R u mine? | HoSeok ; SeokJin

20

Ambos nos preparábamos para volver a la ciudad. Ya estaba casi todo de vuelta en el auto. Quisiera quedarme más tiempo, pero apuesto que HoSeok no puede por el trabajo o...probable su esposa. Espero que pronto HoSeok se divorcie de la chica con la que está casado. Quiero estar segura de que es completamente mío.

Cuando ya todo estaba listo nos subimos al auto y HoSeok comenzó a manejar. Una canción lenta de fondo se escuchaba, ambos íbamos en silencio. Mi mano se encontraba reposando en mi rodilla pero otra mano siendo entrelazada con ella la llevó a reposar sobre el regazo de HoSeok. Yo me sonrojé un poco y sonreí. Mi corazón corre como una manada de caballos salvajes. ¿Me estoy enamorando de HoSeok? ¿Así se siente estar enamorado?

Este momento, justo aquí, se ha convertido en el momento favorito de mi vida. Me siento tan feliz. La compañía de HoSeok me llena por dentro. Siempre que estoy con él la paso bien y soy feliz pero cuando vuelvo a mi habitación se siente tan fría y sola, haciendo que extrañe la presencia y calidad del cuerpo de HoSeok. Mi habitación solo se siente así desde que Este chico llegó a mi vida. Amaba estar en mi habitación, completamente sola con un libro o una buena serie que ver pero ahora prefiero salir y explorar el mundo junto al chico a mi lado. ¿Esto que siento es amor? Si esto que siento es amor, ¿debería decirle a HoSeok o debería mantenerlo en secreto? Si le confieso mi amor, ¿seré correspondida?

¿Cómo es que terminé con este lío de sentimientos? No debí, definitivamente no debí aventurar con un hombre casado. Mi mente quiere explotar. Tantas preguntas y no tengo una sola respuesta. Mi cabeza es un lío y mi corazón es uno más grande. Debí alejarme cuando pude, así no estaría aquí, pensando en si mi amor será correspondido por un hombre con una esposa que lo espera a diario en casa.

Mordí mi labio, mis ojos se cristalizaron. Las ganas de llorar eran cada vez más grandes. Mis lágrimas querían recorrer mis mejillas pero no lo dejaré pasar, no en frente de HoSeok.

— ¿HaNeul? ¡HaNeul! — escuché la voz de HoSeok, el chico que me ha hecho perder la cabeza por completo.

— ¿Huh? ¿Pasa algo, HoSeok? — traté de sonar normal, tuvo miedo de que mi voz se quebrara pero por suerte no lo hizo.

— Hemos llegado, linda. — sonrió, miré a mi lado derecho y pude ver mi casa. Por fin habíamos llegado.

— Oh. — fingí una sonrisa — Gracias por todo, HoSeok. Me has hecho muy feliz estos días. — sostuve su mano, él la apartó para colocarla en mi mejilla.

— HaNeul, gracias a tí por llegar a mi vida. — sonrió de lado — Eres el ángel que tanto rogué al cielo que me enviara.

— Que cursi ha sido eso. — coloqué mi mano sobre la suya en mi mejilla.

— Si que lo ha sido, por tal razón, debes sentirte afortunada. No soy de esos chicos cursis. — rió.

— Como digas. — reí con él. — Ya es momento que me vaya. — acerqué mi rostro al de él y le di un corto beso en los labios y me bajé del auto.

Caminé hasta la puerta principal y esperé a que el auto de HoSeok ya no se viera por mi calle. En cuanto desapareció de mi vista subí a mi habitación corriendo. Solo quería tirarme a llorar. No soporto los pensamientos sobre lo zorra que he sido al entrar a la cama con un hombre casado. Mi mente no deja de recordarme, de torturarme, por ser tan fácil y haberme metido en la cama con HoSeok. ¿Porqué estos pensamientos tan repentinos? No soy una rompe matrimonios si el matrimonio ya estaba roto, ¿eso no es así?

Tratando de despejar la mente de todo pensamiento, llamé a Hye. Necesito hablar con ella. Debe estar preguntándose dónde estuve estos últimos dos días.

Al cuarto tono por fin logré escuchar la voz de Hye.

— ¡PARK HANEUL! ¡¿AHORA APARECES?! ¡¡¿CÓMO TE ATREVISTE?!! — gritó Hye al otro lado de la línea telefónica — ¡Agh! ¿Qué haré contigo? Estás creciendo tan rápido. Me siento como una madre que ve a su hijito partir de casa. — dijo dramática.

— Hola, Kim So Hye. — respondí.

— ¡Te he dicho que nunca me llames por mi nombre completo! Solo soy Hye. — suspiró — Dejando eso atrás, ¡¿dónde demonios has estado?! ¡No sabes lo mucho que YoonGi y yo nos preocupamos! ¿Cómo pudiste solo dejar una tonta nota diciendo "saldré con HoSeok unos días"? — Hye verdaderamente estaba preocupada, se podía notar en su tono de voz.

— ¿Lo siento? — dije acostándome en la cama.

— Tienes mucho que contarme, pequeña HaNeul. — mantuvo silencio unos segundos — iré a tu casa ahora mismo. — dicho eso cortó la llamada.

Me cambié a mis pijamas y me lancé en la cama. Hye no tardaría en llegar, ella tiene una llave para entrar, así que decidí dormir los minutos de silencio que tendré antes de que entre por esa puerta.

No pasaron ni siquiera unos quince minutos cuando sentí a alguien brincar sobre mi. Me giré como pude para encontrarme con el lindo rostro de mi mejor amiga, Hye. Ella sonrió y yo le devolví la sonrisa. La extrañé demasiado.

Ambas bajamos a la cocina para preparar un poco de café y poder sentarnos en la sala a tener una buena conversación sobre todo lo que ha pasado.

En cuanto el café estuvo listo tomamos asiento en el gran sofá de mi sala.

— Así que...¿qué ha pasado? — habló Hye y luego sopló su café.

— HoSeok me ha llevado a una cabaña fuera de la cuidad. — dije tratando de restarle importancia.

— ¡¿De verdad?! — abrió la boca en forma de una pequeña "o" y yo asentí.

— Estuvo todo muy bonito, la verdad. Él fue increíble. — me sonrojé al recordar lo que habíamos hecho en aquel lugar.

— ¿Y...no pasó nada entre ustedes? — su tono era completamente de curiosidad.

— Eh, bueno. ¿Algunas...cosas? — mordí mi labio.

— ¡¿Qué hicieron?! — preguntó con frustración.

Aquí va la bomba.