44. Sober

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Pov. Joe

Y ahí me encontraba yo de nuevo, en un bar, de esos que acostumbrábamos a ir con Blanda y de los cuales se habían vuelto de mis favoritos en aquellos tiempos. Estaba mal, lo sé, pero ¿qué más daba? En estos momentos solo quería detener la ansiedad que entraba en mi, necesita mi droga, necesitaba a mi _________.

-Hola Joe, ¡qué milagro el tenerte por aquí! –dijo Bart, viejo amigo del bar, usando un evidente sarcasmo.- ¿qué te sirvo? Siéntate.

-Dame lo más fuerte que tengas..-dijo con cierta amargura en mi voz.

-Por cómo escucho si lo necesitas, en un momento te lo traigo.

No logro entender cómo una persona sin corazón logró separarnos, no logro entender cómo Blanda lo hizo, tengo la esperanza de que ______ recapacite, sé que es inteligente y sé que no se dejará vencer por ella.

He hecho mil cosas para verla y todo ha sido en vano, no me contesta, no me abre la puerta, no recibe mis mensajes, la extraño tanto, el solo hecho de escuchar su voz, su risa era lo único que necesitaba.

Los shots comenzaron a llegar a mi sobre la barra, y uno tras otro iba adentro, saqué mi celular y comencé a mirar todas las fotos que teníamos juntos, no hay duda que es maravillosa, esa mirada, sus labios, su sonrisa, sus largas piernas, no soy un pervertidor pero... Tendrían que verlas para entenderme.

Y los shots seguían, un rato después comencé a sentir un leve mareo al levantarme al baño, creo que el alcohol comenzaba a hacer efecto.

El tiempo pasó muy rápido eran pasadas de las 3am, mi celular no dejaba de sonar, no me importaba contestar, ni me importaba ver de quién era la llamada.

-Dude, deberías dejar de tomar, ya es demasiado...-dijo Bart.

-Nunca es demasiado...tráeme otra, copa de whisky esta vez. –dije.

-Mejor contesta tu celular, deben estar buscándote, ya es tarde.

-Nadie me busca, soy un adulto..-¿lo era?

-De acuerdo... "adulto" –se fue.

Dejó de sonar el maldito celular y miré mi fondo de pantalla con ella, necesitaba escuchar su voz, aunque sea una última vez, como veía las cosas creo que así sería, ella se iría y claramente sin perdonarme ni regresar conmigo... Creo que el alcohol aclaró mis ideas.

Marqué su número, ni siquiera contestó, ¡MALDITA SEA! Debes contestar. Tomé toda la copa de golpe que habían dejado previamente y levanté mi mano en señal de que quería otra y continúe.

Pov. _________

¿Quién en su sano juicio llama por la noche? Estaba completamente dormida, encendí la lámpara de noche que estaba sobre la mesa y volteé a ver mi celular, era una tonta, lo había dejado encendido, debí apagarlo, cuando me dispuse a hacerlo vi no una, sino 6 llamadas perdidas de Joseph, miré la hora, 3:40am, era tarde y no era normal que él me llamara a esta hora.

¿Y si había pasado algo con él? ¿Y si le hablaba a Olivia o a Nick? Pero y si él estaba bien y solo los despertaba sería feo.

Esperé un poco, la última llamada no había sido hace mucho, quizás llamaría de nuevo.... ¿Y si tuvo un accidente? No, Dios, quita estos pensamientos de mi.

Pensándolo bien, hace mucho que no me preocupaba por dejar todo en él, sí, en Dios, si una cosa sabia es que no debía alejarme ni perderme, él puso en mi camino a Joseph pero también podía quitarlo, ¿no? Sé que él quitará también todo dolor y duda, no me puede abandonar.

Everyday with you is like a song. [Terminada]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora