121. Maximoff

8.1K 591 80
                                    

Dios, él si que era molesto.

Pietro Maximoff era, probablemente, el Avenger más molesto de todos. Incluso más que Tony, y eso si que era difícil. Pietro siempre encontraba el momento más inoportuno para molestarte.

Aún así, confiabas en él como un compañero. Sabías que, cuando llegaba el momento, él se concentraría al máximo en la misión. Esa había sido la única razón por la que habías aceptado ser su pareja en la misión. Bueno, eso y porque tenía un trasero fantástico, pero ese no era el punto.

Pietro, todo sangriento y magullado, estaba sentado a tu lado en el pequeño transporte de SHIELD. Estaban de camino a encontrarse con el Capitán y Tony. Ellos estaban al otro lado de la ciudad que había sido aterrorizada por los ataques de HYDRA. Pietro y tú habían sido asignados a trabajar en el sur de la ciudad y habían sido bombardeados por muchos más agentes de HYDRA de lo que habían esperado. Pietro y tú se habían salvado la vida mutuamente tantas veces que les resultaba muy alocado.

Pero, aún así ustedes dos habían logrado salir de allí, vivos y coleando. Aunque, al parecer, Pietro había salido algo afectado debido a los golpes ya que él comenzaba a actuar algo estúpido y se reía por cualquier cosa. Él no paraba de hablar estupideces. Estuvo unos cinco minutos burlándose sin parar de la cara que había puesto Steve cuando lo había encontrado besándose con Natasha. Y, como si fuera poco, ya llevaba diez minutos hablando de una serie que, al parecer, se había hecho fan. 

-Y así terminó la segunda temporada. Luego, en la temporada tres, la cual es mi favorita, todo se puso más intenso y...

-Pietro-, lo interrumpiste -. Por curiosidad, ¿Cuántas temporadas tiene la serie?

-Once-, murmuró y tú bufaste, sabiendo lo que te esperaba -. Pero ese no es el punto, T/N. En la tercera temporada todo empieza tranquilo y, luego ¡Boom! De repente, todo cambia.

Volviste a ignorarlo y consideraste la idea de entregarlo a los agentes de Hydra. Además, creo que Steve me agradecería por eso, ya que él nunca paraba de molestarlo.

-¿Falta mucho?-, preguntaste al agente que conducía. Pensandolo mejor, si lo entregaba a Hydra, luego tendría que pelear contra él y nunca convenía tener a un chico súper rápido como enemigo.

-Falta poco, señorita-, contestó amablemente pero tú, aún así, bufaste cansada y te cruzaste de brazos.

Una gran explosión golpeó el frente de la camioneta, causando que esta diera una vuelta en el aire. Pietro te tomó y te envolvió entre sus brazos antes de que el transporte volviera a caer al suelo. Ambos cayeron, abrazados. Te habías golpeado la cabeza y sentías como la sangre corría por tu cuello al sentarte. Otra vez, estabas viva gracias a que Pietro estaba allí con su gran velocidad. Miraste a Pietro a tu lado pero, en vez de verlo a él, viste a tres Pietros. Pestañeaste un par de veces y, luego, frotaste tus ojos.

-Y/N. Bebé, ¿Estás bien?-, preguntó, tomando tu rostro entre sus manos -. ¡Estas sangrando!

Asentiste y Pietro te ayudo a levantarte. Por suerte, el conductor se encontraba bien y los tres salieron como pudieron del vehículo. El conductor se recostó en el suelo, ya que estaba bastante herido y, mientras tú observabas como se encontraba, Pietro había ido a revisar quien había disparado en contra del vehículo.

Unos agentes de Hydra salieron de entre los árboles con armas apuntándote. Fácilmente te deshiciste de ellos pero, el problema fue cuando más y más comenzaron a salir. Sabías que no ibas a poder contra todos pero, aún así, permaneciste fuerte.

-Steve, Tony. Necesitamos su ayuda, ahora-, murmuraste en tu comunicador, esperando que los agentes no te escucharan.

-En camino-, contestó Tony.

Pietro apareció de un segundo al otro a tu lado y comenzó a pelear contra los agentes. Peleaste lo más duro de lo que jamas lo habías hecho. Te sentías exhausta pero, aún así, continuaste luchando. Tus brazos y piernas pesaban más de lo normal y sentías el sudor helar tu espalda.

-¡Cielos, T/N!-, gritó Pietro por sobre los quejidos de los agentes de Hydra -. Deberías sudar más seguido, te hace lucir sexy.

No pudiste distinguir si él estaba siendo sarcástico o no, pero tampoco importaba, simplemente estaba demostrando su normal idiotez. Pero, aún así, por alguna razón, sentiste como tus mejillas se ruborizaban. Además, Pietro había olvidado que había dejado su comunicador encendido, y que Tony y Steve podían escucharlo.

-Wow, Pietro, tranquilo-, se mofó Tony -. Este no es el momento adecuado, ¿No crees?

Pietro guiñó el ojo aunque sabía que nadie podía verlo.

-Siempre es el momento adecuado, Stark.

Bufaste y canalizaste la frustración que sentías en el hombre que se entraba frente a ti. 

-¿Podríamos concentrarnos en la misión, chicos?

-¿Cómo se supone que me concentre si tú sigues distrayéndome, T/N?-, comentó Pietro.

Steve y Tony aparecieron y los ayudaron a derrotar al resto de los agentes. Eso te hiso sentir mejor ya que no podías esperar para volver a casa. Estabas cansada y hambrienta, te sentías como si hubieras estado peleando por meses, sin ningún descanso. Inclusive Pietro se veía algo cansado, aunque no tanto como tú.

-¿Por qué no descansas, T/N?- prenguntó Pietro. Se encontraban en un nuevo vehículo, Steve y Tony se encontraban en la parte de adelante mientras que Pietro y tú compartían la parte trasera -. Será un largo viaje de vuelta a Nueva York -, insistió, su tono de voz era mucho más suave que lo normal.

En cuanto estabas por negarte, bostezaste y lo miraste con tus ojos cerrándose. 

-Esta bien. Pero nada de bromas, ¿Ok?

Él asintió con una sonrisa y apoyaste tu cabeza en su hombro antes de cerrar los ojos.

MARVELDonde viven las historias. Descúbrelo ahora