Persiguiendo a Justin Bieber (Hot)

Capítulo 28.Cansados.

-¿Me dirás que te pasa?
-No.-Dijo serio y siguió conduciendo.
-¿Por qué?-Alce un poco la voz.-Llegaste idiota conmigo y yo no te he hecho nada.
-Me Vale mierda.
Rode los ojos mientras miraba por la ventana, preferí guardar silencio ya que no quería que me dijiera algo que no quiero escuchar o que me lastime. Justin hoy estaba disgustado sin razón y lo peor es que era conmigo.
Llegamos al restaurante y rápidamente me baje del auto, estar con el era insoportable. Mire a todos lados paralizada, el lugar estaba lleno de malditos paparazzi. Justin tomo mi mano y camino empujando a todo aquel que se interpusiera en su camino. Entramos al restaurante y nos sentamos en una zona Bip donde solo estábamos nosotros.
Me miró y desvíe la mirada, intento tomar mi mano pero rápido la saque.
-¡¿Que mierda suscede ahora?!
-¿Que mierda suscede ahora?, por favor Justin, haz estado insoportable todo el malditos dia y me preguntas ¿qué mierda me sucede?-No soporte y le grite en la cara, sabía que no quería verlo molesto pero me estaba hartando demasiado.
-¿Ves, Jess?, eso es lo que me molesta.-Apuntó hacia afuera a los paparazzi que lo esperaban y sacaban fotos a todo lo que hacíamos.-Estoy harto de no tener una vida tranquila, de preocuparme por lo que piensa la gente de mi, simplemente estoy cansado.
-¿De mi también, Justin?
-Quizás.-Tomo su cara en sus manos y luego tiro su pelo hacia atrás con frustración.
-Ok.
Me paré y comencé a caminar, prefiero dejarlo solo por ahora.
-Espera, ¿A donde vas?
-A cualquier lado, tal vez solo se te pase tu cansancio de mi.
Seguí caminando hasta salir del lugar y sin escuchar un "No te vayas" un "espera" un puto "Esta bien". Simplemente no dijo nada.
Ignore a todos los paparazzi y tome un taxi. Ahora si tendrán mucho que inventar.

Subí hasta mi departamento y me recoste en mi cama, me sentía dolida, sentía que Justin se estaba aburriendo de mi, que ya no me queria y eso me dolía.
Mi celular comenzó a vibrar y lo tome abriendo el mensaje.
-Lo siento, espero que no estés molesta. Se que a veces no me entiendes pero necesitaba estar solo.

Leí todo y un nudo en la garganta que no me dejaba ni respirar se me formo, calló un solitaria lágrima por mi mejilla y luego muchas más.

-Esta bien y no te preocupes, te dejare mucho tiempo solo para que te sientas mejor:)
Sarcasmo, pensé.
Apague mi celular para que no me llegaran más mensajes de el y tome mi maleta hechando mucha ropa, tome mis llaves y las llaves del auto que April me había concedido por la revista y salí de mi departamento, le dije a la recepcionista que si Justin preguntaba donde estaba ella dijiera que no sabia, le di la dirección de donde estaría por si alguien de mi familia o amigos preguntaba y me fui.
Conduje al rededor de 20 minutos hasta llegar a donde hace tanto tiempo no iba.
Me bajé del auto y toque la puerta.
-¿Karma? Dios tanto tiempo, no sabes cuanto te extrañaba.-Me abrazo suavemente y comencé a sollozar en su pecho, necesitaba desahogar me y quien mejor que mi ex y mejor amigo.

Le conte todo y cuando digo todo, es TODO. Su reacción era como yo esperaba, al principió me miro feo, luego suspiro y acto seguido me abrazó.
-Pero que difícil.
-Chris, ¿Qué hago ahora? Solo quiero irme lejos y olvidarme de todo y todos.
-No hagas eso, espera que las aguas se calmen y vuelves renovada, tu siempre sabes que hacer y confió en ti.
-¿Me puedo quedar en tu casa?-Pregunte algo avergonzada.
-Por supuesto, ahora que hacemos primero ¿Comer o ver películas?
-Las dos cosa-dije alegre.
Mientras Chris pedía comida y buscaba una película prendi mi celular ya que la curiosidad me estaba comiendo.
Tenía 42 llamadas perdidas de Justin y 5 mensajes de el.
Abrí los mensajes y comencé a leer.
Jess, por favor no seas infantil y contestame.
Un minuto después y 5 llamadas.
Vamos amor, sabes que a veces digo estupideces pero entiendeme, mi vida es un maltido caos.
15 llamadas más en solo 10 minutos.
¿Por qué mierda no estas en tu departamento? Joder Jessica, te encontraré donde estés y hablaremos seriamente.
20 llamadas más.
Analiza mi vida y piensa como te sentirias tu si no pudieras hacer nada sin que el mundo entero lo sepa.
Dos llamadas.

Lo siento, tal vez tu también te cansaste de esto. Lo que decidas estará bien.
0 llamadas.
Mi celular comenzó a vibrar y abrí el mensaje que había mandado recién.
Te quiero.
No pude aguantar y rompí en llanto.