Persiguiendo a Justin Bieber (Hot)

Capítulo 10.Te necesito

-Oh...Ju..stin...Sigue.-Enterre mis uñas en su espalda pero pareció no importarle, la excitación era tanta que solo quería gritar muy fuerte. Gruñio en mi oido corriendose dentro de mi, por suerte tomo pastillas. Siguió penetrandome unas cuantas veces más y me corrí llegando al mejor orgasmo que he tenido alguna vez.
-Eso fue..
-Wow.
Se salió de mi y se acostó a mi lado, nuestros pechos subían y bajaban rápidamente y nuestras respiraciones era agitadas e irregulares. Sentí la mano de Justin entrelazarce con la mia y me giré quedando frente a frente de el.
-Ahora...¿Te irás?-Frunci el ceño y negue con la cabeza.
-No, no me iré. Y ahora menos.-Bese sus labios y cerré fuerte los ojos, algo de lo que decía era cierto.
-Ven, abrazame.-Apoyé mi cabeza en su duro pecho y pude sentir el latir de su corazón y pordujo una extraña sensación en mi vientre que nunca antes habia sentido, cerré los ojos y me quede dormida escuchando el silencio, pero un silencio que era agradable.

Me desperté por un ruido y abrí perezosamente los ojos, me levanté tomando la polera de Justin que estaba tirada en el suelo y caminé por su gran departamento. Asomé mi cabeza por la cocina que era de donde provenían los ruidos y tape mi boca para no soltar una carcajada.
-¡Sabia que no habías cocinado! Mentiroso.-Saltó del susto y dejo caer el plato con panqueques que habia en una bandeja.
-Pf, me asustaste.-Caminó hacia mi y llevó sus manos a mi cintura.
-Me haz atrapado, que astuta.-Dijo irónico y luego unió nuestros labios, me tomó en brazos ya que era mucho más baja que el y crucé mis piernas en su cintura.
-Al menos más que tu, señor andaré desnudo por la vida. ¿No sabes que te pueden ver por la ventana?-Sí, estaba desnudo.
-Oh, eso. Es sólo un pequeño detalle. Además te puedes beneficiar.
-¿Cómo?-Movio sus caderas haciendo qur nuestros sexos se rozaran y sacondo un gemido de mis labios y una sonrisa presumida de los suyos.
-Así.-Sonrió triunfante y le saque la lengua.
-Ya, tengo hambre.-Besé su frente y me baje, pero el me pegó a su cuerpo y subió la única prenda que llevaba puesta para déjarme completamente desnuda, rápidamente me sonroje y el soltó una carcajada.
-Ahora si estamos a par.-Me tiró un beso y caminó hacía el plato que se había caído recogiendolo y limpiando todo. Suspire y mordi nerviosa mi labio inferior, estar desnuda a la vista de Justin no era muy gratificante. Teniendo en cuenta todas las modelos espectaculares que el ha visto en su vista y que yo no soy la gran cosa. Suspire y me senté en la mesa comiendo una rebanada de pan, miré por todos lados buscando nutella hasta que...¡Buala! Ahi estaba, justo al lado de Justin, caminé hacía ella y no pude evitar gemir al ver la erección mañanera que llevaba Justin, mordi mi labio y el lo notó ya que sonrió.
-Que quieres que haga, andas desnuda por ahi, caminando por mi casa y pues soy hombre, amor.
-Vaya escusa.-Tomé la nutella y comencé a caminar pero sentí una fuerte nalgada que hizo que me girará y empuñara mis manos.-Oh Justin, agradece que tengo esta deliciosa exquisitez en mis manos y que sea más importante que mi venganza, ¡porque o si no!
-¿O si no qué?
-No lo sé, pero algo malo se me hubiera ocurrido.-Me giré y me senté en la mesa, tomé un cuchillo y lo verti en la nutella para sacar un poco y ponerle a mi pan, desayuno perfecto. Le di una mordida y sonreí.
-Si que disfrutas de la nutella.-Se sentó al frente de mi y sonrió picaron.
-En que piensas Bieber.

Yo y mi bocota, ahora me encontraba arriba de la mesa con mis piernas abiertas y con Justin observandome como si de algo totalmente sorprendente se tratara.
-Ya Jus, que me da pena.
-Es que...eres tan jodidamente perfecta, Jess.
Hundió su cabeza entré mis piernas y gemi al sentir su lengua rozar mis labios, despues de todo no era tan mala idea. Dio otra larga lámina por mi húmeda hendidura y apreté mis manos, nunca me habían hecho sexo oral.
-Eres tan deliciosa que me gustas más que la nutella.
-¿Tan..to asi?
-Sí.
Succiono mi clítoris y di un pequeño gritito, joder lo hacia tan bien. Hundió uno de sus dedos en mi, luego otro y otro. Los movía rápidamente, sus dedos era mágicos, aunque prefería tenerlo a el en lugar de sus dedos. Su lengua me recorría como si me estuviera conociendo y el fino rozar de sus labios en mis pliegues me hacía llegar al infierno, sí, el infiero, porque sentía que me estaba quemando. El me quemaba con sus caricias y su gran habilidad con su boca ¿A cuantas se lo habrá hecho antes? No pude evitar sentir un ligero sentimiento de celos al pensar en el con otras.
-Demonios.
-Que..que pasa?-Pregunté asustada.
-Me correre con solo verte gemir, joder. Te necesito ahora.
Dicho esto me agarro de la cintura y unió nuestros cuerpos en uno, ambos gemimos de alivio, llevé mis manos a su cabello y tiré de su cabeza uniendo nuestros labios, callando nuestros gemidos.
Comenzó a moverse, lento pero profundo, una y otra vez. Me estaba torturando.
-Más..rapi..ah.-Gemi cuando comenzó a aumentar la velocidad de sus embestidas, arque mi espalda y apoyé mis manos en la fría mesa de la cocina, heche mi cabeza hacia atras y mordi fuerte mi labio, tan fuerte que pude sentir el sabor a sangre inundar mi boca aunque poco me importo, tener sexo con Justin valía la pena.