Capítulo 31

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Adrian me está dando la espalda, creo que le molesto lo que le dije. Sé que no debería meterme en sus asuntos pero realmente me preocupa su actitud.

—No pasa nada, solo estoy distraído, no te preocupes.

—Ok.

Decido no seguir indagando, es obvio que no me quiere contar. Necesito darme una buena ducha, hoy camine mucho y las piernas me están matando. Me saco los borceguíes y las medias, masajeo un poco mis doloridos pies mientras veo como Adrian busca algo en el placard y luego se mete al baño. Pronto escucho un ruido extraño provenir de ahí, me pregunto que estará haciendo. Unos minutos después sale y al verlo ya tengo mi respuesta. Se rapo, a cero. No es que antes tuviera el pelo muy largo, solo sería un centímetro, pero no dejo nada de él. Agarra un par de cosas que mete en sus bolsillos y se vuelve a poner la campera.

—Me tengo que ir, vuelvo tarde, tengo varias cosas que hacer. Quedate acá.

El tono que utiliza no da lugar a replica por lo que solo atino a asentir. Se acerca a la puerta y antes de salir se gira para enfrentarme.

—Cualquier cosa que necesites llamame.

Ahora su voz es más suave.

—Está bien.

Y con eso sale de la casa. No sé qué le pasa, pero sea lo que sea lo afecta y mucho. Me levanto perezosamente y arrastro mis pies hasta el baño, es hora de mi merecida ducha. Abro el agua caliente y lentamente me voy desvistiendo. Una vez bajo el chorro de agua masajeo mis piernas y mis hombros, me duele todo. Quince minutos después salgo del baño con una toalla envolviendo mi cuerpo y mucho más relajada.

Voy a mi mochila y noto que ya no tengo mucha ropa limpia, con dos días de lluvia me fue imposible lavar la ropa sucia. Solo tengo una calza, una remera y dos tangas. Como no pienso salir, más por imposición de Adrian que por mi propia elección, me pongo una tanga y la remera que me prestó él para dormir. Agarro mi celular y veo que son las tres y cuarto de la tarde. Me tiro en la cama a descansar un poco, quizás incluso me duerma una siesta.

Mientras estoy recostada mirando el techo repaso mentalmente mi día, creo que fue bastante productivo, aunque me dejo con más incertidumbres que antes. Si bien deje mi curriculum en varios locales, la realidad es que no tengo mucha experiencia y la que tengo no es comprobable. Después de todo solo me dedique a hacer alguna que otra changa para sacar algo de dinero para el momento. Tampoco tengo mis estudios terminados, otra cosa que juega en mi contra. Así que tuve que dibujar un poco mi curriculum para hacerlo un poco más atractivo.

En cuanto a mis estudios, para que me reconozcan lo que curse en el terciario debería presentar los programas certificados de esas materias para ver si me las validan. Eso sí que no va a suceder, ni loca vuelvo a ese lugar, prefiero empezar de cero a correr el riesgo de volverlo a ver. En pocas palabras, todavía no tengo idea de que va a ser de mí y mi futuro. Toda la determinación que tenia al salir esta mañana de casa se esfumo, pero no pienso rendirme fácilmente. Pronto mis ojos comienzan a pesarme y poco a poco me dejo llevar por el sueño.

Despierto sobresaltada y completamente perdida, noto que tengo la frente perlada de sudor y la remera esta adherida a mi cuerpo. Busco mi celular con la mirada, lo encuentro arriba de la mesa así que me levanto con algo de dificultad y lo alcanzo para ver la hora. Son las seis y media, Dios dormí bastante. Adrian todavía no volvió y sospecho que no lo va a hacer por un largo rato. Decido darme una rápida ducha para quitar todo este sudor molesto.

Unos minutos después salgo del baño envuelta en la toalla, me acerco al placar y busco con la mirada entre la ropa de Adrian. Agarro una remera roja y me la coloco, espero no se enoje por mi atrevimiento. Mi estomago gruñe haciendo un ruido horroroso y caigo en que llevo muchas horas sin ingerir un bocado. Abro la heladera en busca de alguna fruta pero no encuentro ninguna. De hecho la heladera está bastante vacía, creo que sería bueno ir a comprar a lo de Nina algunos suministros. 

Despertar a la Vida (#Wattys2016) SIN EDITARDonde viven las historias. Descúbrelo ahora