Una nueva oportunidad para el amor
Stephen POV
Estaba sentado en mi asiento sin nada que hacer desde hacía diez minutos, no había llegado el profesor ni muchos de mis compañeros, tal vez unos cuantos por lo cual cada quien se sentó en un lugar desocupado dejando una silla disponible para cualquier otro que quisiera sentarse.
Observaba por la ventana sin ver nada en realidad mientras movía mis dedos encima de la mesa. Muchos murmullos a mí alrededor me sacaron de mis pensamientos y tuve que ver qué pasaba.
Muchos chicos miraban hacia la puerta con una sonrisa tonta y otros saludaban a alguien... Moví mi cabeza para ver quien causaba tanta emoción. No pude evitar soltar un suspiro y poner la misma expresión de los demás al contemplarla.
Kristen entraba tranquilamente mirando a la nada, pero tan hermosa como siempre. Su largo y ondulado cabello castaño se movía al ritmo de sus pasos y hacia un espléndido contraste con su piel blanca, sus fascinantes ojos celestes junto con sus largas pestañas dejaban sin aliento a cualquiera que mirase, sus finas facciones la hacían parecer una muñeca de porcelana, tan frágil y perfecta. Sus labios rosas eran tan atrayentes que cada vez que los movía era inevitable no verlos.
Tal vez ella no se daba cuenta de lo que provocaba en los demás, casi todo los hombres del instituto que conocía estaban secretamente y no tan secretamente enamorados de ella, no era porque tuviera la fama de chica popular o porque tuviera el mejor cuerpo, sino por su sencillez y dulzura que manifestaba cuando alguien la saludaba o le lanzaba un cumplido, ella se dedicaba a devolverles el saludo o bajar la mirada mientras es sonrojaba con una leve sonrisa.
Cualquiera que tuviera lo que tiene ella, era seguro que estaría presumiéndolo a los cuatro vientos y sería alguien demasiado arrogante, pero no Kristen. Era hija de un hombre tan millonario y famoso que podría cumplir cualquiera de sus caprichos, pero Kristen tan sólo quería seguir en California en vez de estar en Europa o viajando por el mundo con su futuro asegurado.
No le despegué la vista de encima hasta que estuvo lo suficientemente cerca para percatarse de mi presencia, al verme noté como se ponía nerviosa hasta adquirió un tono rosado en las mejillas. Me sentí maravillado cuando vi su leve sonrisa.
Le hice una seña de que se sentara conmigo y asintió. Observé como muchos de los chicos la miraban entretenidos pero luego perdieron la sonrisa cuando se sentó junto a mí.
—Hola—saludó con su dulce mirada.
—Hola. —Me atreví a acercarme y darle un pequeño beso en la mejilla. Kristen se tensó y se acomodó mejor en su asiento con otra tímida sonrisa —. Vaya... ya sonríes—reí al examinarla.
Últimamente la veía muy triste y cansada, ahora parecía ser una chica completamente diferente... me agradaba mucho más, ya no se veía tan distante ni enojada conmigo, eso me daba más esperanzas para poder estar a su lado.
— ¿Por qué lo dices? ¿Antes no lo hacía? —preguntó frunciendo sus delgadas cejas.
—No con frecuencia, no desde que sucedió lo de tu...—Me callé automáticamente, no quería hablar de más y hacerle recordar algo malo que le había pasado.
— ¿Secuestro? —completó por mí y yo asentí cohibido—. Sí, me lo dijo Jenny, bueno ya es pasado—alzó los hombros y apoyó su codo sobre la mesa para recargar su cabeza en ella.
La miré extrañado, había cambiado casi drásticamente su forma de ser, antes casi ni me hablaba ahora lo hacía casi con indiferencia.
—Te noto rara—susurré por lo bajo al ver que venía el profesor.
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LoveMechanic: La Obsesión del Amor
RomanceKristen Máximus siempre ha vivido bajo la mirada estricta de su padre, un importante hombre de negocios. Vive una vida de estrés y de muchos peligros a su alrededor desde la muerte de su madre, de la cual curiosamente se culpa. Después de un terribl...