—Estoy lista. —Le dije a Niall y caminé hacia él.
—Te ves hermosa. —Se levantó del sofá.
Le sonreí y le di un beso.
Siento miles de emociones cuando me dice algo lindo, diario hay miles de esas palabras.
Yo no se las pido, de él nacen lo cual lo hace especial.
Salimos tomados de la mano, subimos al auto de Niall y nos dirigimos al centro comercial, Niall dice que no hay tanto problema pues se puede escoger sin tener que esperar dentro de las tiendas.
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—Ese te queda perfecto. —Le dije a Niall mientras le acomodaban él traje.
—Me lo llevo. —Él sonrió.
—Creí que te ibas a medir mas.
Él sonrió. —A ti te gusto, eso es lo que quería.
La chica que le estaba acomodando él traje, nos miro y sonrió.
Niall pagó él traje con una tarjeta y salimos de aquella tienda para después dirigirnos a una tienda de vestidos.
Hay muchos y muy hermosos, traje él dinero de mis ahorros aunque no se lo había dicho a Niall.
Algunos son realmente caros, pero trataré de escoger uno muy lindo.
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Van 7 vestidos que me pruebo y ninguno me ha gustado.
Me están ayudando a acomodar uno que Niall escogió, cuando la señorita término me mire al espejo, me quedé congelada, tengo que admitir que me veo hermosa dentro del vestido.
—Te ves muy bien. —La señorita me dijo y sonrió.
—Gracias. —Sonreí.
Abrió las cortinas y caminé hacia Niall.
—Te ves. —Hizo una pausa y sonrió. —Te ves hermosa, sin duda alguna, ese es él indicado.
—Sera este. —Le dije a la señorita y entre nuevamente al vestidor.
Cuando salí, fui por mi pequeño bolso, él cual se lo deje a Niall.
—Iré a pagar y en un segundo vuelvo. —Le di un corto beso en los labios.
—Ya lo pagué. —Dijo.
—¿Qué? No... —Negué con la cabeza. —Yo lo iba a pagar.
—Aqui tiene. —Una señora nos dijo y me entrego las cosas.
—Gracias. —Le sonreí y se fue.
—¿Nos vamos? —Niall dijo mientras se levantaba.
—Niall... Yo lo tenia que pagar.
—Vamos, amor. —Se acercó a mi. —Olvidate de eso.
Tomó mi mano y caminamos hacia él auto.
—Becca. —Dijo antes de encender él motor.
—No quiero que pienses que te quiero por tu dinero.
Niall hizo una mueca y me miro. —Se que no me quieres por él dinero. —Acaricio mi mejilla. —Siempre te lo diré. Tu eres la indicada por muchas razones, una de ellas es porque tu me quieres por como soy y no por mi fama.
Bajé la mirada. —Perdón... —Lo miré. —Te amo, Niall.
No dijo nada, se acercó y me beso.
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—¿Qué te parece si hacemos una fiesta en 3 días? —Niall preguntó sacandome de mis pensamientos.
—¿En 3 días?
Asintió. —Si.
—Claro, tendremos que ir de compras.
—Mañana iremos y llamaré a todos mis amigos.
Asentí. —Si, me parece muy bien.
Me abrazó y seguimos viendo la televisión.
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—Mamá. —Le dije.
—¿Que pasa cariño?
—Gracias por dejarme estudiar en línea.
—Niall me explicó todo, será lo mejor, solo no quiero que dejes él estudio.
Sonreí. —Lo se, mamá.
—Espero y algún día puedas venir a comer a casa, se que ahora con Niall tu tiempo será limitado, me alegra que estés con él chico con él que siempre quisiste estar. —Hizo una pausa. —Yo estoy bien, pero quiero que hablemos junto con David.
David... Si, su jefe se llama David.
No respondí.
—Hija, se que es difícil, pero me respeta y me apoya.
Con los ojos cristalizados, decidí responder.
—Esta bien, mamá.
—Te quiero mucho, Bec. —Sollozo.
—Tranquila, mamá. —Le dije. —Me harás llorar también a mi.
—La casa se siente vacía.
—Creí que David estaría ahí.
Hubo un silencio.
—No, hasta que tu lo permitas y lo aceptes.
—Te amo mucho mamá.
Hablé un rato mas con mi mamá, me senté en la cama y deje soltar unas cuantas lágrimas, hasta que Niall salio de la ducha y me vio.
—¿Que tienes, linda?
—Hablé con mi madre. —Lo abracé. —Dice que un día podría ir y comer con ellos.
—Recuerda que tu mamá es feliz.
—Lo se, y lo entiendo. —Me separé de él y lo miré. —Pero no quiero que le pase nada.
—Confía en ella. —Me besó.
Me duele un poco, pero me tengo que hacer la idea de que es por la felicidad de mi madre y la quiero ver feliz.
