Posiciones Comprometedoras & Superar Miedos.

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Me iba a separar de Ross, pero al final, no lo hice porque el me estaba siguiendo. Después de hablar un poco, decidimos que sería una buena idea sentarnos en unas bancas que hay en el patio del colegio, son bancas blancas, se ven bonitas porque están rodeadas de flores y naturaleza, es algo muy agradable.

Estamos sentados, sin decir ni una palabra. Aunque con sinceridad, me siento cómoda con él. Es un poco raro, ya que siempre estamos peleando. Supongo que es normal, digo... Los enemigos pueden llevarse bien después de un tiempo. ¡No podemos estar peleando toda la vida! Sobretodo si fingiremos ser novios, los novios no pelean todo el tiempo. ¿O sí...? ¡Nunca he tenido un novio! No sé lo que hacen y lo que no hacen. Sólo sé que se besan, se cuidan...

Mis pensamientos son interrumpidos por la risa de Ross. Ríe a carcajadas y yo lo veo con el ceño fruncido. Estábamos en silencio, ¿Por qué se ríe? Esto definitivamente no es normal.

—¿Qué es tan gracioso? —pregunté al empezar a irritarme, debido a su risa.

—Nada, sólo que recordé el día en que nos conocimos —responde Ross con una sonrisa, ahora soy yo quién frunce el ceño —. Recuerdo que estabas trepada en un árbol.

Sonreí. Ahora empezaba a recordar todo, como si hubiese ocurrido ayer.

—Sí, y tú tocabas la guitarra —respondí sonriendo. Él asintió. Recuerdo que esa melodía era muy linda, era relajante, un tanto profunda, me gustaba su ritmo.

—¡La pelea que tuvimos con los huevos! —gritó. Los dos empezamos a reír a carcajadas. Esa pelea fue tan divertida, Ross había pisado mis huevos, al caer en ellos. Los dos nos ensuciamos tanto, todo había sido muy entretenido. Aunque hay que admitir que los dos nos enojamos bastante cuando todo eso sucedió.

—En ese momento, quería asesinarte —le dije mirándolo fijamente.

—No, eso fue algo gracioso —me corrige él —. Tienes que aprender a relajarte un poco más.

—Sé bien como relajarme.

—Sí, debes ser relajada. Quizás al dormir —dice rascando su nuca. Yo ruedo los ojos, ¡Empezamos con sus bromas!

—Puedo ser la persona más relajada del mundo, cuando quiero.

—¿Sí? —pregunta en tono retador. Yo asiento, porque ya no sé qué más decir, presiento que pronto peleáremos de nuevo —, ¡Demuéstralo!

—De acuerdo.

Me levantó de la banca en la que estamos sentados, comienzo a correr y sin importar que estamos en el colegio, que llevo una falda y que estoy fuera de clases, veo un árbol y sonrió. Llegó al árbol y cuidadosamente empiezo a trepar, hasta que finalmente, llegó a una de las ramas de más arriba. Sonrió nuevamente. El viento sopla y choca contra mi piel, es una sensación tan agradable, esto me encanta.

—¡Guau! Veo que eres buena trepando árboles, nada habitual en una chica —grita Ross desde abajo.

—Te puedo escuchar sin la necesidad de gritar —respondo sin gritar, él asiente y ríe —. Amo trepar árboles.

—Bueno... Te gusta algo poco convencional, que de cierto modo, es arriesgado.

—No es arriesgado, es bastante relajante estar en la cima de los árboles —veo todo lo que puedo, y me doy cuenta de que tengo una vista hermosa. Veo casas, un parque, más naturaleza, más vida. Es hermoso —. Aquí arriba, te sientes la Reina del Universo.

—¡Baja de ahí! —grita Ross.

No le quiero hacer caso, es más, quiero subir un poco más, para ver qué otras cosas puedo ver. Me enderezó en la rama, pero sin querer piso mal y la rama se rompe. Voy cayendo al suelo, cierro los ojos porque estoy segura de que me romperé algo, tal vez me muera. Esto fue una terrible idea.

Un amor de ensueño.Where stories live. Discover now