Mi Niñero. (Sin Editar)

Capítulo 13: "Princesinha"

(Tío de Tory en galería)

Victoria

Bajo las escaleras del tercer piso al segundo mientras observo la pantalla de mi teléfono y los miles de notificaciones en mis redes sociales a causa de mi nueva foto, interesantes comentarios los de mis seguidores. Por no mirar mi camino me terminó chocando con alguien y al levantar la vista veo a Magnus en la puerta de su habitación.

-Hey-dice-¿lista?

-Si.

Asiente y empieza a caminar hacia las escaleras, las cuales bajamos a la par para ir hacia la puerta principal y salir a la entrada. Bajo las escaleras marmoladas y sigo a Magnus hasta su auto mientras alrededor ya los guardias se están moviendo para organizar de quién es el turno de acompañarnos.

-¿No hay problema si vamos en mi coche?-pregunta acercándose a la puerta del conductor.

-No, claro que no-digo y quita la alarma del coche.

-Señorita Klett, estamos listos-dice Uriel y asiento-lo seguimos, señor Brandi.

-Gracias-dice Brandi y sube al coche.

Abro la puerta del copiloto del carro deportivo y me meto dentro. Lo primero que noto es lo increíble que huele, si, huele a su dueño, algo originalmente embriagador, a decir verdad. Debo admitir que tiene un excelente gusto en coches, el ronroneo del motor de este es algo estupendo y su estética es increíble, encaja con la palabra "lujo" en todos sus aspectos. Empieza a conducir por la gravilla detrás de la camioneta de los guardias hasta estar fuera de la propiedad.

-¿Tienes idea de a donde quisieras ir?-pregunta mientras enciende el estéreo del coche.

-No en verdad, no pense en algun destino-respondo recostando mi cabeza en el respaldo del asiento.

-¿Puedo tomar el control de nuestra próxima parada?

-Claro, sorpréndeme.

-Bien-dice con una sonrisa complaciente-¿pones algo de música?

Asiento y tomo mi teléfono de mi bolso para conectarlo al estéreo del auto, entró en la aplicación de música en busca de alguna que me apetezca escuchar y me decido por una canción latina del género "reggaetón" para ser más precisos.

-Me agrada tu variado gusto musical-dice.

-Un placer.

Fijo mi vista en la carretera al frente y veo como el sol ingresa por el parabrisas con todo su poder, el día es muy agradable y el calor es soportable al menos. Magnus sube el volumen de la música mientras mueve la cabeza al ritmo de esta, lo imito mientras canto por lo bajo.

El resto del camino nos la pasamos hablando sobre algunas canciones que voy reproduciendo y el tambien me muestra un par de canciones que en este momento no para de escuchar. Mucha de la música que oímos le gusta al otro, cosa que me parece genial.

-Llegamos-dice.

Miro por la ventanilla del coche y sonrió al ver el Starbucks a un lado de la calle, si esta es su sorpresa me encanta, ya que no hay nada como un frape para un día como hoy. Apaga el coche y recién salimos de este cuando los guardias ya están afuera de las camionetas esperándonos. Uriel se ofrece a tomar mi bolso y se lo tiendo, no sin antes sacar mi teléfono de este. Algunos se quedan afuera distribuidos por la acera y solo dos entran con nosotros al local, para no llamar tanto la atención, cosa que me parece algo ridícula ya que igualmente nos notan.

Mientras esperamos en la fila para pedir algo, noto varias miradas sobre nosotros, alguna que otra persona intentando tomar fotos y algunos otros hablando entre sí sin dejar de vernos. El precio a pagar de tener un apellido reconocido, por más que me gustaría no llamar la atención y dejar que los medios me sigan tanto, no puedo, mis padres me exponen desde que tengo pañales, siempre hemos estado frente a una cámara por puro descuido.