VEREDICTO

26.7K 1.7K 60
                                    

-¡Ha sido un auténtico error traerla aquí!

-¡Sólo nos va a traer más que problemas!

-Queríamos vengarnos, y todo lo que hemos conseguido es una declaraciónde guerra.

-Lo mejor es devolverla.

Todos esos comentarios son los que oí cuando entré a la llamada: "sala de reuniones" donde nos llevo Taylor a mí y a Kevin.

-¡Callaos! -gritó la mujer que me encontré cuatro días antes en el claro del bosque.

Justo en ese momento, todos se volvieron a verme. Algunos apartaron la mirada de mí, tal vez avergonzados de saber que les había oído. Otros me sostuvieron la mirada, como desafiándome.

Todo lo que hice fue sentarme donde Taylor me indicó, justo al lado de la mujer, cual supuse que sería la llamada: "Marilyn".

-Me alegro de que hayas despertado ya, Karen. Sobre todo de que todo haya ido bien -me extendió la mano y yo se la cogí, en modo de saludo- Siento el trato que tuvimos el otro día, pero no podíamos atrasarnos más, y tuvimos que traerte a la fuerza -se disculpó.

-No te preocupes. Gracias a ello, ya vuelvo a ser lo que era antes -ella me asintió y pasó su mirada a todos los presentes.

-Muy bien. Comencemos de nuevo con la reunión. A ver si ahora se puede empezar con buen pie y respetando los turnos de palabra -lanzó miradas de asesina a aquellas personas que habían hecho esos rudos comentarios sobre mí- Antes de nada, informemos a Karen sobre lo ocurrido.

-Ya lo sé. Taylor nos ha dicho a mí y a Kevin que Derek os... nos -me corregí- ha declarado la guerra.

-Oh, mejor. Ya vienes informada -me sonrió y le agradeció a Taylor sobre ello- Así perderemos menos tiempo. Bien, quien quiera hablar, que levante la mano -más de diez manos se levantaron cuando Marilyn dijo aquellas palabras.

Marilyn señaló a una mujer que parecía bastante mayor. Este se irguió para prepararse para soltar su discurso.

-Sé que esta chica es la hija de la quién era nuestra líder, pero opino, que por el bien de nuestra raza, se la devolvamos a Derek -mucha gente asintió, de acuerdo con ella.

Otra mujer, esta vez más joven con la primera, fue la siguiente en hablar.

-Opino lo mismo. Todos queríamos que su heredera volviera, pero el plan ha salido mal. Y si todo eso supone morir todos, pienso que lo mejor es dársela a ese chupasangre -las otras ocho personas concordaron lo mismo, diciendo que lo mejor era que volviera con Derek, por mucha pena que les diera.

-Muy bien. Veo que la mayoría opináis que la marcha de Karen sería lo mejor -comenzó a hablar Marilyn- Pero mi veredicto es que no -la gente comenzó a replicar, pero ella dió un fuerte golpe sobre la mesa callándolos a todos- No vamos a dejar a Derek que gane tan fácilemente. Siempre se ha estado burlando de los de nuestra raza, y no voy a permitir darle la victoria de esta manera. No así.

Yo me quedé estupefacta ante el poderío que tenía aquella mujer al hablar. Me sentía bastante incómoda al tener aquella toda gente hablando sobre mí como si yo no estuviera allí.

-Yo... -dije después de que me aseguré que Marilyn había terminado. Todos se volvieron hacia mí- Por mucha rabia que me dé, si tengo que volver con Derek, lo haré. Por el bien de todoa vosotros -los caza vampiros me miraban maravillados ante lo que estaba diciendo- Mi madre habría querido que todos vosotros estuviérais a salvo, y pienso hacer esto por ella.

-Karen -me nombró Kevin- No vas a ir a ningún sitio -sentenció él, que estaba de pie detrás de mí, como si fuera mi guardaespaldas- Karen debe quedarse aquí. Es una de los nuestros. ¿De verdad le daríais a un vampiro como Derek a una de los nuestros así como así? -su voz llenaba la sala. Estaba decidido y convencido de lo que etaba diciendo- Nunca lo hemos hecho. Y no lo vamos a hacer ahora -la gente se quedó en silencio sin saber como responder al discurso de Kevin.

-Yo voto que no se vaya Karen -levantó la mano Taylor, guiñándome un ojo, haciéndome saber que estaba conmigo.

-Yo también -hizo lo mismo Kevin. Depués de él, levantó la mano Marilyn. Segundos después, casi todos los miembros de la sala levantaron las manos, dando por concluido que era de los suyos y que sí. Que me iba a quedar allí.

Salí de la sala acompañada de Taylor y Kevin, después de haberme despedido de Marily agradeciéndole su apoyo.

-Muchas gracias chicos. De verdad. Ha significado mucho -les dije una vez que nos sentamos en una de las mesas de la cafetería con nuestras bandejas llenas de comida.

-No hay de qué -hizo un ademán con la mano Taylor- Tienes de pinta de ser una buena chica. Seguro que nos vamos a hacer buenas amigas -y se metió un puñado de macarrones en la boca.

-Lo mismo digo -me miraba fijamente Kevin. Yo le sonreí, tímida, y también empezé a comer.

-Se ve que le importas mucho a ese vampiro -comentó Taylor tras beber agua- Para declarar una guerra, tiene que haber una importante razón de por medio -Kevin coincidió con ella- ¿No lo habrás enamorado?

-¿¡Qué!? -casi me atraganté- ¿Es que no lo sabes? Se casó -ella se quedó con los ojos abiertos.

-Qué fuerte. Creía que los vampiros no tenían sentimientos -y siguió comiendo.

-Lo que si tengo claro es que pienso vengarme de lo que le ha hecho a mi madre -y dí fuerte con el tenedor al plato.

Esta vez, ya no sería la chica tan fácil de controlar. Le iba a enseñar a ese chupasangre que ya no le temía a nadie.

ESCLAVA DE SANGREDonde viven las historias. Descúbrelo ahora