Día 53 Meditemos Hoy Un Momento En Salmos 91:7

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Recibir a Cristo en nuestra vida como Señor y Salvador es la seguridad más grande de protección, y la confianza mejor guardada, no confiamos en supuestos, confiamos en la seguridad de la palabra que ha salido del corazón de quien nos creó, cuando ...

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Recibir a Cristo en nuestra vida como Señor y Salvador es la seguridad más grande de protección, y la confianza mejor guardada, no confiamos en supuestos, confiamos en la seguridad de la palabra que ha salido del corazón de quien nos creó, cuando creemos a la palabra ponemos nuestra confianza no en simples letras, ponemos nuestra confianza en la palabra escrita de nuestro amado Dios.
Debemos entender esto porque somos seres frágiles y el lugar más seguro que podamos encontrar es en el refugio de la presencia de Dios, podemos buscar e intentar hacer miles de cosas con nuestros propios esfuerzos pero en definitiva siempre vamos a necesitar de este maravilloso ser superior que nos cuida y se preocupa por nosotros, por supuesto que les estoy hablando de Dios, en medio de nuestra dificultad, de los momentos de aterradora angustia, él es sólo el único que puede sacar nuestra vida a flote, no importando la situación que estemos viviendo y esto es lo que estamos meditando el día de hoy miremos que dice la palabra:
"Tal Vez A Nuestra Izquierda Veamos Caer A Miles Muertos; Tal Vez A Nuestra Derecha Veamos Caer Diez Mil Más, Pero A Nosotros Nada Nos Pasará."
Es clara la palabra, no tenemos que buscar significados ocultos, sólo debemos de creer y será puesta a favor de nosotros, tal vez veamos catástrofes, como las que están viviendo nuestros hermanos en el Ecuador (hablo de un fuerte sismo el cual ha dejado a esta nación con gran cantidad de muertes y destrucción con fecha de 16 de Abril de 2016) la seguridad que nos da la palabra es: Que si los propósitos de Dios aún no se han cumplido en ti nada malo podrá pasarte, por este motivo debemos de buscar estar encaminados en cada momento en estos dichos propósitos, para así tener la seguridad que Dios se encargará de nosotros, Dios es un Dios personal, así que debemos de hallar la manera de que cada miembro de nuestra familia también este enfocado en los propósitos que Dios tiene para ellos, porque está promesa de inmunidad frente a la muerte y el peligro es personal he intransferible, esta puede ser digamos la respuesta de porque a algunas personas que considerabamos como buenas le pasaron cosas malas, simplemente porque estaban apartados de estos propósitos de Dios y perdieron por completo la inmunidad dada en la intimidad y la cercanía a nuestro Dios.
Busquemos siempre habitar bajo la sombra del altísimo, morar bajo la presencia de Dios y enfocados en los propósitos que él tiene para nosotros, no olvidemos que estos son personales he intransferibles.
By Charls Ramz.

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