Después de

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TYLER PDV

Es algo extraño y medio perturbador el hecho de estar espiando a Dylan, en si creo que debería ser yo quien le ayude pero no estamos en ese nivel de confianza, por ahora solo soy el chico que conoce, no el chico que puede ir a su casa.

La amiga rubia de Dylan se me hace ligeramente conocida, pero no llego a mas con pensar en ella ya que ésta levanta a la castaña y la lleva en dirección a un auto aparcado justo en frente. Tiene dificultades para llegar, se tambalea demasiado pero cuando lo hace se deja cae y por lo poco que llego a ver se acomoda.

Aun tiene mi chaqueta, pero no importa, como esa tengo muchas.

Veo como la rubia entra en el asiento del copiloto y aun sin poder ver quien conduce ,el auto arranca.

Salgo de entre la sombras, dispuesto a regresar a casa, ya no hay nada en ese fiesta que necesite mi atención.

Camino con paso decidido hacia mi auto pero antes de siquiera sacar las llaves pasa a un lado de mí una rubia, chocando contra mi hombro, llamando mi atención, volteo a verla, ella hace lo mismo y sonríe.

Son las doce, la fiesta recién empieza.

***

RYAN PDV

Llegar a casa es sencillo lo difícil es entrar sin que nadie te vea.

La noche estuvo algo pesada, tuve una pelea luego de competir y eso me dejó un lindo moretón en la mejilla, aunque no me quejó al menos yo no soy el que tiene la nariz rota.

Esta no che la gente estaba intensa, todos habíamos escuchando eso de la llegada de Sahario, lo que resultó en una mentira. Al parecer solo querían poner a prueba a los empleados del lugar.

Lo único bueno que pude sacar fue la victoria y el dinero, que por mas que lo intente no logro gastarlo, es demasiado y mi vida, a pesar de que no parezca, no es de tantos lujos.

Con todo el sigilo que consigo llego a mi habitacion, abro la puerta con cuidado y del mismo modo la cierro.

Aliviado me tiro en la cama, y dejo a un lado la maletita que me dieron al ganar la primera carrera, que siempre es la mas costosa.

Estoy agotado, pero no quiero dormir, no me gusta.

O mejor dicho los sueños, no me gusta los sueños que tengo, pero son casi inevitables a la hora de caer dormido. A pesar de mis esfuerzos, sé que debo dormir, así que antes debo guardar el dinero.

Trato de recordar en donde no tengo dinero escondido y llego a la conclusión de que en el baño aun hay espacio detrás del lavabo. Camino con pesar y meto la pequeña maleta en el compartimento que hace un tiempo hice en caso de emergencias pero al final resultó otro escondite para el dinero, trato de acomodarla de entre otras tres maletitas de colores diferentes. Tapo el escondite con una loseta y regreso a mi cama, sin importar caigo rendido ante la comodidad de ésta y empiezan los sueños que detesto.

***

DYLAN PDV

Estoy lista para los regaños cuando estoy en la puerta de mi casa. Toco, pero nadie abre. Toco de nuevo, pasa lo mismo.

Llamé antes de venir, avisé que llegaba y no hay nadie.

Creo recordar que tenía las llaves, pero busco en la chaqueta que llevo puesta y me doy cuenta que no era así, de hecho yo ni tenia chaqueta ni bolsillos al salir de casa.

Suspiro y caso el celular de mi sujetador, porque sí, ahi lo pongo cuando no tengo donde más.

Marco el numero de, papá y este me contesta casi de inmediato.

- Hola, princesa - Me dice con su típico todo alegre y meloso - ¿Llegaste a casa? Lo siento por no estar ahi, hubo una emergencia, pero dejé a tu primo y ...

No necesite que continuara - Hola, papá. Legué bien, te veo luego. Te quiero - Y antes de colgar logré escuchar un "yo también".

- ¡LOGAN! - Grito lo mas fuerte que puedo.

-¿¡QUE!?- Responde igual que yo, aunque se escucha alejado.

- ¡ABRE LA PUERTA!- Y para hacer énfasis todo la puerta lo mas fuerte que puedo, cosa que hace que me duela los nudillos.

- ¡¿QUE?! - Salto del susto y suelto un grito - ¿Me quieres romper los tímpanos? - Dice Logan a mi lado con una sonrisa.

- ¡Idiota! - Es lo primero que sale de mi boca por el susto que me a pegado.

-¿Que querías? - Pregunta con aparente tono amable. Su mirada no sigue fija en la mía ya que la baja constantemente, no puede evitar mirar de reojo la chaqueta que llevo encima. Él sabe que no es mía.

Sólo me limito a señalar la puerta. El asiente y lo único que hace es sentarse en el suelo. Lo miro y se encoje de hombros - Pues ya abre, necesito darme una ducha.

- No tengo llave, desde que se fue tío Ed estoy a fuera - Dice mirando para otro lado.

- ¿Lo has intentado por la ventana? - Pregutno mientras paso por su lado y rodeo la casa en busca de una abierta.

- No - Responde siguiéndome.

Sonrió al ver que si hay una abierta - Bueno, intenta ahora - Le señalo la ventada y él se limita a hacer lo que le digo.



Lo siento por la tan larga ausencia, pero fue un bloqueo intenso xd pero ahora que ya pude salir de esto les aseguro que habrán capítulos mas seguidos c:

Sonrían, causitas xdxd

Incógnita Flx


Ella es míaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora