Everyday with you is like a song. [Terminada]

5. The way

~~~~~~~~~~

-¡Cállate Adam! - reía sin parar.

-Juro, que fue la experiencia más traumática de mi vida, jamás volveré a tus clases de baile.

-Te toqueteó bastante.-trataba de contener mi risa.

-¿Bastante? ¡Bastante fue poco a comparación de eso!

-Te dije que no entraras pero el joven no me quiso escuchar. -volví a reír- te quería sólo para ella.

-¡Ya no quiero ir! ¡Ayúdame! ¡Deja de reírte! -me tomó por los hombros con cuidado sacudiendome tratando de ser más dramático.

-Y eso es que sólo llevas una semana. -seguía riéndome.

-Vaya amiga, dejarás que abuse de mi -puso cara de sufrimiento.

-Tu lo buscaste. -guiñé mi ojo.

-Eres una horrible persona.

-Tú más -le saqué la lengua, dejando de reír poco a poco.

-Insisto, ¿porqué no sacas tu auto? De verdad llegaríamos más pronto.

-Debemos ejercitarnos. -lo miré con una sonrisa.

-Me ejercito lo suficiente. Mira estos brazos. -se detuvo para mostrarlos.

-¡No seas egoso! -le di un golpecito en el hombro y volví a reír.

-Es parte de mi. -rió y seguimos caminando.- no entiendo como lo has hecho.

-¿Hacer qué? -lo miré de nuevo.

-Hacerme olvidar la necesidad por drogarme.

-Oh, eso.. Yo no he hecho nada, tu sólo lo has hecho -sonreí.

-Sabes que no, hace un mes pude morirme y a pesar de todo me ayudaste a salir adelante.

-Dulce. -mencioné recordando su dulce diario. Me detuve a sacar un caramelo de mi bolso.

-Ya no lo necesito. -detuvo mi brazo, haciéndome detener mi búsqueda.

-Es para evitar la ansiedad Joe..-hice una mueca.

-Estando contigo olvido la ansiedad, las ganas de buscar heroína, todo.

¿Qué rayos está diciendo? Calma ____, es sólo amistad.

-Bueno, es porque ambos nos distraemos.-sonreí normal.

Su celular comenzó a sonar interrumpiendo su respuesta.

-Es mi hermano Kevin.-se tensó un poco.

-Él siempre te llama, deberías contestarle sólo para que sepa que estás bien. -puse mi mano sobre su brazo acariciandolo un poco. Me miró y sonrió.

-Lo haré, sólo porque tu lo dices -tomó un respiro profundo antes de contestar.-¿hola?

-¿Joseph? ¿Eres tu? -alcancé a escuchar.

-Si Kevin, soy yo -dijo pasivo.

-¿Dónde has estado? -su voz se escuchaba con preocupación.

-Kevin, estoy bien, sólo eso te diré, muy bien -volteó a verme y me sonrió de nuevo.

Su sonrisa es hermosa, me encanta. Sí, tengo que aceptarlo, ¿a quién no le gusta la sonrisa de Joe Jonas?

-No, creo que no es el momento. -dijo Joe.- simplemente aún no me siento preparado.

Seguro le pidió que se vieran, ya no podía escuchar.

-Kevin por favor, ya dije que no, quizá en unas semanas más.

Sí, era seguro que querían verlo.

-No quiero verla, ni siquiera se molesten en llamarla, no quiero saber nada de ella.

¿Su novia? ¿Hablaba de ella?.

-Dale un fuerte abrazo a mamá de mi parte, los amo. Adiós. -colgó y guardó el celular en el bolso de su pantalón, su mirada se veía decaída.

-¿Estás bien? -esperé su respuesta.

-Sólo quiero que cuando me vean de nuevo noten un cambio.

-Y lo harán Joe, tu aspecto ha mejorado, juraría que pareces ser el chico del 2010 con larga cabellera y vida en su rostro.

-¿En el 2010? ¿Me conocías desde antes?

-Sí y es lo último que te diré. -comencé a caminar.

-¿Me ignorarás? _____, deja de caminar así, ¡no corras! -salió corriendo tras de mi.

La gente mirándonos, ambos corriendo entre las personas, ¿creerían que Joe Jonas haría eso? Jamás, siempre pasaba desapercibido, nadie notaba a la estrella, al mediano de los Jonas.

~~~~~

-¡Bájame! -pataleaba mientras me llevaba sobre su lomo llegando al departamento.

-No. Corrí 5 cuadras detrás de ti, debes pagar. Llaves. -extendió su mano.

-Necesito que me bajes para buscarlas.

-Nos quedaremos afuera.

-¿Qué? No. -reía sin parar.

-Te bajaré si preparas el desayuno todos los días.

-¡Pero sí eso lo hago siempre! -lo dije en forma de reclamo de manera divertida.

-Tienes tanta razón..-me baja riendo.- entonces sólo ábreme la puerta por favor.

-El primero que entre gana el control de la tv.

-Hecho. -puso una cara como de "te ganaré"

-Una..-metí la llave y giré.

-Dos..-dijo él.

-¡Tres! -empujé la puerta y corrí hasta el sofá en donde estaba el control, antes de que lo agarrara Joseph me tomó abrazada por detrás.

-¡Te quiero tanto!

-¡No es cierto! -reíamos ambos.

-Claro que si. -tomó el control- y gané.

-Eso fue trampa.

-Yo nunca hago trampa. -dijo soltándome, riendo levemente y sentándose.- te invito a ver la televisión.

-¡TRAMPOSO! -me senté a su lado.

-Sabes que los canales que vemos siempre son buenos y más conmigo a tu lado.

-Ya viene tu ego de nuevo. -reí.

-No puedo evitarlo. -se burló de sí mismo.

-Déjale ahí, seguro es una película buena.

Efectivamente era una película, ¿interesante?. Miraba a Joe de reojo y de verdad no podía creer que tuviera ese cambio, regresó a ser el chico que siempre soñé sería así.

-Te digo un secreto.

-¿Qué pasa?

-Amo la manera en la que me haces sentir.

-.......- ¿WTF? ¿De nuevo? ¿Se está enamorando de mi? Debe ser una broma.

-¿No dirás nada? -me miró .

-Es sólo que... No se cuál es la forma en la que te hago sentir.

-Me haces sentir paz, me siento feliz, completo, como antes, o quizá hasta mejor.

-Oh, ya, pues, es porque estamos riéndonos todo el día y todo eso! De eso se trata, disfrutar la vida, por cierto mañana iremos a la iglesia, y nada de no.

-Sí, mamá- rió.

-¡Oye! -le di un golpecito en el hombro.