Capítulo 32: Ir de espacio, eso era todo lo que necesitaba.

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Gustavo

-Pensé que no te gustaba–Dije sonriendo como tonto–

Ella soltó una risita.

-Yo pensé que no te gustaba a ti.

Me levante de mi asiento y me dirigí al suyo. Me puse de frente a ella y me agache, tome su rostro con una de mis manos y con la otra tome su mano.

-Tú, me, encantas–Dije acercándome a ella, despacio–

Amanda

Mi pecho subía y bajaba con brusquedad. La sonrisa tonta estaba tatuada en mi rostro.

Pero como soy experta en decir cosas estúpidas...

-Entonces esto si es una cita–Sonreí–

-Jajajaja. Definitivamente si–Dijo acercándose más– la primera cita de muchas.

Mi aliento era irregular, y estábamos tan cerca que podía sentir el calor de su cuerpo, y nuestros alientos eran uno solo.

Íbamos a besarnos y estaba aterrada.

Su boca estaba a un centímetro de la mía. Puso sus manos con suavidad en mis mejillas y...

Gustavo

Lo siguiente que sentiría serían sus labios... esos perfectos labios que había querido tener desde hacía mucho tiempo. Estábamos a un suspiro, a menos de un centímetro...

Puse mis manos en sus mejillas, y justo cuando iba a besarla...

Se alejó.

Abrí mis ojos con asombro ante su repentino rechazo.

-¿Pasa algo? –Fue todo lo que me atreví a decir–

-Yo, tu, nosotros...

Me acerque a ella de nuevo, con cautela y tome sus manos entre las mías.

-Vas muy rápido, supongo–Dijo apoyando su cabecita contra mi pecho–

-Lo siento.

-Solo, tengo miedo–Dijo en un susurro–

Levante su carita, sus ojos estaban mojaditos y me sentí como idiota por un momento.

-Oh, Amanda, lo siento, si voy muy rápido yo... puedo ir al ritmo que quieras. Yo puedo ser lo que quieras, solo pídelo y yo lo seré para ti.

-La última vez que me gusto alguien como me gustas tú, las cosas no fueron muy bien. Solo tengo miedo de ser lastimada de nuevo.

-No voy a lastimarte–Dije con seriedad– Eres una mujer hermosa, que merece una vida hermosa.

El color carmesí subió a sus mejillas, y sus ojos se abrieron un poco.

-Solo hay que ir despacio–Dijo abrazándome–

-Me gusta ir despacio–Dije contra su cabello–

Amanda

Ir de espacio, eso era todo lo que necesitaba, no quería aferrarme demasiado rápido, no quería ser herida demasiado pronto...

No ahora, no de nuevo, no con tavo.

-¿Hermosa? –Llamó tavo con suavidad–

-¿Si? –Dije con timidez–

-Tengo otra sorpresa–Dijo tomando mi mano–

-Aw ¿Es en serio?

-Muy en serio. Pero... ¿Te importaría mojarte?

Solté una carcajada.

-¡Amo mojarme bajo la lluvia! Pero... no quisiera dañar las botas.

-Oh, está bien, puedes dejarlas aquí. De todas formas volveremos.

Me quite las botas, quedando en calcetines y deje mis pertenencias junto a ellas. Tavo hizo lo mismo.

-Entonces... ¿A dónde vamos? –Pregunte con suspicacia–

-Es sorpresa, bobita.

El tomo mi mano y mi corazón se aceleró. ¿Cuándo era que iba a dejar de pasarme esto?

Pensando en esto, otras preguntas surgieron en mi mente...

¿Qué éramos exactamente?

¿Novios? No.

¿Amigos? Tampoco.

¿Cuándo iba a pedírmelo? Un misterio.

Las gotas de lluvia contra mi piel, me despertaron de mi sueño.

-Seguro esto va a gustarte Mandi–Dijo Tavo–

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Estábamos empapados y me encantaba. Íbamos caminando a través del bosque y mis medias empapadas sentían el césped.

Su mano contra la mía, se sentía perfecto.

El sonrió.

Estábamos en medio de un hermoso paisaje. Había un círculo de césped bastante grande rodeado de florecitas azules.

Él saco su teléfono y abrió la cámara.

-Tomémonos una selfie–Achico sus ojos con ternura mientras me miraba– quiero un recuerdo del día más feliz de mi vida.

Le dedique una sonrisa.

Nos tomamos unas cuantas fotos y estábamos geniales. Su cabello mojado se pegaba a su frente de una manera sexy.

Él me miro y sonreí.

-¿Qué? –Preguntó–

-Nada. Solo...–Solté una risita tonta– me hace feliz haberte conocido.

Él se abalanzo sobre mí y me abrazó, levantándome del suelo y girando conmigo.

Empecé a soltar risitas tontas, y él rio conmigo.

Estábamos girando y sonriendo. Sentía que la felicidad de mi pecho se desbordaba, y deseé quedarme aquí, con él, por siempre.

Pero no fue así.

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Hola ñeñes ¿Me extrañaban? jajajaja ¿no? ok no:(

espero que no me odien por las siguientes cosas que escribire....

los quieruu<3

los quieruu<3

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¿Y si me enamoro de una Cristiana?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora