Han pasado dos semanas en las que he continuado con mi vida cotidiana junto con Niall, aunque tengo que decir que se me están pasando volando los días.
La clase ha sido muy cansada, creo que esta vez hemos hecho mas cosas.
Bajé del auto y entré a la casa. Dejé mi maleta en él sofá y mis llaves en la mesa, escuché él agua que provenía de la regadera.
Subí corriendo para poder ir a ver a mi chico, abrí la puerta y lo primero que mi mirada detecto fue a Barbara sosteniendo su espejo y pintando sus labios.
—Rebecca. —Sonrió con dificultad. —He tenido que convencer a tu novio de ir al golf.
Asentí y caminé lentamente hacia la ventana.
—No puede estar encerrado aquí. —Señalo la cama. —Esperandote.
Iba a decir algo, pero se que no vale la pena hablar con una persona como ella, sinceramente no le interesa lo que haga Niall.
Miré hacia la puerta del baño y ahí estaba Niall.
—Linda. —Me abrazó en seguida. —¿Como estas?
Lo abracé. —Bien, ¿Que tal tu?
—Bien, saldré un rato con Barbara.
Asentí. —Claro, mientras estaré aquí en casa.
Al poco rato, Niall se fue con Barbara, me quedé sentada en la cama, después decidí no tener ningún pensamiento malo y me puse a hacer la cama al igual limpie un par de cosas.
••••••
—Guapa, te extraño! —Gritó Jesy.
Reí ante su grito. —Yo a ti.
—Tienes que contarme sobre lo de la Barbara.
Hubo un silencio.
—Son solo amigos, sabes que los paparazzis son así.
—Te conozco, aunque no pueda verte, se que algo mas pasa.
No quería mentirle a mi mejor amiga, menos sabiendo que ella me brinda toda su confianza.
—Tuve una pelea con Niall por ella. —Hice una pausa. —Pero lo arreglamos en seguida.
—Se que es él guapísimo de Niall Horan, pero no por eso te va a hacer daño.
—No lo hace ni lo hará. —Dije segura.
—Bueno, guapa, tengo que ir al colegio a entregar papeles.
—No olvides que te amo! —Le dije.
—Yo a ti.
Al terminar la llamada, encendí él televisor.
Cambie un par de veces de canal, hasta ver un canal de Golf. Justo a tiempo, enfocaron a Barbara y a Niall.
Creí que solo iban a jugar, pero al parecer había un juego.
••••••
Niall no había llegado, 9:30 p.m. y supuestamente esta en él club.
Intenté llamarle pero su celular estaba apagado.
No estoy celosa por él hecho de que se fue con Barbara, simplemente estoy preocupada por él.
Volví a marcar su numero pero no hubo respuesta.
Estaba cansada, así que me acosté después de haberme duchado.
Entré a mi facebook y habían miles de fotos de Niall junto con Barbara.
Todos hablan sobre mi.
Después de un rato mirando él techo, me salieron un par de lágrimas, sentía algo, algo que no iba bien, me preocupe por Niall, por mi madre, por Jesy, por los chicos, etc.
Sonó mi teléfono y respondí en seguida.
—¿Hola?
—Bec, ¿Estas bien? —Se escuchó la voz de Harry.
—Claro, ¿Tu estas bien? —Me preocupe.
—Lo digo por Niall.
Suspire. —Estoy bien, me aviso.
—¿Ya te llamó?
—Ya. —Mentí. —Estará un rato en él club.
—¿Porque tú no fuiste?
—Estoy cansada, con él trabajo me siento aun mas cansada.
—Bueno, Bec. Cualquier cosa, me llamas.
—Gracias.
Dejé mi celular en él buró y cerré mis ojos.
••••••
Miré él reloj de mi celular con los ojos entrecerrados.
Las 2:00 a.m.
"Mira las noticias de media noche! Dime que no es verdad!"
Jesy me había enviado él mensaje a las 11:57 p.m.
Abrí facebook, sabia que se trataba algo de Niall.
Otras fotos con Barbara dirigiéndose hacia él hotel. Entraron y hay miles de chicas preguntando por Rebecca.
Me senté de golpe, abrí las imágenes y efectivamente, Niall y Barbara estaban entrando a un hotel, primero pasó ella y después Niall.
Una pequeña lágrima salio de mi ojo, quería pensar que Niall solo iba a pasar la noche, en una habitación solo, sin esa chica!
Pero... ¿A quien quiero engañar? Esta vez no es solo Niall Horan, es mi novio! Me preocupa muchísimo mas que antes.!
Me acosté y mis lágrimas salieron, él sueño se había ido, al igual que él cansancio. Tan solo las imágenes que se venían a mi mente me mataban, imaginar que Barbara esta con Niall después de haber bebido...
¿Qué explicación me iba a dar Niall?
Sin saber lo que hacia, tomé mi celular y marqué ese número que ni yo misma me esperé marcar en mi vida.
