-cómo que una fiesta para una chica!!?-Ace había hablado con el viejo capitán y este se molesto cuando supo que la fiesta era para una chica de esas tierras.
-no seas así viejo idiota! Ella es muy buena chica! Además, nosotros hacemos fiestas a cada rato y no te quejas... No seas así, viejo tacaño.
-jhmmmm pero ni siquiera conozco a la mocosa esa, dices que va al colegio no? Seguramente se pondrá en mal plan si no le agrada el barco- dijo el viejo con tono enojado y pensativo
-no juzgues si no sabes...-Ace se puso serio y pensativo, bajo la mirada y sonrío levemente.- sabes? Ella es una chica muy sencilla y humilde, lo único que queremos es, que pase un rato agradable, verla sonreír y quitarle aunque sea por un momento tanta fatiga que pueda tener...
Barba Blanca miró a "su hijo" y sonrío leve al darse cuenta de que no debía ponerse tan estricto, suspiró pesado y le dio una palmada en la espalda al chico que casi lo tumba horrible al piso del barco.
-está bien, pero no me hagan mucho desastre!
Ace sonrío como de costumbre y abrazó con fuerza al viejo
-por eso te quiero viejo, eres lo mejor-salió corriendo a avisar a los demás la aprobación del capitán.
-ah, Chizu, Sawako ahí vienen los chicos- dijo Ayane desde la ventana asomándose.
Kazehaya estaba cerca y se asomó con curiosidad, se sintió incomodo cuando miró que Sawako estaba muy feliz y apurada para salir del salón, entonces el joven estudiante miró a Ace el cual llevaba sombrero y Ace alzó la vista topándose con la de Kazehaya, los dos se quedaron así por unos momentos.
-Shouta! Recuerda que prometiste enseñarme a jugar hoy! Qué estás haciendo?-le interrumpió su compañera del otro salón Kurumi, una chica de cabello ondulado, largo y castaño casi rubio. -vamos, ya estoy ansiosa- llegó y tomó del brazo al chico el cual se dejó llevar por su amiga.
-Shouta...ella... Desde cuándo lo llama así? - susurró Sawako con carita a punto de llorar, aquello le había echo un nudo en la garganta y un vacío la invadió de inmediato, así no dijo nada y se encontró con los chicos.
Ace se dio cuenta de aquella carita triste y le apretó con ligereza una mejilla a la peli negra.
-hey, Sawako todo bien?-le miró esperando una respuesta.
Sawako tenía muchas dudas y ganas de llorar, pero negó levemente y sonrío poquito.
-ah..ah? No, no me pasa nada, yo, estoy... Bien, te te preocupes.
Comenzaron a caminar para pasear un rato, y Sawako seguía sumergida en todas sus preguntas, no se dio cuenta que estaba a punto de tropezar y caer al piso, pero Ace reaccionó a tiempo y la tomó in cuidado del brazo impidiendo que se cayera.
Sus amigas se sorprendieron pero se dieron cuanta que no había pasado nada grave, gracias a los buenos reflejos del muchacho.
Marco estaba algo serio, pues desde hacía un rato unos cuatro tipos los estaban persiguiendo sigilosamente pero el rubio no quizo asustar a las chicas. Se acercó con discreción a puño de fuego
-Nos vienen siguiendo, qué hacemos?-dice mirando que las chicas no sospechen.
-Qué? rayos, justo ahora... será mejor que les demos una "calentada"-dice Ace sonriendo de lado muy seguro de sí.
Los cinco chicos se fueron por una calle muy solitaria mientras Ayane sintió un escalofrió pues comenzó a sentir una sensación de incomodidad.
Uno de los tipos que les venían siguiendo bien se había dado cuenta desde antes, que la muchacha castaña clara tenía una cadena de oro y unos aretes de plata, y por otro lado Marco llevaba unas esclavas de oro en cada mano que se veían también de mucho valor.
-Oiga jefe cuando atacaremos?-pregunta uno de los ecuases del jefe de esa bandita mediocre de ladrones.
-A la de tres, tú y tú van con las chicas y yo me hago cargo del rubio.
De un momento a otro uno de los tipos se apareció frente a los chicos
-Atrás de nosotros!-dijo Ace en tono fuerte y serio a las chicas quienes se juntaron a la pared mirando a los malechores con mucho temor en sus miradas.
Uno de ellos llevaba una cadena pesada en las manos y con ella azotaba varias veces el piso par aintimidar a las chicas, Chizu no tenía mucho miedo pues estaba acostumbrada a las peleas pero los tipos se veían muy fuertes.
-Chizu cuento contigo-dijo Marco sonriendo a Chizu a lo que ella sintió como una total confianza y repsonsabilidad con sus amigas.
Uno de los tipos en una de esas le dio fuertemente en la espalda con la cadena al Phoenix quien cayó al piso, y en otro momento con un bate le dieron en una pierna al puño de fuego quien se molesto sin darle importancia al golpe recibido si no porque uno de los tipos se acercó y tomó a la fuerza de las muñecas a Sawko quien con lágrimas en los ojos quería apartarse del hombre feo y malo.
-Serás canijo!!!!-grito Ace y valiendole le soltó una trompada que hizo al tipo caer metros alejado, y la respiración de pecoso parecía la de un toro hecho una furia.- quien es el que sigue?-pregunta con una cara que miedo les provocó a las chicas.
Marco se levanto y arrebató el bate el cual como si fuese una varita de arbol rompió con facilidad y le tendió un puñetazo en el estómago al tipo dejandolo caer encima del otro.
Sólo faltaba uno al cual entre los dos piratas le dieron una paliza, sin compasión alguna. Tenían viles caras de bandidos los dos piratas, pero es que... nadie se puede meter con sus amigos y menos con esas chicas!!
-Sawako, estás bien? e-están todas bien?-pregunta Ace tomando las manos de Sawako que temblaban mucho. La chica asintió con algo de preocupación.
-Chicos ustedes son increibles, muchas gracias-dijo Ayane tratando de tranquilizarse acercandose a sus amigas.
-Chicas... quiero que sepan que mientras estemos aqui no vamos a dejar que nada ni nadie les haga daño, de acuedo? cualquier cosa deben decirnos..-dijo Marco sonriendo.
-esta bien-respondieron a coro.
Ese día las chicas se quedaron mas tranquilas, ese sentimiento que los chicos provocaban en ellas de seguridad las mantenía alegres de algun modo quitandose un peso de ensima.
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Déjate Llevar (One piece fanfic)
FanfictionKuronuma Sawako conocerá a Puño de fuego Ace A pesar de tener personalidades tan diferentes, ellos comenzarán con una tierna, triste pero bonita historia juntos, llena de aventuras, lágrimas, despedidas y mucho amor.