R u mine? | HoSeok ; SeokJin

07

HoSeok y yo nos lanzábamos agua uno al otro. No parábamos de reír. Llegó un momento que le pedí que parara, pero sólo era una trampa. Me acerqué a él con las manos en el rostro, quitando el agua que él me había lanzado. Él me miraba, sin saber cuál era mi plan... yo tomé su cabeza, tomándolo por desapercibido y lo hundí luego traté de irme lejos de él. Pero HoSeok me tomó por la cintura y nos hundió a ambos. Cuando salimos del agua él aún me tenía sujetada por la cintura, su rostro estaba a escasos centímetros de la mía. Su respiración chocando en mis labios, pufe sentir el olor del café helado que había tomado antes. Acercó más su rostro al mío, estábamos por besarnos, pero las voces de unas personas acercándose al lugar donde estábamos nos sorprendió, yo me alejé de HoSeok. Un grupo de chicas y chicos estaban caminando hacía la mesa dónde minutos antes HoSeok y yo estábamos. Yo hundí mi cuerpo en el agua, no quería que me vieran en ropa interior. HoSeok por otro lado, salió del agua no importándole que ese grupo de personas lo vieran.

Las chicas allí presentes se quedaban viéndolo y se decían cosas al oído y luego reían. Sé que deben estar hablando de lo bien que se ve. Los chicos sólo lo miraban extrañados. HoSeok recogió la ropa en el suelo de ambos y fue al auto a ponerla allí, luego buscó algo en el maletero del auto y volvió. No dijo nada, entró al agua con una camisa negra en mano y la puso por mi cabeza, haciendo que se mojara.

— Lo siento por esto. — habló por fin — ya en el auto te pondrás ropa seca, no quiero que "hormonas revolcadas" — señaló a los chicos detrás de él — te miren.

— Oh, está bien. — me sonroje por lo que había dicho, no quiere que me miren, que lindo.

Salí del agua abrazada a él, la camisa me quedaba algo grande, pero no lo suficientemente larga. Me quedaba un poquito más abajo de mi trasero, mi ropa interior casi se ve y los chicos allí no dejaban de mirar. Todo estaba bien hasta que uno de los allí presentes dijo un comentario innecesario.

— Bonito culo, nena. — escuché la voz de uno de los chicos, pero no sé cuál exactamente. HoSeok se giró y los fulminó con la mirada.

— ¿Quién ha sido el idiota? — dijo HoSeok, los chicos se rieron. Miré a HoSeok quién había apretado su mandíbula. — Puedes hablar pero no mostrar tu cara, ¿eh? Eso demuestra lo poco hombre que eres, no tienes el valor de enfrentarte a un verdadero hombre. — sonrió HoSeok. Ellos sólo dijeron un "ohhh" y empujaban al que parece ser quien dijo el comentario.

HoSeok me cubrió con su cuerpo y seguimos nuestro camino hacía el auto, abrió la puerta para mi y me sacó la camisa mojada. Me dio mi ropa.

— Ponte la ropa, cuando estés lista me llamas. — dicho eso cerró la puerta. Por suerte los cristales del auto son oscuros, así que no podrán verme mientras me visto. Al terminar de ponerme la ropa, abrí la puerta y llamé a HoSeok. Él ya se había puesto los pantalones, sólo tenía el torso desnudo. Se subió al auto, lo encendió y aceleró.

La noche estaba cayendo, mis ojos se sentían pesados y aún no he llegado a casa. Apesar de que no quería salir, no la pasé nada mal. Fui al centro comercial, pasé una gran vergüenza, veo a un hermoso hombre semi desnudo en el agua y por poco me ve un grupo de gente en ropa interior. Un sábado poco normal, pero nada mal, lleno de diversión. Fue bueno salir. Si no lo hubiera hecho probablemente estaría en mi cama viendo alguna película o leyendo.

— Hemos llegado a tu casa, HaNeul. — movió mi hombro suave.

Abrí los ojos y pude ver mi casa. Le di las gracias a HoSeok por llevarme al lago y le dije que sería divertido repetirlo en algún otro momento.  Estaba casi por bajar del auto pero él agarró mi brazo y me hizo subir de nuevo. Me ordenó a cerrar la puerta y desabrochó su cinturón.

— HaNeul. — dijo mi nombre de la manera más sexy que alguien haya podido hacerlo.

— ¿Sí, HoSeok? — mis mejillas ardian.

— ¿Puedo...— acercó su rostro al mío — besarte? — sus labios rosaban los míos. Las ganas de besarlo sólo crecían más y más.

Quiero que me bese, pero el anillo en su dedo me hace dudarlo, no quiero ser su amante. No puedo. Me sentiría terrible luego. Intenté alejarme pero el puso su mano en mi nuca y me volvió a acercar a él. Miró mis ojos y luego mis labios, lamió los de él y yo mordí mi labio inferior.

— HoSeok...yo— intenté hablar pero el puso su dedo sobre mis labios.

— Sh, sh, sh. — estuvo a nada de juntar nuestros labios cuando su celular comenzó a sonar — maldita sea.. — cerró los ojos y esperó unos segundos para alejarse de mi y por fin responder a quien sea quien llamaba.

Le dije adiós con la mano y me bajé del auto. El sonrió de lado y se encogió de hombros. Corrí hasta mi habitación y me tiré sobre la cama. Toqué mis labios y no dejaba de pensar en HoSeok. No dejo de imaginar como se sentirían sus labios sobre los míos.

— ¡Esto está mal! — cubrí mi rostro con una almohada y rodé en la cama unas tres veces hasta que me quedé dormida.

De tanto que he pensando en cómo besaría HoSeok, creo que soñaré con él.

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