Segundas oportunidades (Serie Love 03)

Capítulo 31

-¿Señorita Lewis? Tiene visita. ¿Necesita ayuda ahi adentro?
Ambos suspiraron aliviados. No les habían descubierto.
Bruce salió despacio de ella, apenas conteniendo un gemido.
Ella no lo llevaba bien tampoco.
-No hace falta. Enseguida salgo.
Escucharon voces al otro lado. Parecía que habia dos personas más a parte de la enfermera.
-Será mejor que te quedes aqui por ahora. Hemos evitado que nos descubrieran pero si te ven salir de aqui conmigo...
-Lo sé. Esperaré. Pero tenemos que hablar de lo que acaba de pasar.
-Ambos lo necesitabamos. Ha sido una buena follada, doctor. No hay necesidad de aclarar nada.
-No usé preservativo y tu no has tomado la pildora desde que estas aqui. Evidentemente si debemos hablar.
La mirada de ella se entristeció.
Era doloroso verla asi.
-No tienes que preocuparte por nada. La persona que me apuñaló me hirió de tal modo que será imposible para mi tener hijos. Escuché a las enfermeras esta mañana temprano.
Sin pensarlo un solo segundo, la estrechó entre sus brazos. Con fuerza.
-Sé que quizá no lo consideres ahora mismo pero hay otras opciones. Adoptaremos si quieres. Haré lo que sea por hacerte feliz, pequeña.

Cinco minutos después, Samantha salió del cuarto de baño con un camisón limpio y los ojos aun enrojecidos.
-¡Hannah!
-Hola Sam. Vinimos a verte.
-¿Vinimos? -dijo mirando alrededor de la habitación pero solo estaban ellas.
-Si. Jason fue a por un café.
-Oh, de acuerdo.
-Entonces... ¿quien había ahi dentro contigo?
Abrió mucho los ojos al comprender lo que Hannah insinuaba.
-Esto...
-Hola Hannah.
-¡Bruce Shepard! Que interesante. Veo que estás muy bien acompañada.-les guiñó un ojo ambos y estos no pudieron evitar sonreír.

Hannah les observó. Hacia tiempo que en las sesiones con Samantha se había preguntado si estos dos finalmente llegarian a algo. Por lo visto, estaban en camino.
Definitivamente eso era algo bueno.
De todos modos, esperaba encontrar a Arin aquí.
Todavia no podia creer lo que eran las coincidencias.
Que sus hijas fuesen a la misma escuela y a pesar de que se llevaban casi dos años, su amistad era fuerte.
-Será mejor que nos vayamos entonces. Solo quería ver como estabas.
-Gracias por venir. Dale un beso a Jason y a las niñas de mi parte.
-Por supuesto. Tened un buen día.
Cuando salió de la habitación, Jason se acercaba por el pasillo.
-¿Ya nos vamos?
-Si. Creo que esos dos tienen que hablar.
-¿De modo que si que estaba acompañada?
-Oh, si.
-Bien. ¿Y que hacemos? Las niñas estan con tu hermana.
-Se me ocurren un par de cosas que podríamos hacer a solas...
-¿Solo un par?
-Siempre podemos improvisar.
Jason la tomó de la mano y entraron en el ascensor.
Antes de que las puertas se cerrasen tras ellos se abalanzó sobre la boca de su mujer.