no puede estar hablando en serio, mi hermano es tetrapléjico, lo más seguro es que esté acostado en su cama durmiendo. Y es imposible que haya muerto en manos de una asesina... 

-Señor la asesina se comunicó hace, aproximadamente, cuatro horas con nosotros diciéndonos que tenía a su hermano en su poder. En este momento nos encontramos en el lugar de los hechos y necesitamos que se dirija a la estación de policías lo más pronto posible.

-Me dirigiré rápidamente para allá. -Cierro la llamada.

No puedo irme todavía, es imposible que me vaya sin saber como está Wanda...

DISCULPEN SI HAY FALTAS ORTOGRÁFICAS.

¡GRACIAS POR LEER!