Te amo...
Despierto con la imagen del rostro de Alex en mi cabeza, me tallo los ojos tratando de acostumbrarme a la iluminación, bajo un poco las sábanas que me cubren, pero antes de que pueda hacer algún otro movimiento, siento unos labios estamparse en mi mejilla, provocándome una sonrisa brillante.
-Has despertado-murmura, dando pequeños besos hasta mi oreja.
-Y estás aquí-me giro hasta quedar frente a él.
-Siempre lo estaré-acaricia mi mejilla colocando un mechón suelto de mi cabellos detrás de mi oreja.
Me acerco hasta él para depositar un beso que él profundiza enseguida, pero sólo dura unos segundos hasta que se separa.
-Me encantaría quedarme todo el día contigo, pero lamentablemente nos esperan abajo-esboza una sonrisa incómoda.
-No importa, tendremos mucho tiempo después-le sonrío.
Permanecemos unos minutos más acurrucados, sin querer levantarnos, hasta que finalmente ambos decidimos vestirnos. Una vez listos, nos disponemos a ir hacia la puerta. Alex quita el seguro y ambos salimos de la habitación. Nos encaminamos hasta la primera planta en donde se encuentran los demás. Tomamos asiento en un sillón, observo como todos me miran expectantes y yo sin saber qué es lo que ocurre, me muevo en el sillón incómodamente.
-Sabemos lo que ocurrió -habla Rihanna.
Me quedo helada al escuchar sus palabras, miro a Alex, avergonzada, mientras deseo que la tierra se abra y me trague. Rihanna sigue con la vista fija en ambos hasta que al fin decide continuar.
-Así que supongo que todos comenzaremos una nueva dieta.
Suelto todo el aire que llevaba acumulado aliviada, sonrío para no hacer más notorio mi nerviosismo, pero al analizar las palabras de Rihanna mi preocupación vuelve a aumentar.
-Es lo más justo-continúa Monique.
-¿Qué?-exclamo.
Es necesario que Alex tome sangre humana, pero ellos no tienen por qué hacerlo.
-Hemos hablado con Sandra y ella está dispuesta a donarnos sangre del hospital-me informa Zack-. Sólo necesitamos que tú estés de acuerdo.
-No estoy de acuerdo-demando-. Pero si no hay otra manera...
--Esta noche iremos al hospital.
-Un momento... ¿La robarán?-interrogo.
-Es eso o matar personas...debemos protegerte Sarah y no podremos hacerlo sin la sangre humana, los conejos no sirven para estos casos-bromea Rihanna.
Observo a Alex ponerse de pie y dirigirse hacia la cocina de manera apresurada, pero la mirada de Rihanna sobre mí me impide seguirle, así que me limito a acomodarme en el sillón.
-Bien-digo a regañadientes.
Detesto que hagan esto.
Lo odio.
-Cambiando de tema...daremos una fiesta mañana-dice Zack con emoción-. Es nuestro cumpleaños, Monique se encargará de todo así que...
-Es una mala idea-lo interrumpo-. Acaban de comenzar una dieta de humanos ¿Y harán una fiesta?... ¡Están locos!
-Es nuestro cumpleaños Sarah...no todos los días se cumplen veinte-me guiña un ojo.
-Tú siempre cumplirás veinte años-digo, resignada. Conocía a Zack lo suficiente como para saber que mis intentos por hacerlo cambiar de opinión serían en vano.
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The Creatures
VampireSarah Cooper creyó que su vida como estudiante en la Universidad de Mellow Ville estaría repleta de café, noches sin sueño y proyectos mortales, sin embargo, las cosas resultan diferentes al conocer a un chico de ojos azules del cual siente una mist...