-¡Por fin!-siseó Tom -. ¡Ya te tengo!
Dietmar dio un respingo y se volvió hacia Tom con los ojos muy abiertos.
-Tranquilo. Austen: puedo proporcionarte un caso para que lo resuelvas.
-Estas mintiendo para salvar el pellejo.
-No. Sueltame el brazo y te lo contaré.
Tom dudó un momento, le retorció más el brazo, lo que hizo dar un respingo a Dietmar, y luego le solto. Prefería un caso, más que el vengarse.
-¿De qué se trata?- preguntó Austen-.
Desembrucha lo que sepas.
Dietmar se rió.
-Tu y tu manera detectivesca de hablar.
¡Eso suena ridículo!
-Limítate a contarme los hechos, Oban.
Dietmar le indicó un hombre que estaba sentado en el mirador.
-¿Ves aquel tipo?
-Sí.- Tom sólo veía la parte trasera de la cabeza de aquel hombre: su pelo gris y su traje oscuro parecían bastante corrientes--.
¿Que pasa con él?
-Siéntate a su lado y verás de qué se trata.
Tom se incorporó, dio unos pasos por el estrecho pasillo y se sentó junto al hombre.
Para evitar cualquier sospecha, bostezó, se desperezó y luego fingió quedarse adormilado. Contó mentalmente hasta treinta y luego entre abrió los ojos. Aquel hombre tenía puestas unas esposas en una de sus muñecas.
Tom emitió unos sonidos entrecortados y el hombre se volvió hacia él. Pero Tom fingió que estaba soñando, hablando entre dientes, y después comenzó a roncar suavemente.
Esperó un poco para que se tranquilizara el hombre, y volvió a abrir los ojos. Sí, llevaba puesta una esposa en una de las muñecas, y una pequeña cadena la unía a la segunda esposa, que se cerraba sobre el asa de un maletín negro que descansaba en su regazo.
Observó que el maletín tenía una cerradura provista de combinación, pero no había ninguna señal que delatara el contenido del maletín.
Tom fingió despertarse lentamente, haciendo chasquear los labios y desperezándose.
Luego se incorporó de la butaca y regresó junto a Dietmar.
- Vi subir a ese tipo- murmuró Dietmar-, y me figuré que te interesaría investigar sobre él.
Tom miró recelosamente a Dietmar.
- Pretendes burlarte de mi?
- No, en serio. Ya sé que cuando seas mayor quieres dedicarte a resolver crímenes.
Que decías que quieres ser...?
- Un sabueso. Es decir, un detective, como los hermanos Hardy.
ESTÁS LEYENDO
Asesinato En El Canadian Express
Teen FictionTom usten, un muchacho canadiense que acaba de terminar el curso escolar, viaja en este ferrocaril, el de mayor recorrido del mundo sale diariamente de montreal y emplea tres dias en llegar a su destino, vancuver