Confianza & Favores.

598 55 20
                                    

—Miren lo que llegó hasta aquí... —pronuncia Maia con tono frío, aunque mirándome de modo peleador.

—Maia... —respondo con tono frío y cabreado. Me levantó gracias a la ayuda de Vanessa —, Siento haber tropezado contigo, todo fue un accidente.

—Parece ser que los accidentes te rodean, ya que... El mismo hecho de que estés aquí, ya es considerado un accidente —responde ella atacándome.

—Maia, pienso que no debe...

—¡¿Escucharon eso?! —pregunta Maia interrumpiéndome y provocando que muchas personas se agrupen, para poder mirarmos —. Ella sabe pensar —dijo con tono de burla y riendo.

Todos alrededor empezaron a reír a carcajada limpia, todos se reían de mí.

—Yo no he hecho nada como para que...

—¡Cree que puede defenderse de mí! —grita mientras todos la observan con atención, algunos aún siguen riendo —. ¡Qué miedo! —dice mientras disimula que está temblando.

—No te tengo miedo —digo dando un paso hacia ella. Ella hace lo mismo, demostrando que es mucho más alta que yo, pero no demuestro incomodidad.

—Pues deberías, porque disfrutaré hacer esto...

Maia se acerca aún más y leanta uno de sus puños, ella está lista para darme un golpe, quiere golpearme. Me alejó, y termina golpeando al aire.

—Siempre supe que eras una gallina —pronuncia en mi rostro. Yo me quiero defender, pero en eso Vanessa se acerca.

—¡Laura no es ninguna gallina! —grita Vanessa, defendiéndome y muy cerca de Maia. Las dos tienen una altura similar, sólo que Vanessa es un poco más alta que Maia —. Laura por lo menos es inteligente y simpática. No como tú, que crees que por ser popular, las personas siempre te defenderán. Pero en realidad, no tienes amigas —Maia abre la boca, pero la cierra de inmediato —. Te gusta humillar a los demás, cuando en realidad, eres tú quién no tiene ningún tipo de seguridad en sí misma.

Vanessa termina ese discurso, y se acerca a mí para poder abrazarme. Entonces, algunos de los presentes nos aplauden y Maia los mira con odio, pero eso no les importa, ellos sólo siguen con sus aplausos. Yo le sonrió a Vanessa, ella me devuelve la sonrisa. Ahora siento más seguridad en ella.

—Bueno, al menos yo no soy tan patética que necesito que terceros vengan a defenderme —dice Maia después de un rato, con su típica actitud de reina.

—No hay nada más patético que tener que insultar a otros, para sentirte superior a los demás —responde Vanessa. Los presentes pronuncian un gran "¡OOOH!" & yo puedo ver como la cara de Maia se pone completamente roja de la furia. Ahora sí que se armó la grande.

Maia empieza a reír a carcajada limpia.

—No cariño, no me creo superior —responde moviendo su cabello, como si con eso pudiera golpear a Vanessa. Pero mi amiga sólo rueda los ojos y suspira, como si estuviera aburrida —. Sé que soy superior. Y como soy superior, me voy. No perderé mi tiempo con ustedes.

Maia se aleja y algunos la siguen. Yo no puedo evitar comenzar a reír, la verdad es que Maia tiene una actitud realmente infantil, es una odiosa.

—Y como soy superior, me voy... —imita Vanessa, con la misma actitud y haciendo eso de tirar el cabello en la cara. Las dos nos reímos a carcajada limpia, porque le salió igual, con el mismo tono de voz chillón.

—Gracias por defenderme —digo después de un rato.

—Alguien tenía que darle su merecido a Maia, ya ha estado demasiado tiempo arriba de una nube imaginaria —responde rodando los ojos. Yo suspiro. Claro... Sigue enojada conmigo.

Un amor de ensueño.Where stories live. Discover now