Capítulo 33.

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13 de mayo

Después de un par de minutos besándonos, aparto un poco a Ajax por el pecho. Pone una mano sobre mi rodilla y la acaricia con disimulo. Debo reconocer que adoro cuando se pone cariñoso y me mima.

—Creo que me voy a acostumbrar a esto de las relaciones —ronronea con una sonrisa burlona.

—¿Qué? —digo un poco confusa.

Oh mierda. ¿He aceptado ser su novia? Pe...pero...¡solo ha sido un beso!

Yo quería alejar a Laura, pero no pensé que el estuviese hablando en serio, creí que lo decía solo por expresarse. Todos somos libres de expresarnos, no tiene porque se mr una declaración.

Estira el cuerpo de tal manera que queda espatarrado en el banco en una pose relajada y satisfecha.

—Todo sale bien al fin —me mira a los ojos, sin dejar de sonreír.

No entiendo a qué se refiere por todo, y francamente dudo que sea por nosotros. Al igual que mi vida no gira a su alrededor, la suya no gira al mio. Algo me dice que esta así de contento por algo más a parte de creer que somos...pareja.

Cuesta hasta pensar la palabra, pero no soy capaz de decirle que no porque veo el brillo de ilusión en sus ojos. Ajax empieza a ser el que era antes de que lo conociese, y no quiero estropear sus avances.

Debo encontrar la manera de dejarle claro, de nuevo, con suavidad que no soy partidaria de las relaciones.

—¿Qué ha pasado? —intento parecer despreocupada, pero con un poco de interés.

—Ayer hablé con mi padre.

Levanto las cejas sorprendida de que la relación con sus padres mejore desde la última vez. Las familias deben estar unidas, y no es bonito ver desmembrada la de alguien que quieres. Por lo que saber que habla con su padre es un gran paso.

—Dijo que recibió una llamada del director de mi anterior instituto —sonríe más—. Han aparecido las grabaciones de las cámaras que prueban que yo no hice lo de la sala de profesores.

Una sonrisa enorme se planta en mi cara al ver su expresión de orgullo.

—¿De verdad? —pregunto ilusionada.

—Van a rectificar mi expediente, vuelve a estar limpio.

Sin dudarlo le doy un abrazo de esos que ahorcan. Estoy muy contenta de que las cosas se arreglen poco a poco. Ya no es un inocente inculpado, ya no está peleado con sus padres, ha hecho un amigo en el instituto, y hasta esta vistiendo de color azul. Ajax florece de nuevo y eso me hace muy feliz, porque veo en sus ojos alegría.

—El tiempo lo arregla todo —aplasto sus mejillas con diversión.

Ríe y aparta mis manos de manera que las inmoviliza a cada lado de mi cara.

—No le des al tiempo el mérito que en realidad tienes tú.

—¿Yo? —pregunto divertida—. ¿Por qué?

Niega con la cabeza, como sacudiendo sus ideas. Me rodea con un brazo, estrujandome contra su pecho, y besa mi pelo.

—Por nada.

Levanto la cabeza para mirarlo a la cara, me hace reír con una mueca.

—Hueles a chocolate —arrugo la nariz para fingir asco.

—Y eso te encanta.

No puedo evitar reír.

—Esto de tener un novio cachondo te hace ver más guapa —guiña un ojo.

Mr. Tabú y otras drogas [MTOD]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora