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Me encontraba en la cocina, preparando algo para poder comer. Hacía la mezcla de panqueques mientras escuchaba algo de música. Movía mis caderas al ritmo de la música. Miré mi celular, pensando en que Hye no ha venido a casa en días y tampoco hemos hablado muchísimo.

Desbloquee el celular y comencé a escribir un mensaje para ella pero una llamada de HoSeok no me permitió terminar el mensaje. Respondí la llamada y hablé,

— ¿Sí, HoSeok? — metí mi dedo en la crema de maní y la metí a mi boca.

— HaNeul, buenos días. ¿Tienes para hoy?

— Mmm, la verdad no. — respondí unos segundos más tarde.

— ¿Te apetece salir hoy conmigo?

— ¿U-una cita? — estaba algo sorprendida.

— Claro, una cita. Tu y yo. Solos. — puedo asegurar que tiene esa hermosa sonrisa seductora en su rostro.

— ¡C-Claro, HoSeok! — sonreí ampliamente.

Subí escaleras arriba como un leopardo. En menos de una hora HoSeok me buscaría. Por la emoción de salir con HoSeok, olvidé hasta desayunar. Me di una rápida ducha. Abrí mi armario y busqué que ponerme. Debo actualizar un poco mi ropa, tendré que un día quedar con Hye para ir al centro comercial.

Saqué un bonito vestido azul corto, unas cómodas sandalias, ricé un poco mi cabello, delineé mis ojos y listo. Me miré en el espejo para revisar que todo estuviera bien. Miré mi vientre y sonreí, el traje era ceñido a mi cuerpo y mi pequeño bebé ya había crecido un poco, lo suficiente  para que se notara mi embarazo.

— Serás tan bella como tu madre o tan apuesto como tu padre. — dije mientras acariciaba mi vientre.

Realmente espero que este bebé sea de HoSeok.

El sonido de un golpe en la puerta me asustó. En cuanto bajé abrí la puerta encontrándome con un hermoso HoSeok sonriente. En sus manos una caja que parecían ser chocolates.

— Para ti. — me extendió la cajita y un sobre.

— ¿Qué es esto? — puse el sobre encima de la caja, y él sonrió ampliamente.

— Léelo.

Él sostuvo la cajita un momento y yo comencé abrir el sobre. Por alguna razón me sentía nerviosa. Saqué el papel que se encontraba dentro y lo desdoblé. Mientras leía mis manos más temblaban.

"Hijo de Park HaNeul comparte un 97.69% de compatibilidad con Jung HoSeok"

Una amplia sonrisa se plasmó en mi rostro. Lágrimas bajaban por mis mejillas, estoy llorando de felicidad. No me importó arruinar mi maquillaje, ¡HoSeok es el padre! Mi bebé no es producto de una violación. ¡Su padre es el hombre que quiero! No saben la felicidad que siento en estos momentos. Mi cuerpo tiembla de emoción.

— Soy el padre, HaNeul. — sus ojos se cristalizaron — ¡Soy el padre! — su tono lleno de felicidad y emoción.

Ambos nos encontrábamos en la puerta de mi casa, llorando de felicidad. Lo abracé, mis lágrimas mojando su camisa y las suyas mi vestido. Quisiera que pudieran sentir esta emoción y felicidad que siento yo en estos momentos.

Luego de tal noticia, cuando por fin nos habíamos calmado fuimos a cenar. Un restaurante similar al que una vez habíamos ido con Hye y YoonGi. Caminamos detrás de un mesero quien nos llevaba a nuestra mesa.

Ambos habíamos pedido una pasta con camarones, exactamente lo mismo que yo había pedido la vez anterior.

Hablábamos muy animadamente, no habíamos parado de sonreír. No podíamos. Era una felicidad inmensa.

En un momento llegó un hombre que ya anteriormente había visto. Era nada más y nada menos que el Dr. Lee. Él sonrió al vernos, HoSeok se puso de pie y le abrazó.

— ¡Dr. Lee! Quién diría que me lo encontraría aquí. — HoSeok sonrió tan ampliamente que sus ojos desaparecieron por un segundo.

— HoSeok, ¿qué tal la noticia? ¿Está feliz? — preguntó sonriente, dando unas suaves palmeadas en el hombro del joven a su lado.

— Ambos lo estamos. — el doctor me miró y yo sonreí, a lo que él me devolvió la sonrisa — era justamente lo que quería leer. Cuando usted llamó y pasé a recoger los resultados, tuve escalofríos, tenía miedo. Pero todo salió perfectamente. Mi hijo está en su vientre. — dijo emocionado, el Dr. Lee se carcajeó.

— Eso es muy bueno, joven HoSeok. Es bueno ser feliz.

— Así es. — HoSeok estaba totalmente de acuerdo.

Mientras ellos hablaban muy felices del bebé se me antojó ir al baño un momento. Me puse de pie y HoSeok me miró, preguntándose a donde voy, a lo que yo solo moví ni cabeza hacia el lado, señalando y baño y él asintió.

Entre al baño y me miré en el espejo. Solté un suspiro. Arreglé un poco mi maquillaje, hice mis necesidades, etc. ¿Por qué estoy tan cansada?

Miré mi vientre y sonreí.

— Tu papá es HoSeok, ¿no te hace feliz eso? — sonreí.

Salí del baño y pude ver que HoSeok y Dr. Lee habían tomado asiento y parecían serios. Me fui acercando en silencio, debe ser algo realmente serio por las expresiones en su rostro.

— La verdad estoy muy feliz porque el bebé es mío. — escuché decir a HoSeok, ese comentario me hizo sonreír — pero ya quiero que dé a luz. He tenido problemas con HaNi. — la sonrisa se esfumó.

— La joven, no la quieres ¿cierto? — en el tono del doctor había algo de decepción. Vi a HoSeok mover su cabeza de lado a lado, negando. — La haz ilusionado, HoSeok. Ella se ve que realmente te quiere, se le ve muy feliz.

— Tiene razón. Sé que he caído bajo. Pero entiéndame, ya quería un hijo y HaNi no podía. Solo se me ocurrió esto.

— Esto está muy mal, Jung HoSeok. Si tu madre supiera esto, ¿crees que estaría feliz?

— No, claro que no. Pero repito, no tenía de otra.

Me cansé de oír esta mierda. La ira se apoderó de mi cuerpo. Mis manos temblaban, mis ojos lagrimeaban, el cariño que tenía hacia HoSeok fue sustituido por odio, desprecio. ¿Cómo es que me pudo hacer algo así? Es un desgraciado.

Me acerqué a él, sus ojos se abrieron como platos. Trató de hablar pero mi mano en su cara lo hizo mantenerse callado. Él colocó su mano en el área donde mi mano le había cacheteado.

— No te vuelvas acercar a mi, Jung HoSeok. — pronuncié su nombre con todo el odio del mundo.

Ouch, pobre HaNeul. Su vida cada vez se pone más difícil. HoSeok la has regado.

R u mine? | HoSeok ; SeokJinDonde viven las historias. Descúbrelo ahora